Capitulo 1

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Seattle, 22 de mayo del 2019.

JungKook se encontraba con más trabajo de costumbre ese día. Atendía varias llamadas de varios acreedores. ¡Eso era bastante estresante! Se tallo los ojos, estaba soñoliento, pero debía de terminar de ordenar los archivos mientras acordaba citas. El teléfono sonó de nuevo, no presto atención al número, solo contesto:

-Empresa Jeon ¿En qué puedo servirle? -nadie hablo desde el otro lado de la línea. JungKook frunció el ceño. -¿Quien habla? ¿Puedo ayudarlo con algo? -nadie volvía a responder. Se estaba enojando. -Mire sea quien sea tengo trabajo, escuchaba esa voz desde hace casi dos semanas. Trago seco.

-_____ -susurró ¡Joder! Dejo los papeles sobre la mesa y se paso las manos por el pelo.

-Amm.. Tienes mucho trabajo ¿no? Mejor te llamo después -él no quería que cuelgue.

-____ no cuelgues -ella no lo hizo. JungKook respiro profundamente- he extrañado mucho tu voz -confeso.

-Yo también -admitió ella- ¿Vendrás este fin de semana? pregunto. El suspiro. Deseaba decirle que sí, pero no podía. Era mejor mantenerse alejado de ella.

-No puedo princesa -apretó los ojos con frustración-Pero tratare ¿sí? No te prometo nada.

-Está bien -la escuchaba triste. Se maldijo por eso.- te dejo para que sigas trabajando. Adiós - colgó. No le dio tiempo a responder.

Era un maldito idiota, la estaba lastimando de esa manera. Debía de decirle que ya no podría estar con ella. Debía de dejar de ilusionarla. Pero tenía miedo, estaba asustado de como reaccionaria. Tiro el maldito teléfono por la pared. No le importaba nada.

Agarro su saco y sus llaves y salió de aquella oficina el cual lo estaba por volver loco. Necesitaba hablar con Jimin. Así que fue a su departamento. La secretaria le había preguntado qué había pasado, JungKook solo contesto con un "no me siento bien, dile a mi padre por favor" ella asintió. Se sentía cada vez peor y ya no lo podía ocultar.

Quería a su hermana a su lado, necesitaba volver a hacerle el amor como la última vez. Solo quería volver a probar aquellos labios tan dulces que lo hacía perder el control. ¡Mierda! La amaba y no podía estar con ella. Porque era prohibida ¡Maldita sea!

____ podía ser feliz con cualquier otro, pero él no quería verla con nadie más que no sea él. Era egoísta. Pero debía de decirle que era mejor que busque a alguien que la pueda hacer feliz. Como él lo hubiese hecho si no fuera su hermano. Pero no se atrevía.

Aparcó su auto en la entrada del departamento de Jimin. Estaba viviendo con Jennie. Al parecer iban enserio. Su amigo también estaba a cargo de la compañía de su padre. Pero no tenia tanto trabajo como él. A veces deseaba estar en su lugar.

Después de haber tocado el timbre apareció en el umbral un Jimin que el no conocía. Llevaba un delantal, al parecer estaba cocinando. JungKook rio a carcajadas hasta más no poder. ¿Su amigo cocinando? Eso nunca se lo podía haber imaginado. Jimin no sabía preparar siquiera un café, esto debería ser obra de Jennie, pensó. Su amigo lo miro mal.

-Oye cálmate, que fue obra de Jennie –lo sabía, pensó- ¿Y que te trae por aquí? –JungKook paró de reír y se puso melancólico en un abrir y cerrar de ojos- ¿Qué paso JungKook? Entra – JungKook entro y vio a Jennie en la cocina.

-Hola JungKook –le sonrió ella y se acercó a saludarlo -¿Estás bien?- el negó- ohh... espérenme apago la estufa y vengo con ustedes. Ambos asintieron.

Se habían convertido en sus amigos de confianza. Jennie ya sabía lo que el había tenido con ____. Se había enterado por Jimin, es que su amigo no le ocultaba nada a su novia y ella los había pillado hablando sobre su hermana. Jennie se había puesto muy celosa aquella vez pensando que Jimin estaba tras ____, pero al enterarse de la verdad lo había perdonado y había decidido ayudar a JungKook. Después de todo era su amigo y le agradaba mucho.

Mi Dulce Obsesión •|| JJK ||• #2 *ADAPTADA* (Semi Hot) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora