𝙳𝚛𝚊𝚐𝚘𝚗 𝙱𝚊𝚕𝚕 ᵒⁿᵉ ˢʰᵒᵗˢ

Vegetto

No me imagino lo chistoso que se debe de ver Veggeto, hablando de su cuerpo, haciendo eso que normalmente no suele hacer.

-Entremos ya, ¿quieres?

-Quizá...puedes considerar quedarnos así un poco más-habló mirándome suplicante

-¿Por qué?-pregunte incrédula, usando un terrible tono agudo en la voz de Veggeto.

-Podríamos intentar...algo nuevo estando así

-Ay, por Dios, no-rodé los ojos. Le miré con desaprobación, colocando las manos en la cintura, intentando asimilar lo que pasaba por la cabeza de Veggeto.-Definitivamente no-renegué tras meditarlo un poco más.

Después de eso, ambos caminamos en dirección a la gran C.C.

-Buen día-saludó la recepcionista, tan amable como siempre.- ¿Desea hablar con la señora Bulma?-preguntó, mirando a Veggeto.

-Si, por favor-respondí antes que él lo hiciera.

La recepcionista asintió, tomó el teléfono y marcó un número. Pronto, Bulma estaba ya frente a nosotros.

-Que gusto verlos.-me miró con una sonrisa y después tomó las manos mi cuerpo, apretándolas con cariño. Sonreí divertida al ver el gesto en mi rostro.- ¿Cómo va todo, TN?

Veggeto estaba tan incómodo que nos sabía cómo reaccionar.

Carraspee antes que Veggeto soltara algún comentario.

-Bulma-llamé a mi amiga, quien volteo a verme- Yo...soy TN.

La de ojos azules me miró con una ceja alzada.

-Siempre has sido...cómico, Veggeto pero ahora...

-Lo digo enserio-agregué-¿Podemos hablar en un lugar más...privado?

Bulma, confundida, asintió.

Nos llevó al interior de su casa. Incluso nos ofreció bebidas pero no tenía cabeza para nada más que no fuera nuestra problemática situación.

-Los escucho...

-Esta mañana despertamos y...amanecimos en el cuerpo del otro-respondió con simpleza en varón atrapado en mi cuerpo.

Bulma le miró perspicaz. Buscando algún indicio de broma.

-Te juro que es verdad-hablé- Yo soy TN.-me señalé- Estamos atrapados en el cuerpo del otro...

Bulma abrió los ojos de más. Asimilando lo que escuchó.

-¿Y qué esperan que haga?

-Creímos que quizá tu sabrías porque pasó esto-respondió Veggeto.

-Y tal vez ¿podrías ayudarnos a...regresar a nuestros cuerpos?-agregué

-Me gustaría ayudar, chicos pero...no puedo. No sé porque pasó esto, y si hago algo podría empeorar todo...

-¿No puedes transferir nuestras conciencias o algo así? ¿Usar tus cosas científicas para arreglar esto?

-Eso si son muy a Veggeto-señaló sonriente a mi cuerpo- Pero, como dije, no conozco la razón del cambio. La conciencia, la mente y demás...-hizo una mueca la cual no pude descifrar- Son muy complicadas y sensibles, si muevo algo puedo causar daños incluso irreversibles...

-¿Qué sugieres que hagamos?-pregunté aterrorizada

-Esperar. Al menos hasta que busque una solución o mínimo hasta que haga una teoría...

Le miré con desilusión, relámete esperaba que Bulma pudiera hacer algo. Pero tenía razón. Asentí dándole una pequeña sonrisa reconfortante.

-Lo lamento, chicos