ANOREXIC ||L.T|| (PAUSADA TEMPORALMENTE)

CAPÍTULO ✖12

- Espera, ¿qué? -dije caminando hasta ella y deteniéndola antes de que se fuera y nos dejara a Louis y a mí completamente solos.

- ¿Qué ocurre Rachell? ¿Hay algo malo en ello? -me preguntó ella al notar el espánto en mi rostro.

- Iré contigo.

- ¿Qué? -dijo Louis instantáneamente en un tono bastante molesto.

- No te preocupes. Yo haré el trabajo mañana, no te molestes en venir. -dije en seco, intentando parecer dura e  inmune a la perturbadora pero atractiva mirada que me estaba dedicándo en esos momentos.

- Pudiste decirlo antes, ¿no crees? -me preguntó cínicamente.

No le respondí.

Él tomó su mochila sumamente enfadado y se dirigió hasta la puerta.

Al estar frente a ésta situó su mano sobre la manilla por unos segundos, al parecer reflexionando.

Repentinamente retornó en mi dirección y al quedar cara a cara frente a mí  sujetó mi brazo con  rapidez pero gran delicadeza para no lastimarme.

- No intentes evitarme en vano. Ya te he dicho que cuando deseo algo lo obtengo, y tu  no serás la excepción. -susurró en un tono grave y amenazante dejándome con los pelos de punta en cosa de segundos.

Me dedicó una última mirada, furiosa y perversa a la vez.

Me asusté, su maldito comportamiento y actitud cambiaban tan constantemente... Algo muy desagradable pero al mismo tiempo tan malditamente atractivo y seductor... No podía seguir así.

Se volteó rápidamente y salió por la puerta principal en dirección a las escaleras, ya se había ido.

- Wow... -pronunció Grace aún algo extrañada por la actitud de Louis conmigo- ¿Quieres hablar de eso? -me preguntó acabando con la silente atmósfera que vivíanos en ese momento.

- No gracias. -le respondí inmediatamente. No estaba dispuesta a comenzar una conversación en torno a ese chico.

En primera instancia había decidido acompañar a Grace a la fiesta para no tener que pasar una noche con Louis, porque sabía perfectamente como terminaría, junto a él simplemente no era capáz de controlar mis impulsos y mucho menos los suyos.

Y si hablabamos de él con Grace sería practicamente lo mismo. Perder tiempo, pasarme toda la noche pensando en él sin razón alguna.

Debía de alguna manera olvidarme de todo eso por al menos unas cuantas horas, y para eso iría con Grace, para despejar un poco mi mente de todos esos pensamientos que no hacen más que  embobarme y entorpecer aún más mi actuar.

- Okey, entonces... ¿Quieres ir? -me preguntó algo dudosa de que yo quisiera ir con ella o si en realidad lo había utilizado como excusa para evitar a Louis.

Joder, ya estoy pensando en él denuevo.

- Claro que sí quiero. -le respondí esbozando una sonrisa poco convencida.

[***]

- ¡Dios mío!!! -exclamé al bajarme del auto de Grace y encontrarme con un gigantesco bar con cientos de personas dentro y  fuera de este.

La música y las luces se podían percibir aún cuando nos encontrabamos a dos cuadras del lugar.

Algunos reían, otros bailaban, algunos se drogaban, fumaban o simplemente conversaban a la afueras del lugar.

¡¿En qué diablos me había metido?!! Estaba claro que en este lugar se podía hacer y pasar absolutamente de TODO.

Quizás yo solo estaba exagerando por el simple hecho de que no había ido a una fiesta masiva hace más de 2 años, no eran algo común para mí.