Capítulo 17

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Después de una semana en el hospital, las observaciones habían acabado, sus heridas estaban casi sanadas, así que le dieron el alta, aun así, le reiteraron que tendría que mantener reposo, noticia que no le agrado a Sakura, ya que en el tiempo que estuvo en el hospital se había perdido mucho de sus niños y sobre todo se perdería el fin de curso.

-Tus alumnos comprenden que son causas ajenas a ti, no te pongas triste -dijo Fujitaka para consolar a su pequeña-

-Lo sé, pero me hubiese gustado estar ahí -suspiró la chica-

-Te vendrás conmigo y con Sonomi, ahí podremos cuidar de ti mientras te recuperas del todo y vuelves a tu vida normal -explicó Fujitaka-

-Gracias papá, pero me gustaría quedarme con mi hermano -suplicó la chica-

-Hija, Touya no tendrá tiempo para cuidarte, mejor ven con nosotros, así podremos atenderte como se debe.

-Yo podría ayudarla -intervino Shaoran, quien había escuchado que la chica no quería irse con su papá- si usted me lo permite Profesor, podría cuidar de Sakura aquí en Tomoeda.

El profesor miró a ambos, sabía que algo pasaba, pero no quería entrometerse, más sabiendo que su pequeña no recordaba un mes de su vida, así que dejó pasar la situación, de todos modos, sabía los sentimientos de su hija hacia ese chico, y si no estaban juntos era por la distancia, que reiteradas veces le había dicho a Sakura que no era ningún impedimento.

-Pues, si mi hija no tiene problemas con que la cuides... -comenzó a decir Fujitaka-

-Yo no tengo problema... -Sakura comenzaba a sonrojarse- pero... Touya... -Sakura recordaba perfectamente que a su hermano no le agradaba Shaoran, en realidad no le agradaba cualquiera que se le acercara, era muy sobre protector con ella-

-Entonces quédate en casa de Tomoyo, le diremos que ahí te quedarás mientras te recuperas, no tiene por qué tomarlo a mal, sabiendo que no tiene tiempo -sonrió Fujitaka, sabía que su hijo mayor se encargaba de espantarle a los pretendientes a su pequeña, así que trató de buscarle solución-

-Gracias papá -Sakura estaba feliz por lo que su papá le había propuesto, así podría pasar más tiempo con Shaoran-

-Hablaré con Tomoyo para comentarle la situación, joven Li, espero que pueda cuidar bien de mi pequeña -sonrió Fujitaka a Shaoran-

-Pierda cuidado profesor, la cuidaré muy bien.

Sakura se sentía un poco avergonzada por las cosas que se estaban diciendo, si bien quería pasar tiempo con Shaoran, el hecho que su papá estuviera confabulándose con ellos para lograrlo rayaba en lo extraño, claro que su papá jamás se opondría en las relaciones de su hija, siempre le contó los problemas que tuvo con su mamá por la diferencia de clases sociales, aun así ambos decidieron seguir adelante con lo suyo y formar la familia que siempre soñaron, aunque Nadeshiko tuvo que partir, Fujitaka se había encargado de que sus dos hijos entendieran lo importante de luchar por lo que uno quería.

-Pues seré tu cuidador -sonrió Shaoran, le encantaba el rubor que se le formaba a Sakura cuando él se dirigía a ella-

-Eso parece -dijo apenada la chica- no te hubieses molestado -Sakura sintió que su corazón latía a mil por hora, en muchas ocasiones durante la semana había tratado de externarle sus sentimientos, pero siempre acaban interrumpiendo, en sueños recordaba un baile y estar muy cerca de Shaoran, pero se sentía bastante tímida para contarle, sobre todo porque era solo un sueño- Shaoran, ahora que no está mi papá, yo quisiera decirte que tú... bueno que tú me...

Pase lo que pase... Todo estará bien.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora