Pase lo que pase... Todo estará bien.

Capítulo 37

Sakura había sido trasladada a una habitación más cómoda, ahí ya la podían visitar en el momento que desearan, poco a poco la habitación se fue llenando de globos con helio, mensajes de buenos deseos, arreglos florares y cientos de obsequios, incluso una mañana había recibido la visita de todo su grupo en compañía del profesor Terada, quien se estaba haciendo cargo mientras ella regresaba.

–Tiene que volver profesora, sus clases son más entendibles que las de él –se quejó uno de los alumnos–

Todos rompieron a reír con el comentario, incluido el profesor Terada, sabía que Sakura era muy querida por sus alumnos, todos los días le preguntaban si había alguna mejora y cuándo se incorporaría, para su mala suerte, Sakura regresaría hasta enero, Yukito comentó que la rehabilitación duraría un mes, no tendría que quedarse en el hospital, pero si tendría que estar en completo descanso.

Esta noticia ni a Shaoran le agradó, le habían arruinado sus planes de casarse en navidad, para animarlo, Sakura le dijo que podrían casarse para san Valentín, sería una época muy romántica y les daría a ambos el suficiente tiempo para tener todo preparado.

–¡Como que ya te dio el anillo! –gritó Tomoyo haciendo que las voltearan a ver– Pero si yo estaba planeando todo para que te lo volviera a dar, ese Li no sabe esperar –se quejó la amatista–

–Pues me ayudarás a los preparativos de la boda, porque queremos casarnos en san Valentín y he estado pensando... –Sakura miró a su amiga– Tal vez tú y Eriol también se quieran casar en esa fecha, ya sabes... una boda doble.

Los ojos de la amatista brillaron mucho más de lo acostumbrado, que su prima haya pensado en ella para eso le conmovía mucho, sobre todo porque sería un momento que realmente disfrutarían y quedaría marcado para toda la vida, no sabía como decirle que sí, por lo que únicamente la abrazó tan efusivamente que, si la castaña no se quejaba, Tomoyo la hubiese apretado mucho más.

–Abrazas muy fuerte –se quejó la castaña– ¿Eso es un sí?

–Por supuesto que sí, ¿cómo negarme a eso? –sonrió la amatista–

–¿Cómo negarte a qué? – las chicas vieron entrar a Eriol y Shaoran con una cesta de comida– Haremos un picnic en el hospital, trajimos comida de verdad –explicó Eriol enseñando la cesta–

–¡Tendremos una boda doble! –gritó emocionada Tomoyo, Eriol seguía sin comprender– amor, nos casaremos la misma fecha en la que se casarán Sakura y Shaoran –explicó un poco más tranquila la amatista–

–¿Eso quiere decir que me harás esperar mucho más tiempo que el planeado? –Eriol no pudo evitar fruncir el ceño, le parecía bastante esperar hasta el verano, Tomoyo y Sakura comenzaron a reír, incluso Shaoran se unió a ellas– ¿qué es tan gracioso?

–Sakura y yo nos pensamos casar en san Valentín, tienes casi tres meses para disfrutar tu soltería –Shaoran palmeó la espalda de Eriol, quien se había quedado en completo silencio–

La noticia le agradaba, no iba a esperar bastante tiempo, pero no sabía por qué era él último en enterarse de esas noticias, ni siquiera Shaoran le había revelado nada ¿qué clase de amigo es? Poco a poco se fue formando una sonrisa en su rostro y abrazó a su novia para luego besarla con todo el amor que sentía hacia ella.

Los cuatro estuvieron comiendo las delicias que habían conseguido, incluso hubo postre que más bien era para Shaoran, ya que era un pastel de chocolate, relleno de chocolate con cubierta de chocolate y con mucho más chocolate, cada que se llevaba un bocado a su boca, no podía evitar emitir un gemido de satisfacción.

–Compito con un postre –se quejó Sakura–

–Cariño, un día de estos tendré mis dos postres favoritos juntos –Shaoran le guiñó un ojo a Sakura, quien entendió hacia donde iba ese comentario y comenzó a toser por los nervios–