Chica Coraza. Marco Asensio

Capítulo 89-Chica coraza.

Dejo el botiquín al lado del asiento de Adam y me asomo para ver si ya están Igor, Helios y los demás sentados en las gradas.
Si, ya están, han venido todos a verlo.

Marquito viene entero equipado y se ha sentado entre mi padre y Gilberto, siempre quiere estar con sus abuelos.

Han sido unos meses muy duros, con subidones y bajones...pero el sufrimiento merece la pena para ver los resultados.

Hoy por fin vuelve Marco a jugar de manera oficial.

Los futbolistas que no son titulares entran y se van sentando en el banquillo. Entre ellos está Marco, que cuando lo han visto, todo el Bernabéu ha empezado a llamarle a gritos.

-¿Todo bien?-pregunto mirándole y asiente-Ha llegado el gran día.

-No recordaba la sensación de estar aquí sentado-contesta sonriendo ampliamente.

-Pues yo sí tío-dice Lucas riendo-Ojala nos pongan a los dos y metas un gol, el estadio se viene abajo con los gritos.

-El estadio se ha caído cuando han visto al pisha aparecer-dice Isco riendo y pone un brazo sobre sus hombros-Lo vas a hacer genial ya lo verás.

-No sé si el míster querrá ponerme.

-A gilipollas a ti no te gana nadie máquina-dice Lucas riendo-Sel, ¿Así también es en casa?

-Veinticuatro siete Lucas, ¿Qué le vamos a hacer?

Marco me mira indignado y yo le lanzo un beso, a lo que se ríe negando con la cabeza. Por muy pesado que se ponga a veces, no quiero que deje de hacerlo nunca. Supongo que en parte eso es una de las cosas que enamoró de él, junto a su muy característica personalidad.

Empieza el partido y Nora se sienta a mi lado, ambas nos miramos cómplices y me pasa la bolsa, miro que hay dentro y me guiña un ojo.

Se podría decir que para el día de hoy tengo una sorpresa preparada para Marco que espero que le guste. Digamos que hay una personita creciendo en mi interior otra vez y don ego no lo sabe todavía. No lo sabe nadie en verdad, bueno quitando a Sara y a Nora, pero es que a ellas se lo cuento todo.

-¡Eso es falta cabrón!-grita Carvajal enfadado-¡Estás ciego!

-Tú sí que te pones ciego cuando nos vamos de fiesta-contesta Isco riendo y todos nos reímos-Es la verdad Carva, acabaste cantando La sirenita en el karaoke.

-Si, ¿Pero quién estaba haciendo el dúo conmigo?

-Pues yo creo que en verdad no era falta-dice Isco mirando el partido.

Y eso es lo que se llama cambio de tema, sí señor.
La verdad que la última fiesta se nos fue un poco de las manos...verlos a todos vestidos de mujer y con tacones vale oro, está comprobado. Menos mal que no colgamos las fotos en las redes sociales.

Llega el descanso y todos vuelven al vestuario, Nora y yo nos quedamos aquí sentadas hablando.

-Tía no te he contando una cosa-dice Nora sonriendo nerviosamente-Oficialmente estoy saliendo con el alemanito.

-Sabía que antes o después ibais a terminar juntos-contesto abrazandole-Me alegro por vosotros.

-Quien me diría que iba a acabar con él, cuando al principio no nos podíamos ni ver.

-Yo al principio tampoco podía ver a Marco y mírame ahora.

-Si, pero Marco a ti no te llamó machorra entre varios insultos más.

-Los dos estáis a la par Nora, no te puedes quejar de nada.

Salen del vestuario y comienza la segunda parte.
Sinceramente me alegro mucho que Nora esté con Adam, son tan diferentes que se complementan muy bien. Ella le da la vidilla que le falta a él, y él a ella la cabeza, porque digamos que aquí a la amiga se le pira bastante.