Cap. 58| "Ojalá sea..."

225 19 4
                                    

**Narra Owen**
-¿Deberíamos decírselo ya? -pregunté a Amelia unos cinco días después de que ella se hizo la prueba de embarazo.
-¿A Sara? -respondió ella- yo creo que sí. Es correcto mantenerlo en secreto por algunos días más, pero ella debe saberlo.
Estábamos en un tiempo libre de una hora y habíamos decidido pasarlo juntos en el cuarto de descanso.
-Meredith sabrá guardar el secreto -volvió a decir Amy.
-Sí -respondí.
-Y Arizona. Ella está siguiendo el embarazo -volvió a decir.
-Ambas sabrán mantenerlo. Hay que contarle a nuestras madres -sonreí.
-Es gracioso porque ya hemos pasado por esto con Salva -dijo ella riendo.
-Y parece que somos nuevos en el tema -reí.
-Estoy feliz -dijo y sus ojos brillaban.
La miré y sonreí, la traje contra mí y la abracé.
-Te amo hermosa -dije besando una de sus manos y entrelazando nuestros dedos.
-Te amo mucho -respondió y me besó.
Respondí el beso con otro beso y eso llevó a una cadena de besos. Amelia sonreía cada vez que separábamos nuestros labios.

**Narra Amelia**
La puerta se abrió y con Owen nos separamos, eran Derek junto a Meredith.
-Oh -dijo Derek tapando sus ojos- no vi nada -se lo escuchó reír.
-Puedes destapar tus ojos, no verás nada -dije riendo.
-Parece que todos venimos a las salas de descanso en nuestro descanso -rió Meredith.
-No quiero pensar lo que venían a hacer -dijo Owen sonriendo.
-Oye, no puedes decir nada, estabas a los besos con mi hermanita pequeña -dijo Derek y reí.
-Las salas de descanso son una buena escapatoria de la realidad -dije.
-No tengo dudas -Meredith me guiñó un ojo.
-¿Vamos a la cafetería? -pregunté tomando la mano de Owen.
-Vayamos -respondió sonriendo.
-Okay, los dejamos tranquilos -dije guiñando un ojo a Derek.
-Amelia, por favor -rió Derek.
-Derek ambos sabemos que tenemos una vida sexual activa solo que no lo hablamos -dije riendo.
Salimos con Owen y nos dirigimos a la cafetería, allí pedí una limonada.
-¿No vas a tomar ni comer nada? -dije mientras llevaba el sorbete a mi boca.
-No -sonrió mientras me veía tomar- solo vine a verte tomar tu limonada.
-Oh -reí y le extendí el vaso- ¿quieres un poco?
-No, gracias.
-Vamos, yo sé que quieres -dije mientras nos sentábamos en una mesa.
-Está bien, vamos a probar la famosa limonada de Amelia Shepherd -dijo Owen tomando el vaso y llevando el sorbete a su boca.
-Oye era solo un poco -dije riendo mientras le sacaba el vaso de sus manos.
-Está muy buena -dijo Owen y besó mi mejilla.
-Me has tomado medio vaso ¡Owen! -golpeé su hombro riendo.
-Lo siento, olvidé que ahora te alimentas por dos -susurró en mi oído y sonreí al escucharlo.
-Hablemos de eso -dije- hay que contarle a Sara.
-Sí -sonrió Owen- ¿te parece hoy en la noche antes de cenar?
-Okay -dije- wow, estoy nerviosa.
-Estará todo bien. Sara entiende las cosas. Es preferible contarle antes de que sepa por otra persona, ¿recuerdas lo que sucedió con Salva? se enteró porque te escuchó hablando con Maggie.
-Tienes razón. Solo espero que se lo tome bien -dije y acaricié la mejilla de Owen.
Salí a eso de las 6PM del hospital mientras que Owen tuvo una urgencia de último minuto y debió quedarse.
-Sara, hija, estoy en casa -dije entrando con Salva en mis brazos.
Sara estaba en el sillón leyendo un libro.
-¿Qué lees? -pregunté mientras besaba su cabeza.
-"La vuelta al mundo en ochenta días" -respondió.
-Oh -sonreí mientras dejaba a Salva en el piso con sus juguetes- buena elección.
-La abuela se fue hace un rato, vino a visitarme -dijo refiriéndose a la mamá de Owen.
-¡Qué bueno! me alegra que no hayas estado sola -admití- ¿cómo está la abuela?
-Genial. Se la ve muy bien, reímos mirando una comedia en Netflix -me comentó mientras cerraba su libro.
-Wow, suena genial -dije acariciando su mejilla.
-¿Y papá? ¿911? -preguntó.
-Ajá -asentí sonriendo- ¿qué te parece si te vas a dar un baño mientras preparo la cena?
-Está bien -respondió parándose y caminando hacía las escaleras con su libro en mano.
Owen llegó a casa perfectamente para la cena.
-Hola -dijo besándome y tomando a Salva en sus brazos - ¿y Sara?
-¡Aquí! -dijo bajando las escaleras.
-¡Mi niña! -dijo abrazándola y besando su mejilla.
-Auch, papá, tu barba pincha -protestó riendo.
-Lo siento, debo afeitarme -admitió Owen.
Todos fuimos al comedor para cenar. Owen puso al pequeño Salva en su sillita para comer.
-Huele rico -dijo Sara sentándose.
Había preparado lasagna.
-Wow, sigues sorprendiendome -dijo Owen riendo.
-¿Lo hago? -pregunté riendo mientras le daba la papilla a Salva.
La cena transcurrió tranquila. Sara volvió a proponernos la idea de ir a la playa los cuatro. Prometimos que haríamos lo posible porque teníamos mucho trabajo.
-Papá -suplicó Sara- por favor.
-Haremos lo posible -respondió Owen.
-Nunca he ido a la playa con mamá -volvió a decir Sara.
-"Ma- má" -dijo Salva desde su sillita.
Los tres lo miramos con la boca abierta.
-¿Qué dijiste Salva? -pregunté entusiasmada.
-"Pa- pá" -dijo otra vez.
-Oh por Dios -dijo Owen levantándolo en brazos- ¡Salva estás hablando!
-¿Salva quien es ella? -preguntó Sara señalándome.
-"Ma- má" -dijo Salva y sonrió.
-¡Muy bien! ¡sí! -dije riendo y besé su mejilla.
-¿Y él? -Sara señaló a Owen.
-"Pa- pá" -volvió a decir.
-¡Muy bien! somos papá y mamá -dijo Owen señalándonos.
-¿Y quién es ella? -pregunté señalando a Sara- ella es "Sa- ra".
Salva nos miró y sonrió pareciendo no entender.
-"Sa- ra" -insistió Owen.
-"Sa" -comenzó a decir Salva babeandosé- "ra" -terminó de decir- "¿Sa- ra?".
-¡Sí! -dijo Sara entusiasmada- ¡lo hiciste Salva! ¡puedes hablar!

