16. Regañar y amar

665 132 12
                                    

Setiembre 2007


—Sé perfectamente lo que pasa aquí, KiBum - gruñe el appa del rubio, caminando por su habitación con los brazos cruzados - Y no me gusta nada ¿entiendes? Nada, nada.

KiBum está en su cama, sentado como un indio, rodeado de sus muchos regalos de cumpleaños, pero sosteniendo la enorme tarjeta de JongHyun contra su pecho.

A su appa le molesta su amistad con el mayor, debido a que es un tanto peculiar y bastante cercana.
Para él es extraño que después de tantos años ellos sigan tan unidos, tan celosos uno con el otro, sobre todo porque KiBum ha sido sincero y le ha contado sus sentimientos por JongHyun.

Es por eso que el señor Kim está enojado, porque a pesar de no estar de acuerdo con la vida que está escogiendo su hijo, ni con sus gustos, tampoco quiere que viva algo unilateral toda la vida. Le preocupa.

Piensa que JongHyun saldrá de ese orfanato cuando cumpla los 21, y luego buscará una novia, una familia, dejando de lado a KiBum.

Incluso si el muchacho tiene un claro problema de socialización, tampoco es nada justo que su hijo siga alimentándose de esa amistad.

No es nada sano.

Pero KiBum es tan necio a veces, que ya no sabe cómo hacerle entender lo dañino que es seguir ahí, esperando por algo que claramente no sucederá.

— Ya te dije, hijo - sigue el señor Kim, con las manos en su cintura, serio - Este papel del mejor amigo eterno va a terminar haciéndote daño. Y no quiero eso, cuando puedes tener algo sano con alguna otra persona, que te corresponda sin migajas.

—No son migajas, papá.

— Lo son - repite, sonando más duro - Estoy seguro que ese muchacho terminará por alejarse de ti cuando se entere lo que sientes. ¿Acaso quieres pasar por eso? Tienes tantas oportunidades allá afuera, y las desperdicias en mirar a JongHyun. - KiBum quiere responder, pero su appa continúa, abriendo la puerta para salir - Sólo te voy a decir ésto una vez, KiBum... Déjalo antes que te conviertas en su plato de segunda mesa.

El rubio realmente quiere gritarle a su padre en éste momento. Desea decirle muy muy en alto que JongHyun no es una mala persona, y que jamás rompería su corazón, incluso si algún día se atreviera a decirle que lo amaba.

Aunque es cierto que JongHyun tiene un carácter bastante difícil, y hay ocasiones en que es mal humorado, pero a KiBum le consta que dentro de todo eso está el hombre más dulce, tierno, y hermoso del mundo.

Ahora mismo, al tener la carta que le ha regalado en sus manos, viendo cada detalle minucioso y lleno de un perfume que a KiBum lo va a volver loco, piensa que es lo mejor que le ha pasado en la vida.

Por ello es que despliega el precioso regalo,  con ansias, quitando la cinta que envuelve el rollo.

Hay tantas palabras, tantas oraciones que están haciendo volar su corazón.

KiBum se pregunta ¿cómo no voy a enamorarme de él si es así conmigo?

Desde la primera línea... sabe que ha logrado que lo ame mucho más.

“Bummie. Mi KiBummie. Mi mejor amigo. Mi confidente. Mi alma gemela.
Feliz cumpleaños, mi pequeño tesoro.

Aún recuerdo cuando te conocí hace 10 años, y no puedo creer que el tiempo siga conservandote como mi familia, como la persona que más quiero.

Hoy cumples 17. Los que te acercan cada vez más a ser un adulto que tendrá su propia vida, además de sus propios amores.

ᴄᴏʀᴀᴢᴏɴ ʀᴏsᴀ  | JongKey FanficDove le storie prendono vita. Scoprilo ora