La prometida del monstruo

Antes de la ceremonia, un nuevo visitante.

- ¿Realmente planeas conquistar a la diosa de la muerte con aquella apariencia?- preguntó Angerborda mirando al rey de los Jotun, vestido con taparrabos y pulseras en las muñecas.

- Claro que no, si deseo casarme con una princesa Asgardiana debo lucir similar a un Asgardiano- dijo como si fuera lo más obvio

- ¿Transformarás tu apariencia solo por amor?- preguntó Angerborda sorprendida, casi inspirada por lo que el hombre haría

- No solo por amor, por amor a la mujer más poderosa del universo, la he amado desde que ambos éramos niños

- ¿Eran muy amigos cuando niños no?- preguntó la mujer curiosa

- Los mejores amigos, hasta que pedí su mano en matrimonio, creo que ella lo tomó como si fuera una traición

- Tal vez sea porque antes de consultarlo con ella le pediste a su padre que te diera su mano en matrimonio

- Él aceptó, ese viejo rey haría todo para obtener la paz con Jotunheim, Laufey mi padre también había aceptado aquel matrimonio, pero mis razones para querer casarme con ella eran nobles, yo la amaba de verdad, pero ella nunca creyó en ese amor

- ¿Cómo es que siendo un Jotun podías entrar en Asgard y pasear por allí sin que te discriminaran?- preguntó la mujer bastante confundida

- Los reyes sabían de mi origen y Heimdall me dejaba entrar, pero en ese tiempo usaba mi apariencia Asgardiana.

- ¿Puedo ver qué tal?- preguntó curiosa había conocido a Bleyistr tal y como era ahora, un gigante de hielo completamente azul, con marcas en el cuerpo y taparrabos, jamás lo habría imaginado adoptando la apariencia Asgardiana.

Y entonces Bleyistr se transformó en un hombre de tez blanca bastante alto dado a su origen, largos cabellos blancos que le llegaban hasta la cintura y unos penetrantes ojos grises.

- Impresionante- dijo Angerborda realmente asombrada, ella cuya debilidad eran los dioses Vanir y Aesir casi podía decir que su rey no tenía nada que envidiarles.

- Si Hela hubiera aceptado casarse conmigo, ahora reinaríamos sobre todos los reinos del Yggdrasil- suspiró el hombre

- ¿Estás seguro? No eres el legítimo heredero al trono, si vas por Hela deberás conocer a tu hermano – dijo seriamente la mujer

- Loki Laufeyson, el hijo legítimo de Farabauti y mi padre, tienes razón yo solo soy el hijo bastardo de Laufey, sin embargo yo no fui abandonado para morir en un páramo congelado, yo amo Jotunheim con la misma intensidad que él lo detesta.

- ¿No le guardas rencor por haber intentado destruir nuestro mundo?- preguntó Angerborda

- No lo culpo, ni siquiera por haber matado a padre, si yo hubiera descubierto que me abandonaron de aquella manera y me hubieran criado creyendo que los Jotun somos monstruos, también hubiera hecho lo mismo

- ¿Cómo sabes que no te mataran apenas te vean llegar? Ellos piensan que realmente estás aliado con Thanos

- Hela me conoce, sabrá la verdad, tengo entendido que Loki es un buen hechicero, siempre puede entrar en mi mente y ver que digo la verdad

- Te deseo suerte

- No, tú no me deseas suerte- sonrió el Jotun- lo que tu deseas es que Hela se quede conmigo para que tu antiguo amante vuelva a tus brazos