Al mal tiempo es cosa de darle un tequila y sentarse a ver como nos lleva por el culo.
-¿Qué ha pasado? ¿Acepto?- mi hermano con su insistencia hace incomodo el ambiente.
-¡No he podido ni articular alguna palabra del trato de Sorrentino!-
Me siento tan agotado porque ahora no puedo resolver más rápido los asuntos como antes solía hacerlo.
-Es que, que poca madre de él. ¿Cómo quieres que actuemos, hagamos hasta lo último.- frunzo el ceño con tal de una idea.
Sorrentino ha tocado una parte de mi un tanto vulnerable y mi talón de Aquiles. Ofreciendo un trato cerrado a cambio de Christina y la liberación de Anya, sus condiciones son perversas es algo que si pensé y realmente no me perdono, pero que he considerado de principio a fin.
Aunque ahora tenemos disposición del Consejo Supremo mi mente se bloquea.
-No tenemos alternativa hermano, no puedo sacrificar a una persona por otra. Además hay dos niños de por medio, y eso es algo que nadie me perdonaría el día que se lleguen a enterarse.- al parecer Bishop también se lo nota el estrés y presión que ambos tenemos.
Que pinche forma de la vida de volvernos a juntar con quien te jodio en no tener nada, ahora sé que Alienka es mi hijo, que está bajo mi protección y que debo traer a Anya. Pero ¿Cómo puedo darle la vuelta a las cosas?
Al pedir apoyo es algo que nunca he hecho, pero cuando lo hice con mi amigo alemán supe que no se negaría, somos buenos amigos en poco tiempo logramos una verdadera amistad.
Tal vez para la mañana él debe pisar suelo ruso, es muy poderoso en Alemania, además que me ayuda a pensar por dos mientras que yo debo mandar mi cargamento de armas americanas al oeste de Europa lo cual me conviene y me concentro más.
Ya que debo tener un respiración porque siento que me hago en muchas penas y esto no me sirve, me siento inútil pero juro que me voy a recuperar y seré él que soy de hace meses.
-El señor Hoffman ya te espera en tu despacho.- después del desayuno no tan grato Dante viene en mi compañía.
Hoffman es la primera vez que viene a mi mansión, no creo que lo deslumbre pues es un hombre que no se limita en lujos.
-¡Mi querido amigo Joseph Hoffman! Bajado de lo más alto de las montañas.- ríe ante mi chiste tan malo.
Estrechamos la mano, y nos abrazamos...
-¡A tus ordenes! Cuéntame todo, mi hombre ira anotando en una base de datos que con todo lo que puedas espero que obtengamos tener resultados.- directo.
-Antes una disculpa, la verdad que no sabía a quién pedir este enorme favor.- lo invito a sentarse.
Hoffman es un hombre alto, delgado de facciones serias, es realmente difícil verle sonreír. Y lo interrumpí, en plena comida familiar, ya está casado y tiene un hijo.
-Hermano también lo he hecho en situaciones donde no encuentro salida, pero aquí estamos.- su hombre saca algo como especie de Tablet.
Pero esta tiene una forma muy peculiar, realmente cuenta con mucha tecnología.
-Anya Vólkov tiene cinco años, desapareció hace tres días en un pequeño departamento a una hora de distancia de aquí, es de tez blanca, ojos azules y cabello rubio, la hora de desaparición fue de entre 10:30 y 11:00 de la noche, llevaba su pijama, estaba a punto de cenar e ir a dormir, quien cuida de ella es Christina Ivanova...- al hablar el chico tiene una velocidad de escribir que me impresiona.
-¡¿Christina Ivanova?! He escuchado hablar de ella, muy buenos comentarios.- esto es raro.
Debe de confundirse, lo cual a él muy poco le hable de ella, solo una vez sino recuerdo y solo por el caso de Daniel cuando pase mi estadía en Alemania.
-Sorrentino quien la capturo es mi enemigo italiano, quien llamo anoche para ofrecer un trato, tiene empresas fantasmas las cuales son fachada aquí en Rusia, deje considerar esa oferta, pero me negué, y es todo. Como mafiosos sabemos como escondernos, como evitar se rastreados.-
Su hombre sigue moviendo sus dedos ágilmente la verdad no sé que tipo de tecnología tenga, o si acaso aplicaciones para poder rastrearlo.
Por el momento me pongo a pensar en mi compromiso. Sé que no debo romperlo o eso me traería consecuencias pero ¿Valdría la pena?
Tengo tantas cosas que pensar, siento que todo va muy aprisa no tengo tiempo ni de dormir porque todo en la conciencia me carcome y lo que venga después estará en mi remordimiento siempre.
-Obtuve resultados satisfactorios, por confidencialidad no puedo decir como funciona, violo el reglamento pero con lo dicho, he de decir que obtuve la ubicación de la niña, señor Vólkov preparé a sus hombres que esta misma noche recupera a su hija.- el muchacho tiene una sonrisa soberbia.
Lo cual me hace ordenarle a Dante que reúna a todos, porque estoy seguro que esta noche llueven plomazos me siento de nuevo el rey de Rusia.
-Joder hermano, rescata a esa niña, que tengo a tus disposición a mis hombres, seguirán tus ordenes.- Hoffman me entrega su confianza.
Porque se que con esto he desatado la misma puta guerra.
Oups ! Cette image n'est pas conforme à nos directives de contenu. Afin de continuer la publication, veuillez la retirer ou télécharger une autre image.
Adelanto que se nos viene mucho amor, pero miles miles de desgracias. :(
