Chino ; Wos

Quince.

~.Quince.~

Largue un suspiro y me recosté en la pared, sintiendo algo de dolor al ver al estúpido de Valentín abrazado con Ángela, era como una juntada de la ds3 con algunos chicos más, había venido porque me invitaron y ahora parecía una muy mala idea, era como sufrir viendo algo que no quiero, ya hasta parecían una parejita de novela, me daba un poco de asco y ganas de llorar mezclados.

Quité mis ojos de ellos cuando él me miró, y largue un suspiró yéndome con los chicos, estaban hablando de cualquier cosa y yo sólo quería distraerme.

— ¿Y vos Juno, qué elegís? ¿Qué te corten el brazo o que te corten una pierna?—Me habló el Depa, pasando uno de sus brazos por mis hombros y moviéndome un poco, frunci el ceño y me reí.

— ¿Cual es mi otra opción?—Pregunté riendo, Tobo largó una risa y me pasó el porro que se estaban fumando, lo agarré mirando al Depa y él se quedó pensando.

Amaba al Depa, ¿Quién necesitaba al trolo de Valentín?

Bueno yo si.

— Arrancarte un dedo, pero vos sola.—Habló mirándome con cara de psicópata, largue una carcajada largando el humo y seguí pasando el porro por la ronda.

— ¡Sos re turbio!—Grité riendo, el hizo una cara y yo me reí más.—Igual elijo lo del dedo, antes me lo sacaba de lugar.—Hablé mirando mi mano entretenidamente.

— ¿Posta? A ver, sacalo.—Pidió curioso, yo me lo empecé a tironear intentando hacerlo y frunci el ceño cuando no lo pude hacer, lo tire otra vez y largue un grito.

— ¡AY! —Grité moviendo mi mano para todos lados, eso si había re dolido, la puta madre ¿Quién me manda a hacerme la piola?—¡Ah se salió!—Lloriquee.

— No boludo, ¿Que le hiciste Tadeo? ¿Sos gil? ¡¿Cómo le vas a pedir eso?!—Le gritó Wawa pegándole un soplamoco, hice una mueca y el Depa me miró asustado.

— ¡No creí que lo iba a hacer!—Gritó, nos quedamos callados un rato, mirando mi dedo salido de lugar, Tadeo se acercó con su vaso de fernet en mano y se lo dio a la Wawa.—¿Qué vas a hacer?

— Tranquilo chicos, soy doctor.—Se hizo el capo poniendo voz de película, todos nos reímos y yo miré a Valentino cuando dijo algo que no pude entender, algo como dedo flácido o dedo largo, no sé, pero fue un insulto divertido.

Sentí un tirón en mi dedo y largue un grito alto, cuando miré que había pasado me encontré con Tobias mirándome con una cara de inocente y a la vez como dicienodo «ja que capo soy.»

— ¿Ves? Ya sano, ya 'ta.—Sonrió achinando sus ojos.

— Eh ¿Gracias?—Pregunté riendo, nos quedamos mirándonos todos y reímos después de un rato.

— Toma, mete el dedo ahí que se te va a hinchar.—Me dijo Tadeo pasándome su cerveza helada, le di las gracias y metí mi dedo, ay, que buena gente la puta madre.—¿Vamos a bailar?—Me preguntó sonriendo, asentí con la cabeza y me agarró de la mano sana.

Bailamos por un buen rato, me hizo cagar de risa con sus pasos y sus chistes tontos, y lo más lindo es que tenía cuidado con mi dedo en cerveza, me agarró de la cintura y apoyó su cabeza en mi hombro, contándome como un día se había caído de una montaña, mentiría si no digo que me parece un chico re lindo.