XI

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Jungkook se levantó en su cama. Suponía haberse quedado en brazos del demonio pero siempre lo devolvía a la cama.

Se miró desnudo la capa del demonio cubriendo sus hombros y debajo de él, con rasguños en sus muslos, sentía ardor en la zona de su cuello y clavículas, pasó sus dedos sobre la zona y pudo sentir igual marcas alargadas.

Se levantó de la cama, sintiendo su cuerpo temblar, y sus piernas querer fallar. Caminó como pudo hasta el espejo roto. Pudo sentir doler sus glúteos de la misma manera en la que dolían sus mejillas cuando era pequeño y sus abuelos las apretaba hasta el cansancio.

El espejo aún estaba roto. Taehyung no le había dejado quitarlo de cualquier manera, pero aún se podía mirar en él.

Se observó el cuello, estaba lleno de moretones de una tonalidad púrpura, azul y rojo. Incluso parecían doler pero al tocarlas no sintió nada. Más que el recuerdo de anoche.

Su cuerpo había sido el lienzo que ahora tenía plasmado el poder y la lujuria que el demonio poseía.

Le había marcado. Y se sentía muy, muy bien.

Taehyung apareció detrás de él en el reflejo.

-Buenos días- le dijo el ser masticando algo.

-¿qué desayunas? - le preguntó divertido sabiendo la respuesta.

-uvas.- le dijo pasando sus manos por los hombros del humano pegando su cuerpo a la espalda del menor.

Éste se estremeció al sentir las uñas largas de Taehyung rozar la piel desnuda de su pecho, pero sus manos sólo se pasearon un poco por que después fueron a desabrochar la elegante capa de plumas.

Ésta fue retirada de su cuerpo. Dejándolo completamente desnudo.

A Taehyung le brillaron los ojos en deseo, como la mayoría del tiempo que miraba al menor.

Y Jungkook miró a través del espejo sus propios ojos tomar un tono violeta.

Sus cejas se alzaron en sorpresa. Conectando su mirada con el demonio.

Este alzó sus hombros sin dar explicaciones.

Se observó un poco más antes de soltar algo sin pensarlo.

- Quiero ir de compras - dijo caminando a su ropero. Lo abrió y buscó dentro algo que vestir.

- Bien. ¿Es por las fechas "navideñas''? - le dijo con una sonrisa burlona. Haciendo comillas con sus manos.

Jungkook frenó sus acciones, girando lentamente para mirarle a la cara. Aún sin ninguna prenda encima.

Observó el rostro de Taehyung entrecerrando los ojos en sospecha. - Yo no suelo ir de compras - le dijo acusatorio cruzando sus brazos.

Taehyung extendió su sonrisa.

-Pero ahora lo harás. - guiñó su ojo para después caminar hacia el baño y encerrarse allí.

Jungkook rodó los ojos. No era nuevo que el demonio se metiera en su cabeza y lo hiciera desear o pensar a voluntad del demonio. Y bueno ahora tenía esas ganas extrañas de comprar ropa.

Vistió unos pantalones de mezclilla obscuros y una sudadera negra dos tallas más grande. Se acercó a su escritorio y abrió el primer cajón de arriba hacia abajo. Sacando su billetera.

Suspiró, no es que tuviera el dinero suficiente para andar gastando en ropa nueva.

- ¿Qué pasa? - escuchó tras de él. El menor miró a él demonio observando cómo vestía, por primera vez, algo que no era color negro. Una camisa color crema con detalles marrones. Un pantalón negro ajustado y unos lentes de sol tintados en amarillo bronce.

Demon's Witch. Where stories live. Discover now