Doce; Nick

4K 305 29
                                    

Espero a Lía apoyado en el coche y sonrío cuando ella aparece. Observo su atuendo cómodo y se acerca a mí, colgando bien la pequeña mochila en su espalda. Se acerca a mí y rodeo su cuerpo con uno de mis brazos y beso su coronilla.

— ¿Preparada para ir a disparar?

— Por supuesto.

Sonrío y le abro la puerta para que entre, sabiendo que dije que no volvería a hacerlo. Cierro la puerta y rodeo el coche para montarme. Había esperado la noche anterior hasta que ella se durmiera y había estado nervioso porque sí, ese hombre podía denunciarme y no me convenía tener una denuncia. Había escuchado la voz de Lía mientras la esperaba en el portal y miré indeciso el coche hasta que me acerqué porque sí, era ella.

La sangre me había hervido y había intentado no perder los papeles delante de ella. Un día por Snapchat le dije que siempre la protegería de quien intentase hacerle daño, y ahí estaba dos años después.

Aunque quizás quien terminaría haciéndole daño sería yo.

— ¿Has dormido bien? —Le pregunto.

— Sí, gracias por quedarte ayer.

— No tienes que darlas. Me encanta como hablas en inglés, recuerdo cuando por Snapchat apenas te entendía.

— Bueno —se ríe—. He tenido que ponerme las pilas si quería sobrevivir.

Sonrío y me coloco las gafas de sol. Hoy hace un buen día y sé que lo pasaremos bien. Le enseñaré a disparar, tomaremos unas cuentas cervezas y comeremos algo. Quería que ella se despejara y también quería pasar tiempo con ella ya que hoy no trabajaba. Lía baja la ventana y saca su mano. El viento entra y hace que su pelo se mueva y su perfume me llegue.

La música suena y doy golpecitos en el volante al ritmo de la canción.

— Ojalá con un coche descapotable.

— ¿Te gustaría?

— Sí. Sentir el viento en mi cara mientras una canción apropiada para el momento suena en la radio.

Sonrío y niego con la cabeza.

— ¿Demasiadas películas? —Pregunta.

— Demasiadas películas, ángel. Pero podríamos alquilar un coche descapotable e ir a algún lado.

— Yo podría conducir —sugiere.

— No sé si me sentiría a salvo contigo en el volante.

— ¡Conduzco muy bien!

— Te creo, pero comprobarlo con un coche alquilado... —Lía me mira mal y me río— Es broma, es broma.

Lía se pone en posición y me pongo detrás de ella haciendo que se ría.

— No estás colocando las manos bien —le digo poniendo sus manos mejor—. Tienes que tener fuerza y aguantar el arma, ¿Vale?

— Vale.

— Apunta y dispara, ángel.

Tiene unas gafas de protección y muerde su labio con fuerza, apuntando. Dispara y veo que le ha dado al objetivo. Alzo mis cejas impresionado y ella sonríe abiertamente.

— ¡Le he dado! —Grita emocionada.

— ¡Lo has hecho! Me has dejado impresionado.

— Lo sé, soy impresionante.

— Continúa, venga.

Lía sigue disparando y acertando y me pongo a disparar con ella, haciendo una competición.

Goodnight and go (Disponible en Dreame)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora