Para Que Nadie Se Entere. -Juan Pablo Villamil.- LDA #2

Cap. 37

Villamil
Sabía como era Antonia, sabía perfectamente bien que si ella quería, podía ser todo lo que Leila nos dijo, y había cometido un enorme error, pues Antonia jamás se tomaría el tiempo de molestar a una simple chica.
Salí de mi trance al ver como Isaza salía furioso de casa con todos detrás de él, Leila aún veía hacia la puerta con una cara de molestia sin dejar de llorar.

Villamil: ¿esto es lo que querías? -me acerco a ella- arruinar amistades de años, por que?, que es lo que quieres?
Leila: ¡a ti!, maldita sea, Antonia Vargas lo tiene todo, ¡absolutamente todo! -bufa molesta- solo quería quitarle todo para quedármelo yo, a sus amigos, su novio, ¡todo!
Villamil: sí y evidentemente no te salió, estás loca, largo de aquí -ruedo los ojos-
Leila: Solo dile que esto no se quedará así, le quitaré todo -tomo sus cosas saliendo de aquí-

Se fue. Al igual que Antonia, al igual que mi segunda oportunidad con ella, y sabía que estaba totalmente fuera de su vida ahora, no me perdonaría, tal vez no en un largo tiempo.

Antonia
Antonia: aún no puedo creer que lo hice -suspiro recostándome en la cama de Joaquín- no sé cómo serán las cosas ahora, tengo miedo

Joaquín llegó a mi con las palomitas, él intentaba sacarme los nervios, pero era casi imposible, ¿y si nada volvía a ser como antes?

Joaquín: Antonia, cálmate y cállate. Todo será como antes, la diferencia es que tú te harás la difícil, que vean que te perdieron y que será difícil recuperarte, y más con Villamil.
Antonia: ¿me estás diciendo que haga "thank u, next"? -reí mientras tomaba algunas palomitas-
Joaquín: no tan así, pero si -rió al unísono conmigo- Vales demasiado, Antonia Vargas, no dejes que te recuperen tan fácil.
Antonia: ¿qué pasa si quede de verme mañana con Nath? -lo miro sonrojándome un poco-
Joaquín: bueno ahí es diferente, con todos es diferente. Por que Juan Pablo era tu novio, el más que nadie debía confiar en ti, bubu.
Antonia: Entiendo, bien, entonces mañana hablaré con Nathalia, y a ver qué dirá.
Joaquín: ¿has hablado con los demás?
Antonia: No, no conteste a nadie después de Nath, y a Gi le dije que estaría contigo, así que seguro ella aviso a los demás. Necesito hablar con Isaza de igual manera.
Joaquín: pobre de él, maldita loca, digo la entiendo, eres increíble Tony, ¿quien no querría ser como tu?

Ambos reímos y nos hicimos una maratón de Friends. Haríamos una pijamada para distraerme, lo cual era normal, pues solía quedarme muy seguido en casa de mi bubu.
A la mañana siguiente desayunamos con la mamá de Joaquín, quien me invitó a una fiesta familiar que daría en su casa para celebrar el cumpleaños de Joaquín, a lo cual acepte gustosamente.
Me despedí de ambos y me dirigí a mi casa donde se encontraban mis chicos.

Mauricio: ¿cuando pretendes pasar tiempo con nosotros? -mencionó al verme entrar-
Antonia: Buenos días para ti también, Abad -me senté en medio de ambos-
Santiago: ¿como te fue con lo de anoche? -recargó su cabeza en mi hombro-
Antonia: bastante bien, pero realmente no sé cómo sentirme -suspiro- Ya demostré que no soy ninguna mentirosa, y aún así, me siento mal, ellos no confiaron en mi.

Ambos me abrazaron, mientras me decían tantas cosas lindas, como los amaba por llegar a mi vida.
Ellos y Joaquín eran literal el soporte que necesito.
Dos toques en la puerta hizo que nos separáramos, me levante seguidamente para abrir la puerta, encontrándome a mi ex novio favorito (aunque verdaderamente comienzo a preferir a Juanpa) en la puerta de mi hogar.

Antonia: ¿qué necesitas? -salí cerrando la puerta detrás de mi-
Villamil: pedirte perdón, Tony lo lamento mucho de verdad, sé que toda esta mierda no será fácil de superar, pero de verdad lo siento.
Antonia: Está bien, te perdono... pero no vamos a volver, no más. Esto no es sano, nos peleamos, nos besamos y volvemos, esto no parece funcionar, Juan Pablo.

Joaquín estaría más que orgulloso de escucharme, maldito bubu, debería estar aquí para echarme porras.

Villamil: Antonia no hagamos esto, sabes que nos amamos y debemos estar juntos -tomo mi mano-
Antonia: Si, te amo, pero no quiero seguir así, creo que lo mejor es que nos tomemos un largo tiempo para encontrarnos a nosotros mismos y pensar si de verdad debemos estar juntos, saber si de verdad vale la pena.

El asintió, dándome la razón, aunque en el fondo sé que no lo estoy. Está molesto, es obvio y puedo notarlo, pero no quiere empeorar las cosas, no está en posición.

Villamil: ¿sabes que estaré siempre esperándote, verdad?
Antonia: eso no es sano. Debes conocer gente nueva, tal vez ahí esté el verdadero amor de tu vida... nos vemos luego -entro rápidamente a casa, suspirando-

Sabía que esto era lo correcto, y qué tal vez es lo que debí haber hecho hace mucho tiempo, ¿por que no lo hice antes?, fácil, dependía mucho de él, ¿ahora?, ahora no, ahora era yo y solamente yo, me necesitaba completamente en amor propio, y es justo lo que buscare.