— A ver... tú eres un poco borde —dice Blanca.

— ¿Solo un poco? —Ríe Jennifer y la miro mal.

Me preparo para nuestra cita con los militares y cuando Nick me recoge me sonríe abiertamente.

— ¿Tus amigas están listas?

— Sí, nos están esperando.

Entro en el coche y me pongo el cinturón. Nick arranca y una canción de Harry Hudson empieza a sonar.

— ¡Oh! Harry Hudson, me encanta.

— Lo sé —le da un poco de voz—. Subiste esta canción a tu stories de instagram y decidí escucharla.

— Tiene canciones muy buenas.

— He escuchado su disco en Spotify.

Sonrío y miro por la ventana. It's okay está sonando mientras vamos al hotel de las chicas y no puedo evitar mover la cabeza un poco al ritmo de la canción y Nick da con sus dedos en el volante.

Estoy nerviosa porque no sabía que iba a pasar esta noche. Mi punto fuerte no era preparar citas a ciegas y tenía miedo de todo lo que podría y no podría ocurrir.

— Todo irá bien —dice—. ¿Estás disfrutando las vacaciones?

— Sí, estoy vageando la mayor parte del día.

Limpiaba, iba a comprar, hacía la comida y veía Netflix a todas horas hasta el punto de que ya no sabía que ver.

Hablaba con Nick por Snapchat a veces y le había preguntado por Luke. El rubio estaba en Chicago de vacaciones viendo a la familia, por eso no lo había visto por el bar.

— ¿Esas son tus amigas? —Me pregunta.

Miro y entrecierro los ojos porque no veo de lejos y asiento. Nick para, toca al claxon y yo bajo la ventanilla para sacar el brazo y mover mi mano de lado a lado.

Las chicas se acercan y Nick me mira.

— Son las mismas que hace dos años.

— Sí, esas que pensaban que podías asesinarme.

— Qué retorcidas las mujeres.

— Entiendenos —me río—. El mundo no está para confiar mucho en la gente.

— Tienes razón. Hola de nuevo chicas hermosas —saluda Nick a mis amigas cuando entran en el coche—. ¿Qué tal?

— Muy bien, ¿y tú? —pregunta Blanca.

— Mejor que nunca, ¿preparadas para conocer a esos chicos calientes? —Se pone en marcha y ellas se ríen.

Nick era un buen chico, por lo menos es lo que él me había mostrado. Siempre estaba con una sonrisa y buenas palabras en su boca.

Jennifer me decía que haberlo encontrado en una aplicación para ligar y que no fuese un capullo había sido suerte.

Mi prima, sin embargo, decía que era el destino. Que esa experiencia estaba para mi.

Goodnight and go (Disponible en Dreame)Where stories live. Discover now