Percy Jackson: Y los héroes de la escuela

Fin de semana

Piper

Si había algo que le encantaba, era fastidiar a la cabaña de Afrodita. Sinceramente, cuando caminaba por su cabaña con crocs, las caras de incomodidad eran increíbles. Sobre todo la de Drew.

- ¡Por Afrodita! - Escuchó a Drew exclamar - ¿Podría ser más irritante?

Piper se detuvo y la observó, sentada sobre su cama, quejándose sobre ella con sus hermanos. Cuando cruzaron miradas, Piper sonrió, se subió sus pantalones holgados y le mostró sus calcetines.

- ¡Ah! - Gritó - ¿Crocs y calcetines? 

Piper siguió caminando hacia la puerta mientras mascaba su chicle, aguantando la risa e imaginando otras posibilidades de fastidiarla. No es que le gustara usar crocs y calcetas; De hecho, era incómodo, pero ver la cara de Drew cuando lo hacía merecía un cuadro en un museo.

Caminó hasta la cabaña de Atenea, tocó la puerta y esperó a que le abrieran. Después de unos segundos, Annabeth le abrió la puerta y observó sus crocs.

- ¿Fastidiando de nuevo?

- Deberías ver sus caras.

Algunas chicas la saludaron y continuaron leyendo sus libros, diseñando o hablando de la escuela.

Ambas se sentaron sobre la cama de Annabeth y comenzaron a platicar.

Después de que una cosa llevara a la otra, empezaron a hablar de chicos:

- Probablemente estén pensando en otras chicas - Comentó una chica que se había unido a la conversación.

- Nunca sabes lo que pasa por la  mente de un chico - Dijo Annabeth leyendo algo en la computadora de Dédalos - Literalmente. 

- Probablemente estén pensando sobre cómo escaparse en la noche - Aportó Piper - Jason siempre está pensando en cosas innecesarias, y con Percy y Leo a su lado, cosas aún más innecesarias.

- ¿Por qué hablamos de esto en la cabaña de Atenea? - Preguntó Annabeth después de un rato.

Sus hermanos y Piper pensaron la respuesta. Cuando Malcom iba a dar una explicación (probablemente extraña y aburrida) Piper se encogió de hombros.

- Qué más da. Ni que tuvieran tiempo libre para escucharnos.

Percy

Después de un silencio nada incómodo en la cabaña de Zeus, Jason abrió la boca.

- Si te sientas en un muñeco vudú de ti mismo, ¿Alguna vez podrías volver a levantarte?

Percy lo pensó un momento antes de entrar en una crisis existencial.

- Mierda.

Después de un rato, decidieron visitar la cabaña de Atenea y molestar un rato.

Lester

- Literalmente, colmaste la paciencia de la persona más paciente del mundo, Apolo.

Apolo miró con reproche a Will, quien se encontraba poniéndole un poco de hielos en los labios hinchados. 

- Hace mucho que no hablaba con tu madre, ¿Sabes? - Se excusó - No sabía qué decir. Además, Meg se estaba riendo de mi.

Observó las flores que se encontraban en las ventanas de su cabaña, y comenzó a pensar en su isla. Casi podía sentir el pasto en sus piernas, el viento cuando tocaba una melodía y el rozar de las flores.

Sin pensarlo, dijo:

- Extraño mi isla.

Fue casi un susurro, pero lo suficientemente alto para que Will dejara lo que estaba haciendo y lo mirara con preocupación.

- Sé paciente. Deberían quedar unos meses - Comentó. Después de unos segundos, se animó - ¿Qué te parece ir a tocar algo de música al aire libre? Una alegre esta vez.

Soltó una sonrisa y se levantó, ignorando que le dolían los pies por correr de la madre de Will por toda la escuela.

- Me parece una excelente idea.

Annnabeth

- Te dije que pensaban en cosas innecesarias - Dijo Piper entre risas, después de escuchar la plática entre Jason y Percy.

Después de una explicación que estaba segura que nadie que no fuera hijo de Atenea entendió, los temas al azar comenzaron a brotar:

- Moriremos todos cuando el sol explote - Dijo Percy, contradiciendo algo que Piper había dicho.

 - De hecho - Inició Annabeth - Mientras los dioses no se maten entre sí y Apolo siga vivo, supongo que las cosas estarán bien. Aunque sucediera, siempre puede haber un nuevo dios del sol.

- Eso es exactamente como creo que pasará - Dijo Percy,observando lo que Malcom tenía en una libreta - No es que esté hablando mal de un dios en la cabaña de un dios, claro, pero tienen unos problemas que no son nada saludables de comentar.

Malcom se lo arrebató y siguieron hablando.

Un día normal en el Campamento Mestizo era increíble. Por el momento, las cosas estaban calmadas, pensó Annabeth. No habían recibido profecías y nuevos semidioses llegaban al campamento en perfecto estado.

- Ahora que lo pienso, ¿Dónde ha estado Reachel? - Preguntó Piper - No hemos recibido ninguna profecía.

- Deberías agradecerlo - Comentó Jason.

Annabeth rodó los ojos. 

Reachel

- Sólo un poco más...

Cuando terminó su viñeta, se sintió satisfecha. Observó su cómic, orgullosa.

- Y ahora...

Apretó el botón de publicar. 

Se dejó caer en su cama, observando cómo las notificaciones llegaban. 

Luego le agradecería a sus amigos semidioses por tener una vida tan interesante para pasarla a un cómic sin que nadie sospechara de dioses peleando en el Empire State de Manhattan.

Nota de la autora (?

Perdón por haber tardado tanto :,) pero he estado ocupada con muchas cosas. Espero que les esté gustando, y para recompensar hice un pequeño capítulo en el campamento mestizo. Si tienen alguna idea que aportar, adelante, es bienvenida, después de todo, así construyo los capítulos.

Pregunta random: ¿Quién es su padre o madre divina? El mío es Apolo xd.

PD: no me culpen si puse algo mal (el nombre de dédalos, cof cof) porque leí los libros en inglés, pero me estoy intentando acostumbrar a escribirlo en español.