Cap. 32

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Cuando llego a casa puedo sentir el aroma de la comida de Sergio emanando desde la cocina un rústico aroma que me abre el apetito, sigo el rastro con el olfato hasta que llego al encuentro con un alto hombre rubio de cabellos crespos y una pequeña niña de cabellos finos y negros.

- Vaya sí que has tardado Kisa-nichan -se queja Momoka.

- Haaaa perdón, tuve una charla reveladora con Clara - me disculpo pero rápidamente llama mi atención el festín que habían armado estos dos en la sala.

"Que adorables, realmente ambos trabajando en equipo pareciesen Padre e hija", pienso con gran cariño observando al par que todavía se movilizaba por toda la cocina.

- Sorpresa!!! - dice Sergio viniendo de la cocina con tres platos y cubiertos.

- ¿Y a qué se debe esta celebración?, ¿puedo saber? - pregunto.

- Bueno....como Momoka se va pasado mañana quisimos hacer una fiesta para solo los tres a modo de poner en práctica las nuevas habilidades de la pequeña Momoka - explica Sergio con una sonrisa medio tristona reflejando en ella un gran esfuerzo por tratar de parecer alegre.

- Sip! Fue mi deseo... quería que Sergio-nii me enseñara a hacer platos deliciosos - apoya mi hermana sujetándome del brazo.

- Ah olvido una última cosa - dice Sergio corriendo a la cocina y volviendo al instante con una guitarra causando que mis ojos se pusiesen como dos paltos al ignorar que él tuviese habilidad con aquel instrumento de cuerdas.

- ¿Y eso? - digo atónito

- ...Quería cantar para avivar más la velada - aclara Sergio - la canción que voy a interpretar es para expresar más que unas simples palabras... en ella están mis sentimientos - él afina los labios en un sonrisa y me mira fijamente ocasionando que mi corazón saltase a mi garganta.

Momoka y yo nos acomodamos en el sofá mientras Sergio se prepara..... su gesto se relaja y mientras se sienta frente a nosotros, el intérprete afina el instrumento tensando las cuerdas con las clavijas del cabezal hasta que siente que el sonido de cada cuerda se adecúa a su respectiva nota y finalmente desliza suavemente sus dedos por estas dejando así salir un cautivadora voz...

Volevo solo dirti...
Scusa se ho esagerato
Grazie per la pazienza
Che non ho meritato

Volevo solo dirti
Che sono emozionato
Mi fa uno strano effetto
Essere innamorato

Volevo ringraziarti
Di tutto questo effetto
Sei sempre strata grande
E non te I'ho mai detto

So che può sembrati strano, ma è vero
Io ti amo

E non è.....
Una coincidenza
........

De solo escuchar su voz, mi cuerpo se estremece, era más que obvio que aquella canción coincidía mucho con todos sus sentimientos.....como si fuese para mí

Con ella me confunde.... y en mi mente solo está el...

Diciéndome sin falta.... todos los días......diciendo que me quiere.

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Sergio termina de tocar y sonríe.

Intento no mirarlo....debido a que estaba muy sonrojado, verlo con una guitarra tocando era un fuerte detonador para alguien como yo....que antes de llegar a Italia en Japón tenía que escuchar al grupo de música del nieto del presidente, y que inconscientemente gracias a ello había desarrollado una gran debilidad a admirar a quien fuese capaz de tocar un instrumento musical. Sus cabellos crespos y rubios más la guitarra, sus largos dedos y su voz me tenían embelesado.

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Después de la interpretación con la guitarra de Sergio nos sentamos los tres frente al televisor a ver una película clásica infantil....hasta que notamos que Momoka se había quedado profundamente dormida en el regazo de Sergio. Él la tomó con sumo cuidado entre sus brazos y la llevó a la cama, yo en cambio acomodo las sábanas para que no pudiese destaparse mientras duerme.

- Pareces su madre Kibari - dice Sergio riéndose entre dientes.

- No puedo evitarlo, después de todo es muy preciada para mí - digo dándole un pequeño golpe en el brazo.

Sergio vuelve a reír bajo y de un momento a otro ambos nos quedamos observando como la pequeña Momoka dormía....

- Parecemos sus padres, con todo lo que hemos pasado en este mes con ella - digo soltando un suspiro de satisfacción y siento como la mano de Sergio busca la mía entre tanta oscuridad.

- Sería genial... tú eres la mamá y yo soy el papá - balbucea Sergio.

- uh????

- No, no es nada emmm tengo que irme ajajaja - comienza a reír Sergio soltando mi mano y caminando lo más rápido posible de vuelta a la sala, pero apenas salimos del cuarto, cierro la puerta y le sostengo del brazo

- ¿Qué fue lo que dijiste? - pregunto a pesar de que lo había escuchado bien, deseaba que aquellas palabras pudiesen hacerse realidad con tal que él las volviese a decir.

- Eemmmm nada - gira la cabeza evitando mi mirada, pero podía notar como sus orejas comenzaban a ponerse rojas - Creo que tengo que irme antes de que sea más tarde -suspira y yo me apoyo en la puerta clavando mis uñas en ellas tratando de darme ánimos para pedirle que se quede.

- eeeeem....este.....mmmm

"Vamos Kibari solo dilo"

- ...¿Porque no te quedas a dormir aquí?

Siento un gran silencio y me avergüenzo de mí mismo.... "de seguro dirá...MELARGO! o algo así e//~//e"

Sin embargo....

- ¡¿Enserio....puedo quedarme?! - y sin esperar respuesta alguna él me abraza fuertemente - ¡¡¡Me portaré muy bien, seré tu esclavo.... trátame bien amo!!! - Sergio acerca su rostro al mío diciendo... "Chuuuuuuu".

*Beso

- Uwaaaaa ¡¿qué intentas hacer?! - digo dándole un ligero porrazo el cual solo le causa gracia.

- Jajajajaja extrañaba que me trataras así Kibari - ríe.

Hasta que me Empalague de Ti - YaoiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora