Sangre

Capitulo 13.

Decido no seguirlo tiene que pensar muchos las cosas. Me llevo los libros a mi habitación y acomodarlos en el escritorio, me llevo poco tiempo hacer lo que pensé y cierro la puerta de la habitación busco en el diccionario que significa las primeras dos palabras de la libreta.

Nire emaztea me tomo tiempo pero lo logre las dos primeras palabras significan ¨Mi esposa¨. El señor Nowak estará hablando de su esposa busco la siguiente palabra pero me toma mucho tiempo.

Decido dejarlo porque no puedo durar tanto en el día más que voy a cuidar de Alex, salgo de la habitación, a lo lejos escucho a Alex hablar bastante alterado.

—Yo dije margaritas no rosas, quiero los centros de las mesas con margaritas.

Vaya si esta alterado apresuro mi paso para llegar hasta donde está el, llego a los pocos segundos al jardín y ahí está el.

—No señorita usted no entiende, deben ser margaritas las rosas cargaran mucho el ambiente es una reunión. —Dice caminando de un lado a otro

Comienzo a caminar hasta donde está el, caminando de un lado a otro, al llegar veo que está un poco rojo de lo alterado que esta.

—Señorita usted está haciendo todo mal, yo estoy pidiendo manteles beis no blancos. —Dice dándose la vuelta y me ve.

—Deme un minuto. —Dice Alex bajando el celular y cubre con su mano el micrófono.

—Sangre me puede ayudar a tratar con esta mujer. —Dice bastante irritado.

Tomo el celular y comienzo hablar con ella.

—Señorita mi jefe, pide que sean margaritas y eso debe de ser si no buscaremos a alguien mejor para ser el trabajo. —Digo mirando a Alex.

La señorita comienza hablar diciendo que entiende que serán margaritas.

—Gracias por entender, los manteles serán beis, también el lugar no debe estar cargado de muchas plantas, mande los lugares al correo del señor Nowak, también la música será solo jazz. —Le digo a la señorita.

Miro como Alex se sienta y me mira con ojos expectantes.

—Si eso sería todo por el momento lo demás lo hablaremos por la tarde. —Le digo cortando.

—Eres bastante experta en tratar con todo esto, significa ¿Que vienes de una familia importante? —Dice levantándose de donde estaba.

—Eso lo voy a dejar a su criterio señor. —Lo miro.

—Veamos cual será el platillo y los demás detalles de la fiesta. —Dice sentándose hago lo mismo.

Hablamos de lo que se va a dar hasta lo que se dará de tomar, cubiertos postre, Alex me ponía atención cuando daba mis opiniones.

—Siento que es mejor dos postres señor. —Le digo Alex.

Levanto la mirada y miro que está mirando atrás mío. Me giro y miro a lo lejos una persona en el bosque, me levanto y comienzo a caminar hacia donde está la persona.

—Sangre no vayas. —Dice Alex.

—Señor debe ser una persona que vive en los alrededores no hay nada de que alterarse. —Le digo mirando todavía a la persona.

—Sangre. —Me giro y lo veo.

—Confié en mí, debería ir a la cocina para que coma algo y espéreme ahí. —Camino sin escuchar lo que me dice.

Siento como Alex hace caso y se va a la casa, yo sigo caminando hacia donde está la persona. Abro un poco la boca al escuchar su corazón latiendo.

—Disculpe que los haya interrumpido señorita, es que la casa llevaba bastante tiempo sin ser habitada. —Dice aún lejos

—No se preocupe señor ¿Usted trabajo para la casa O algo parecido? — Le digo cada vez más cerca de él.

—Claro señorita antes era el jardinero, pero ahora trabajo para otra familia. —Dice el señor.

— ¿Y que lo trajo por aquí señor? —Le pregunto justo estando enfrente de él.

—No solo pase por aquí para recordar viejos recuerdos. —Dice alejándose un poco de mí.

—Está bien pero no vuelva, y trate de no mentir se le da muy mal. —Lo veo por última vez y camino hacia la casa.

Escucho como se va alejando y como su corazón late muy rápido, varios pensamientos llegan a mí y todos son del señor, los ignoro porque ya sé que son.

Al poco tiempo llego a la casa, escucho como Alex mueve las cosas de la cocina. Entro por la puerta de atrás para llegar más rápido y lo miro cocinando pero la mezcla le queda mal.

—Señor ocupa ayuda. —Le digo conteniendo la risa.

Estas acciones me acuerdan a mi hermano, y el sueño que tenia de ser humano pero claro está que no podíamos ser humanos, aparentar si pero fue tiempo después.

—¿Esta todo bien?. —Dice Alex.

—Si solo se me vino algo en la mente. —Le digo acercándome a él.

—Sangre puedo confiar en ti. —Dice Alex.

—Claro señor. — le digo lavándome las manos.

—Tengo un mal presentimiento algo muy malo se acerca, tengo miedo por mi familia cada vez estoy más lejos de ellos. —Dice mirándome.

—Sabe señor pensé que iba a ser más el tipo de puedo tener todo me acuesto con todas. —Le digo agarrando un recipiente de un estante.

—Discúlpame por eso solo que bueno ciento que todos me respetan más si soy un egocéntrico que lo puede tener todo. —Dice sacando la pasta de la bolsa.Lo miro esperando que diga más.—Antes no era así todo cambio, cuando todas la chicas se acercaban a mí y empeoro con el suceso de esa noche sangre, por más que lo quiero alejar de mi cabeza algo me dice que es verdad. —Suelta un suspiro con lo último.

—Señor creo que lo puedo entender un poco, uno siente en su cuerpo que es verdad pero la sociedad dice que no y uno trata de negar el suceso tratando de olvidarlo. —Le digo picando el tomate.

—Exacto y para cambiar me puse esa fachada de arrogante. —Dice ayudándome a picar.

—Señor usted es arrogante aun que lo niegue. —Lo miro y arruga el ceño ante mis palabras.

—Es difícil acerté cambiar de parecer no es así. —Dice sin mirarme.

—Claro señor lo a visto usted mismo, aún sé que tiene sus dudas respecto a mí y confiar del todo no podrá. —Le digo.

—¿Fue fácil lidear conmigo?—Dice mirándome.

—Si señor no es nada difícil, más que esperaba esas palabras de amenaza. —Se detiene y me mira.

—Si yo hubiera querido hubiera seguido sangre. —Dice acercándose más a mí.

—No le creo señor, usted nunca fue consciente del peligro, vivió en parte en su ignorancia, los sucesos nunca le importaron pensó que sería algo pasajero, pero nunca fue así se dio cuenta que lo quieren matar por algún motivo y ahora está preocupado y yo lo entiendo pero es mejor ser sinceros no.

—Está bien es verdad sangre, siempre fue un idiota pero después de que se me paso el cargo de las empresas cambie me hice responsable. —Dice alejándose.

—Lo entiendo señor, ahora cómo se siente en no vivir en la ignorancia. —Le digo cocinando los tomates.

—Sonara estúpido de mi parte, pero se siente bien. —Dice poniendo a hervir la pasta.

Las dos no décimas más nada hasta que comienzo a servir la pasta.

—Sangre, ¿Quién era el señor que estaba por el bosque? —Dice poniendo los cubiertos en la mesa.