Una princesa en zapatillas ©️

Capitulo 2: La mudanza

Catalina.
Este capítulo ha sido editado.

«La realeza, gente con mucho dinero, clase y poder, que se es bien visto ante la sociedad y es un honor para muchos formar parte de ellos ¡Que le den a la realeza!»

Tomé una maleta que tenía guardada en mi armario, la abrí y con desgano comencé a guardar algunas prendas de ropa. Aún no podía creer que iba a irme de mi hogar, todos mis recuerdos, toda mi vida estaba aquí.

Cerré la valija y di un pequeño recorrido por última vez a mi pequeña habitación. Empecé por la repisa que se encontraba al lado de mi cama, en el colocaba todos los muñecos de colección de Harry Potter que me habían regalado. Así es, era una gran fanática de la saga. Tenía desde los libros originales hasta los Funk Pops más populares y aunque la gran mayoría deseaba estar del lado de Gryffindor, yo por el contrario, siempre me sentí identificada en el lado de Slytherin. Soy una víbora.

Continue mi recorrido y llegué a mi estante de libros, la mayoría de ellos eran poco femeninos, es decir que no solía leer el típico cliché que les gustaba a las niñas de mi edad; odiaba las novelas de romance, eran demasiado "vomitativas". Yo particularmente prefería los que se basaban en terror y ciencia ficción. Mi hermana siempre dice que nací en el cuerpo equivocado, porque según ella no es posible que una chica ame esos tipos de libros.

Después de terminar de darle un vistazo a mis libros, bajé la mirada y ahí en mi escritorio se encontraban las fotografías de mi padre, estaban sobre un pequeño cuadro.

Tome la fotografía en mis manos y me senté con ella en el borde de mi cama, la contemplé por minutos.

En la foto se apreciaba a mi padre sentado en la sala de esta casa, yo estaba sobre su regazo mostrando una sonrisa con apenas dos dientes, el también estaba sonriendo, se le veía feliz y sano. Por las manchas de pintura en su ropa pude deducir que recién estaba pintando la casa.

Sonreí con tristeza.

«¿Por que te fuiste? Te necesito tanto papá»

Mi vista comenzó a nublarse por las lagrimas que amenazan con salir, no podía evitarlo, la muerte de mi padre había sido lo que más me afectó en toda mi vida. Desde que tengo memoria, he querido estar más al lado de mi papá que el de mi mamá, pero eso no significa que no la quiero, claro que la quiero, es mi madre al final de todo.

A él le encantaba compartir con los vecinos, siempre decía que se siente mejor dar que recibir. Su gran corazón no le cabía en el pecho, era un hombre muy bueno, el no tendría porque haberse ido.

Papá siempre trabajaba duro para poder pagar los gastos de la casa, para que yo y mis hermanas estudiemos en buenas escuelas y siempre compraba todo lo que mamá deseaba, para él mi madre era su única "reina"

La rabia invadió mi cuerpo, al volver a la realidad y darme cuenta que mi madre estaba por casarse con el rey de este país. ¿Acaso ella realmente no amo a mi padre? ¿Porque casarse? ¿Porque quiere abandonar esta casa donde están todos los recuerdos de mi padre?

Quizás me escucho como una maldiga egoísta al estar tan enojada de que mi madre rehaga su vida, y si en efecto ella tiene derecho a hacerlo. Pero de lo que no tiene derecho, es a cambiar mi vida por completo y que se amolde al entorno que ella quiere.

Nuevamente mis lagrimas de tristeza y enojo resbalaron por mis mejillas aterrizando en mis labios. Presione la fotografía contra mi pecho y lloré, deje que las gotas cristalinas que nacían en mis ojos fluyeran y que el llanto no cesara hasta haberme desahogado por completo.