Capitulo 27. Chains of love.

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Parte 1. My sweet shackles.

-Tranquilo, ya paso…- le susurro el ojimarron.

Ambos se encontraban sentados en la cama. El reloj marcaba la una de la mañana. Llevaban una media hora en esa posición. Zayn acariciaba la espalda de Liam mientras le susurraba en el oído para poder tranquilizarlo. Tres días habían pasado desde el regreso del castaño y todas las noches, sin hacerse esperar, lo atacaban las pesadillas que lo despertaban bañado en sudor y con la respiración agitada. El azabache despertaba unos segundos antes por los gritos desesperados de su amante. No le molestaba en lo más mínimo. Todos sabían que Zayn amaba dormir como nada en este mundo, pero por Liam, él estaba dispuesto a pasar todas las noches en vela. No le sorprendía los ataques de pánico que sufría su amado, ni el hecho de empezar a usar inhalador. La vida era un poco más difícil, pero habían pasado por una etapa de traumas para su relación, uno más que el otro. La respiración del ojimiel se calmo y el sudor que perlaba su cuerpo se había secado.

-¿Ya estas mejor?- pregunto tímidamente el ojimarron mientras abrazaba por la espalda al otro chico.

Liam negó con la cabeza y deshizo el abrazo. Se levanto de la cama y predio una lámpara. La tenue luz lleno el cuarto, revelando cosas que la oscuridad esconde. Una de ellas, las cicatrices en la espalda de Liam. Zayn se removió nervioso al verlas. Nunca se lo confesaría a nadie, pero su mente también estaba plagada de pesadillas. En ellas se podía ver como Liam era flagelado hasta la muerte y él solo podía ver, no podía interferir. El castaño se coloco un par de pantalones deportivos y salió del cuarto. El azabache suspiro derrotado y se coloco unas pantuflas. Ambos salieron del cuarto, uno detrás del otro. Entraron al pequeño gimnasio de la mansión. El castaño se dispuso a levantar pesas y hacer varios ejercicios. Zayn, se quedaba en una esquina contemplando todo el esfuerzo que realizaba su amado. Era mejor dejar que Liam tratara con sus demonios de la manera en la que él quisiera. Después de unas dos horas subieron al cuarto, se bañaron juntos y se recostaron en la cama. En el momento en que la cabeza del castaño toco la almohada termino roncando. El cansancio físico era la única manera en la que podía dormir sin sueño. El moreno lo contemplaba dormir, con su cara contrista por el dolor de su alma. Tenía miedo de dormirse, despertar y verlo en uno de sus ataques de pánico. Era doloroso e insufrible. Pero tenia que ser fuerte. En esa mansión destrozaron a Liam hasta el límite, y armarlo seria un proceso sumamente largo y muy trabajoso. ¨Pero por amor se realizan todas las cosas¨ era lo que pensaba. Se recostó a su lado y acaricio el cabello de su amado, bajo su mano y toco la delicada barba que tenia, sus carnosos labios, sus pobladas cejas, sus ojos cerrados, sus mejillas sonrojadas por el ejercicio y el baño de agua caliente.

-Lo siento…- susurro el ojimiel.

Zayn se escandalizo al escuchar su voz. Cualquiera pensaría que Liam ya estaba dormido.

-¿Sientes qué?- pregunto con voz baja el moreno.

-La falta de atención que he tenido contigo- confeso el castaño mientras abría los ojos.

Zayn frunció la nariz. Durante esos días Liam le había dado abrazos y besos hasta la muerte. Pero su novio no se refería a eso, si no al hecho de la falta de atención en la cama. No es que se la exigiera ni mucho menos, pero ambos eran hombres y tenían la misma edad, sabían que el cuerpo tiene necesidades que tienen que ser suplidas. Zayn se inclino y beso la frente de su amado. Esperaría todo el tiempo que fuera necesario por volver a sentir la cálida piel desnuda de su amado. Le sonrió pero el más alto le dio la espalda. Se sentía tan poco hombre por no poder complacer a su chico. Zayn no lo molestaba con el tema y nunca lo haría, el moreno era demasiado desligado de sí mismo, cuando se trataba de él. Pero, es una de las cosas que Liam no podía soportar. Fue criado con la idea de que un hombre le tiene que suplir a su pareja todo lo que necesite, y el sexo estaba incluido en esa lista. Y mírenlo, despertando todas las noches sudoroso, bajando a hacer ejercicio hasta la muerte para regresar a la cama y solo dormir como si nada hubiera pasado, aunque fuera todo lo contrario. Mejor era dormirse y alejar todos esos pensamientos depresivos.

Chains Of Love- ZiamWhere stories live. Discover now