ANOREXIC ||L.T|| (PAUSADA TEMPORALMENTE)

CAPÍTULO ✖ 11

Estaba en mi habitación. Tenía las mejillas empapadas y mi respiración agitada.

Recorrí con la mirada a mi alrededor y grité atemorizada al ver a Louis parado frente a mí.

Cientos de imágenes suyas persiguiendome e intentando asesinarme aparecieron en mi mente y volví a caer en el llanto.

Él se acercó a mí con preocupación.

Hundí mi rostro en la almohada de mi cama y grité con temor. Me sentía terriblemente vulnerable.

- Respira Rachell... Tranquila, a sido solo una pesadilla. Estoy aquí junto a ti... -Murmuró y me tomó entre sus brazos .

Y ese es el problema.

Está aquí... Junto a mí.

¿Había sido una fantasía que imaginó mi subconciente? ¿Ese sueño me estaba advirtiendo algo.... o no debo prestarle importancia?

No sé que pensar.

Creo que estoy enloqueciendo. Definitivamente lo estoy.

- ¿D-Dónde está Grace? -Tartamudeé con mi respiración aún algo agitada. Intentando apartarme unos pocos centímetros de él.

- Ella está aquí. Pero no te preocupes... Tenías razón, es mejor conversar y solucionarlo todo -Dijo con extrema sutileza mientras acariciaba un mechón de mi cabello y me observaba con ternura.

Era extraña la rápida forma en que podía cambiar su actitud y forma de parecer... Me asustaba un poco, y no podía evitarlo.

Sobretodo por el hecho de que hace unos minutos, lo había visto forcejeandome e intentando matarme, o almenos mi mente lo había visto.

Conduje mi mirada a el reloj y ya eran las siete y treinta de la tarde.

La fría corriente de viento que traía la oscura noche consigo ya comenzaba a entrar por mi ventana, provocandome un corto escalofrío el cual Louis pudo notar.

Él se levantó de mi cama y cerró cuidadosamente la ventana, luego se volvió en mi dirección.

- He dormido más de una hora... ¿Por qué no te has ido aún? -Le pregunté recuperando la normalidad en mi respiración.

- Quería estar aquí para cuando despertaras. Te he traído esto... -Dijo tomando entre sus manos una bandeja con un platillo de cereales integrales y un poco de yogurt, ofreciéndomela delicadeza.

- ¿Qué ocurre contigo?

- ¿Por qué lo dices? -Me preguntó sonriente pero algo desconcertado ante mi pregunta.

- Lo digo porque hace un rato estabas de lo mejor, simpático, tierno... Luego insultas a Grace totalmente enfurecido, ¿y ahora vienes aquí feliz de la vida a ofrecerme algo de cenar? Eres extraño.

- ¿Qué? -Me preguntó con divesión- Yo no soy fricky en absoluto.

- ¿Fricky? Yo no te he llamado fricky. Solo creo que tus cambios de ánimo son un poc...-Dije sin poder continuar puesto que el chico había puesto su dedo índice sobre mis labios. Haciéndome callar.

- Shhhh... -Susurró provocandome un leve escalofrío- No he venido hasta aquí para discutir si soy extraño o no. -Dijo causando en mí algo de temor al recordar la razón por la que había venido en mi pesadilla.

- ¿Ah no...? -Le pregunté en un tono bajo. Rogando al cielo que no hiciera lo que pensaba.

Cuidadosamente situó su mano derecha sobre mi barbilla, tomándo posesión de mi rostro y acercando el suyo hacia mí.