Me enamore de un Stripper.

Capítulo 32

Buenas noches lectoras :c sé que estoy tardando demasiado en publicar, pero son por dos situaciones.

Volví a la universidad desde hace dos semanas  y por las tardes he conseguido trabajo en una empresa, literal salgo de la universidad camino a mi trabajo, saliendo a las 7 de la noche y logrando avanzar algunas tareas.

Gracias por comprender y por seguir leyendo :3 las amo.

***Jack Frost***

La noche ya había llegado y Elsa no había comido más de cinco cucharadas de la comida que prepararon.

Estuve con Elsa en silencio, sentado a su mirado frente al ventanal de su habitación. Mirando a los autos pasar de un lado a otro, personas sonriendo, gritando, riendo....y también llorando.

Recargó su cabeza en mi hombro mientras se abrazaba de nuevo.

Ya no había llorado, ni sus ojos estaban irritados, ahora sólo guardaba silencio con una expresión vacía y quieta.

La noche continuó bajando, y Elsa comenzaba a cabecear en mi hombro.

-Ven, vamos a acostarte -Le murmuré levantándola.

Caminamos a su cama y ella con fragilidad se deslizó en las sábanas para darse vuelta y dormirse.

Suspiro acariciando su cabeza, me giro y salgo de la habitación.

Me despido de todos mientras tomo mis llaves para retirarme, cuando abro la puerta me llama la pelirroja.

-Jackson, espera -Camina hacia a mí - ¿Tienes algo que hacer mañana?

-Debo preguntar acerca de los bailes – Digo no muy convencido de querer bailar.

-¿Te gustaría venir a.....

-Vendré diario con Elsa, no debes perdírmelo.

-Gracias -Sonríe – Buenas noches.

-Hasta mañana.

Regresando a mi apartamento me dejé caer en el sofá, ni siquiera aguantaba llegar a mi cama, sólo me deslicé pensando en lo que sucedió.

El día siguiente no estaban Merida ni su hermana con su marido, estaba solo con Elsa. Intentando que se cambiara de prendas más favorables, que me acompañara a hacer compras o que viéramos alguna película sin que durmiera.

Pero era difícil, sólo quería estar en silencio, dormir y mirar por su ventanal.

-Vamos -Le dije abriendo la puerta de su apartamento.

Habíamos dicho que me acompañara al super mercado, debido a que ella y yo necesitábamos algunas cosas.

-Sólo si te espero en la motocicleta.

-No, entrarás conmigo.

-En la entrada, y ya.

-Me acompañarás de inicio a fin, vamos.

El supermercado al que fuimos fue uno ubicado a unas cuadras cerca de su edificio.

Me abrazó con fuerza durante el viaje en motocicleta, llegando, me bajé primero y le estiré la mano para ayudarla a bajar, pero miró insegura mi mano.

-Ya estamos afuera, vamos a la mitad.

Peinó a un lado su cabello mientras bajó la mirada, suspiró y levantó el rostro, con la frente en alto.

Ignoró mi mano, ella sola se levantó para bajar de la motocicleta.

-Rápido y así pronto nos iremos -Dijo pasando a mi lado.