**Narra Owen**
Estábamos muy felices escuchando a Sara pronunciar sus primeras palabras. Hacía mucho las estábamos esperando pero él parecía no querer decirlas.
Luego de un rato, lo dejé en su corralito para que jugara con sus juguetes y volví a la mesa con Amelia y Sara. Amelia me miró insinuando que ya era hora de contarle a Sara lo del embarazo, asentí con la cabeza.
-Sara, hija -dijo Amelia- ¿podemos hablar sobre algo importante?
-Claro -respondió Sara extrañada- ¿qué sucede?
Amelia intentó decirlo pero las palabras no salían.
-¿Quieres que lo haga por ti? -pregunté al ver que le costaba hablar.
-No -dijo sosteniendo mi mano.
-¿Qué sucede? -preguntó Sara.
-Pequeña, tu papá y yo... estamos esperando otro bebé -confesó finalmente.
-Y tu estás esperando otro hermanito o hermanita -añadí.
Sara nos miró sorprendida.
-Sabía que algo sucedía contigo mamá -dijo Sara mirándo a Amelia.
-¿De qué hablas? -preguntó.
-Te has tocado la panza en estos días -comentó Sara- y era una forma rara, era como una caricia.
-Oh -rió Amelia- debo haberlo hecho inconscientemente.
-Ajá -dijo Sara.
-Sé que puede parecer un poco apresurado -comencé a decir- pero estaremos todos bien. Somos una familia.
-Es un poco apresurado -dijo Sara- pero está bien -sonrió- espero que sea una nena.
-Hay que esperar un tiempo más para saber el sexo -dijo Amelia.
-¿Entonces cuando tuvieron una cita hicieron un bebé? -preguntó Sara- cuando la tía Maggie nos cuidó.
Amelia me miró abriendo sus ojos y sorprendida.
-¿Cómo supones esas cosas? -pregunté.
-Papi, ya sé cómo se hacen los bebés -respondió Sara riendo.
-Sí -asintió Amelia- técnicamente hicimos el bebé ese día -rió- pero nunca planeamos hacerlo. Es una sorpresa, una sorpresa linda.
-Wow, a veces las sorpresas son bebés en tu panza -rió Sara.
-Gracias por entender todo tan bien hija, sabes que si deseas comentarnos algo, lo que sea, puedes hacerlo -comenté.
- Lo sé. Está bien -sonrió Sara.

**Narra Amelia**
Llegó la hora de dormir y fui hacía la habitación de Sara para darle las buenas noches. Me senté a un lado de la cama y besé su frente.
-Me sorprende que seas tan madura -dije sonriendo.
-¿Cómo? -preguntó.
-Significa que entiendes todo a la perfección, se nota que cada día que pasa eres más grande -comenté- estoy orgullosa de ti.
Sara apoyó su cabeza en mi hombro.
-Tal vez me cueste un poco asimilar lo del nuevo bebé. Pero de verdad estoy feliz, más si ustedes están feliz. Prometo ser una buena hermana con ambos bebés -rió Sara.
-Está bien hija, tomate tu tiempo. Nunca vayas a pensar que un nuevo hermano puede desplazar el lugar que ocupas, ¿si? -dije abrazándola.
-Lo pensé con Salva ¿recuerdas? pero me di cuenta de que en verdad ustedes tienen amor para darnos a los dos por igual. A los tres ahora que hay un bebé ahí dentro -Sara acarició mi barriga y reí.
-Te amo mucho, mucho, hasta el cielo -le dije.
-Yo te amo más de lo que amaría ir a la playa -Sara rió aprovechando el momento para expresar su deseo.
La abracé y acaricié su cabello hasta que se quedó dormida. Estaba feliz porque ella había tomado la noticia muy bien, era tan hermosa, buena y madura. La pequeña Sara ya no era tan pequeña.
-¿Se durmió? -preguntó Owen dejando a Salva en su cuna una vez que entré a la habitación.
-Owen -dije.
-¿Sí? -dijo acercándose a mi y rodeandome por la cintura.
-Debemos ir a la playa -comenté sonriendo- pidamos días libres.
-A la playa entonces -sonrió y me besó.


❃Only freaking superheroes❃| Omelia {ᴛᴇʀᴍɪɴᴀᴅᴀ}Where stories live. Discover now