Capítulo XXXVII

Start bij het begin
                                    

La lengua traviesa de la morena estaba haciendo presión en su clítoris cosa que la hizo casi tener un orgasmo, pero debía aguantar más. Sintió como succionaba su clítoris y supo que no iba a aguantar más.

—...vamos mi amor, quiero saborear tu orgasmo—susurró un segundo Juliana para luego seguir con su trabajo, lo que impresionó a Valentina fue sentir como su lengua entraba en ella, fue mucho para su cuerpo excitado, gimió mucho más alto hasta que sintió el orgasmo golpearla como jamás le había sucedido. Juliana la miró desde abajo y sonrió perversamente, con un empujón rápido ahora estaba encima de ella con su mano en mi miembro, miró a Valentina y esperó que volviera del viaje que le había causado su reciente orgasmo. Estiró la mano a su mesita de noche para sacar un preservativo pero un golpe en su pierna la interrumpió.

—No, sin condón—Juliana negó a la propuesta de Valentina—...quiero sentirte, por favor—volvió a negar.

—Podrías salir embarazada Val, no voy a correr riesgos—la castaña mordió su labio inferior y de un arrebato empujó a la morena contra la cama para luego montarse encima de ella y bajar por todo el miembro de un solo empujón, Juliana empezó a negar—...Val...—susurró perdida en el placer ya que para ese punto la ojiazul estaba montandola como toda una vaquera profesional.

—Mierda. Voy a venir otra vez...—gimió roncamente Valentina sintiendo como su cuerpo volvía a convulsionar de placer hasta derretirse de excitación, su orgasmo se deslizaba por el miembro de Juliana causando que entrara mucho más fácil—Amor, espera...—pidió a sentir como la morena se embestía—Me duele—Juliana paró los movimientos y la miró asustada.

—¿Qué? perdóname, yo...yo no...¿te dolió?—tartamudeó muy nerviosa aún sin salir de Valentina—¿Quieres dormir? Yo puedo esperar...por mi no importa...p-pero si quieres...—fue interrumpida por la castaña que rió en bajo para luego besarla con ternura.

—Me gusta que me duela—susurró en los labios de Juliana al mismo tiempo que movía sus caderas lentamente—Así recordaré que estuviste dentro de mi—la morena asintió perdida con la excitación que la volvía loca de placer—No quería venirme nuevamente y mi bebé nada...—la besó un poco más y luego saltó encima de su prometida. Así duraron casi cinco minutos en los que Juliana se había dejado domar por su prometida a tal manera que parecía estar cabalgándola, la morena sintió como su orgasmo iba llegar e intentó salir de Valentina pero sus largas piernas la rodearon impidiendo que saliera.

—Carajo...—pero ya era muy tarde se había venido dentro de ella  y esto a la castaña le encantaba, sentirla tan dentro era algo que le daba orgullo, quién no quisiera tener entre sus piernas a Juliana Bradley.

Pero esto no fue todo, la noche era joven al igual que ellas.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Días después.

Psychology Mind

—¿Cómo te sientes ahora July?—preguntó Margot tentando a su paciente, era su trabajo y debía de hacerlo.

—Doctora, mi nombre es Juliana Bradley, ya no soy July—habló con autoridad pero amablemente.

—Lo sé, necesitaba que lo confirmaras. ¿Juliana Villyn se ha hecho presente?—la morena negó jugando con sus manos—¿Has dialogado con ella?

—No, ella desea que sea feliz—Margot asintió—Sabe que si sale va a llevar nuestro cuerpo a algo mucho más grave que una caída, ella tiene pensamientos suicidas—susurró un poco bajo—Pero no dejaré que lo haga, quiere hablar con ella doctora?—la psicóloga asintió observando como la morena cerraba sus ojos y al abrirlo el color que antes tenían cambiaban rápidamente.

—¿Juliana Villyn?—preguntó Margot.

—...Hola, psicóloga—su voz también era diferente, mucho más suave—...que...quería hablar conmigo?—preguntó sonriendo de lado.

—Me dijo Bradley que tenías pensamientos suicidas—el rostro de la morena palideció—Puedes confiar en mi y decirme qué sucede, conoces muy bien cuales son las reglas y la primera es no mentir—Juliana asintió derrotada.

—Debería de ser feliz...p-pero siempre está presente esa tristeza que me hace pensar o decir ideas realmente extrañas, es como si me hundiera en un poso de depresión y me siento tonta por no hacer algo al respecto—Margot negó

—Eres la personalidad real Juliana, fuiste tu la que tuvo que crear a July y ahora a Juliana Bradley y todo esto sucedió por tus traumas de la infancia. Eso no te hace tonta, te hace completamente fuerte y sé muy bien que me has engañado muchas veces Juliana—la morena negó rápidamente—No estoy enojada por eso, no lo estaría. Solo sé que no eres tan débil como piensas, puedes crear personalidades infinitas en tu mente, puedes tomar el cuerpo cuando desees, pero no eres consiente de eso, cierto?—Juliana la miró y suspiró para luego cambiar su expresión a una un poco suave pero triste.

—Todo es culpa de Julianno Villyn...si él me hubiera adoptado antes, si él no me hubiera dejado en ese orfanato nada de esto estuviera pasando...—susurró con dolor y Margot lo descifró al instante.

—¿Quieres vengarte?—Juliana asintió mientras lágrimas rodaban por sus mejillas—Pero tu abuelo está muerto, cómo te vengarías?—Juliana empezó a negar haciendo un puchero de enojo.

—Él no está muerto, Julianno Villyn no está muerto—susurró contra sus manos—Solo deseo venganza y gracias a esta nueva personalidad que creé la tendré—Margot vio un segundo el rostro de la morena, no le sorprendía. Desde tiempo atrás sabía que Juliana al ser la personalidad real era mucho más fuerte que todas.

—Podrías dejarme hablar con Juliana Bradley  y no volver hasta que yo te de la orden?—la morena asintió cerrando sus ojos para luego al abrirlos volverse color café neutro.

—Tienes que llegar a una cuerdo con ella, desea venganza y jamás trae algo bueno eso—le informó a Juliana—Parece ser que tu abuelo no está muerto, eso me dijo ella. No dejes que salga, sé que eres fuerte, cuando las dos lleguen a un punto de acuerdo no habrán más problemas al respecto—la morena asintió levantándose de el sofá.

—Gracias por ayudarnos Doctora, la llamaré si sucede algo fuera de lo común—Margot asintió viendo como Juliana salía del consultorio.

Empezaba a manejar su enfermedad y eso le daba felicidad.

---------------------------------------------------------------------------------------------------

Solo resolveré eso lo de Julianno y el fic terminará, el final lo tengo escrito hace mucho. Sé que dije que no había más drama, pero me refería a la relación de Valentina y Juliana. Gracias por leerme de verdad lo aprecio mucho y lamento si este capítulo es corto pero estos últimos capítulos lo van a ser, ya que el epílogo va ser muy largo.

Ya subí el primer capítulo de Tocar el Cielo Con Un Beso, pueden ir a leerlo.

Sean felices, merecen serlo.

A Step Forward (Juliantina)Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu