Capitulo 8. Hi, I'm Louis.

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Louis entro en la mansión. Los nervios de Zayn eran más que evidentes, tanto tiempo conviviendo que lo conocía perfectamente. Caminaron a la sala de estar, se sentaron en total silencio, sepulcral, un silencio tan tangible que podría cortarse. Los chispeantes ojos azules escaneaban todo movimiento del azabache. Zayn era consiente de que su amigo había iniciado su análisis, pero también estaba seguro que jamás adivinaría la razón por la cual se encontraba ahí.

El silencio incomodo el cuerpo del castaño, si no le sacaba la verdad a su amigo ahora, nunca lo haría –Entonces ¿Para que me necesitabas?- pregunto asiendo una mueca con su labio.

-Yo…- Las dudas se agolparon en su mente, ¿Cómo poder platear algo tan grave como lo ocurrido? –Creo que el comienzo es bueno-.

La explicación de los eventos sucedidos después de la escuela no eran muchos, pero si llenos de suficiente información por digerir. Las palabras seguían una tras otra, las imágenes que Louis creaba en su cabeza no podían parecer más lejos de lo real. ¿Un humano de mascota? ¿Había escuchado bien? ¿O solo era su imaginación? Los segundos se volvieron minutos, las palabras se transformaron en ecos. Tenia que pensar muy bien lo que debían hacer. Estaba consiente que Zayn lo había llamado para ayudarlo a crear un plan, como controlar la situación era lo primordial.

-Una cosa mas Louis- dijo el azabache perturbando los pensamientos del ojiazul.

-Dime-.

-Liam no quiere habar conmigo- hizo una pausa, en verdad le dolía que el ojimiel no tuviera confianza en él -¿Podrías hablar con él?-.

-Claro que si, solo prepara unas bebidas y algo que comer- una dulce sonrisa se pinto en el rostro del castaño.

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Liam llevaba rato sentado en el borde de la ventana, el aburrimiento y el miedo no dejaban su cuerpo. ¿Aburrido? La palabra correcta seria cansado, cansado de la situación, cansado de no poder comportarse de manera normal. Y su amo, el joven había bajado a abrirle la puerta a otra persona, y mejor era no saber quien podría ser. Entre mas lejos de los problemas se encontrara, seria mucho mejor para todos, o por lo menos mejor para él.

La puerta se abrió lentamente, el ojimarron se quedo parado en la entrada, con otra persona a sus espaldas. No se podía observar toda la persona, lo que si se podía distinguir era que la otra persona era un varón. El corazón del ojimiel dio un vuelco. Los traumas de su infancia, escenas asquerosas y horrendas, lo llenaron. No quería llorar, no podía llorar. El azabache entro a la habitación y dejo un plato de bocadillos en la mesa. Se acerco lentamente al otro joven.

-Liam, quiero que conozcas a alguien- dijo el ojimarron con una dulzura calmante en su voz.

-Claro que si amo- respondió el castaño con su voz quebradiza.

El joven de piel bronceada salió del cuarto, dejando a los dos castaños en un incomodo silencio. Louis se acerco a los bocadillos y se sentó en uno de los sillones. Espero un rato a que el otro joven reaccionara, pero por su semblante estaba seguro que eso nunca pasaría.

-¿Te molestaría sentarte conmigo?- pregunto el ojiazul, mientras se metía otro canapé en la boca.

Sin responder el castaño se sentó lo más cerca posible de Louis sin que sus cuerpos tuvieran contacto. No quería malinterpretar todas las acciones de las personas que lo rodean. Pero, después de ser vendido, violado, tratado como poco menos que un animal ¿Otra reacción seria mas humana? Lo dudaba, no era una posibilidad que plantear, simplemente era él. Asustado de las acciones de los demás.

-Disculpa mis modales- dijo el ojiazul extendiendo su brazo al ojimiel –soy Louis, ¿Y tu eres?-.

-Mi nombre es Liam- respondió sin estrechar la mano del otro.

-¿Quieres una taza de té?- pregunto mientras vertía un poco del liquido, de un aroma agradable y color amielado.

- Me agradaría-.

EL comportamiento del ojimiel era poco consistente. Ni siquiera él conocía la manera de tratar a una persona que no es tu amo, no tiene deseos sexuales contigo y que no es una mascota. Podría tratarlo como un igual, eso esperaba.

-No quiero que esto sea mas largo de lo que debe de ser- soltó el ojiazul tomándole un sorba a su bebida.

De carácter directo, Louis odiaba darle vuelas de más a los asuntos. Problemas le había ocasionado antes, pero en este tipo de problemas amaba tener un temperamento como el suyo. Dejarle claro al ojimiel lo que estaba por ocurrir, era lo mejor, para él y para todos.

-Bien, te hablare un poco de mi. Para que esta plática tenga sentido- dijo el chico que era más grande en edad.

-De acuerdo- respondió titubeando el otro castaño.

-Yo trabajo para el joven Malik, llevo a sus servicios un par de años. En primera, quiero que tu también lo comprendas a él- la mirada de Louis era penetrante, fuerte como el acero –Lo que esta pasando es nuevo para él. No quiere nada contigo de maneras que tu no desees, solo quiere que esto termine- otra pausa, tenia que observar si el ojimiel captaba el mensaje, por su mirada eso aparentaba –Solo quiere llevarse bien contigo, que puedan platica. No te diré que no sigas tus reglas, son tuyas y por alguna razón las tienes. Yo estaré aquí casi todos los días, espero que tanto tú como yo nos podamos llevar bien. Y por favor, escucha todo lo que te digo, Zayn es un buen joven. Él también a pasado por cosas dolorosas en su vida, no es una sugerencia, ni mucho menos una orden, pero seria bueno que empezaran a platicar. Que el te conozca un poco mas, y tu a él-.

Las palabras de Louis estaban cargadas de sabiduría, mejor consejo no pudo recibir. El no querer ver que no solo él la pasaba mal, sino que su nuevo amo también quería escapar de lo sucedido en ese poco tiempo. Tener al ojiazul de aleado, podría serle útil. No que estuviera pensando en cualquier retorcida idea para escapar. No puede mentir, ya lo había pensado, pero el recordar que estaba bajo vigilancia era suficiente para atrofiar sus planes.

-Muchas gracias- dijo Liam con un tono de voz muy bajo.

Una pequeña sonrisa se escapo del labio de Louis, se paro del asiento y se encamino a la salida –Por cierto puedes llamarme Louis- fue lo ultimo que dijo antes de dejar solo al castaño.

En la sala Zayn esperaba impacientemente, su mejor amigo y su… Y Liam, se encontraban hablando desde hace un par de horas. Quería que todo terminara, quería aventar todo por la borda, quería ser una persona normal por un solo día. ¿Era eso mucho pedir? Como respuesta a sus plegarias Louis bajo por los escalones y al llegar a la primera planta se puso su chamarra.

-¿Qué paso Louis?- pregunto desesperadamente.

El castaño le dio un cariñoso puñetazo en el brazo –Es mejor que los deje solos, yo vendré el lunes, y podremos ver como a avanzado su relación-.

-Ya hablas como todo un Psicólogo- dijo Zayn, para aligerar el ambiente.

-Gracias, te recomiendo que pidas algo de comer para los dos y que intenten platicar- se despidió de su amigo con un abrazo y salió de la mansión.

Al paso de un rato Liam bajo del cuarto de su amo para encontrarlo pensando en el sillón. ¨Es momento de iniciar con lo que Louis me propuso¨ pensó. Con lentitud se acomodo a los pies del azabache y beso delicadamente su mano. Un acto tierno, que termino por exaltar al distraído Zayn.

-¿En que piensa amo?- pregunto el ojimiel.

-En nada Liam, yo solo… Nada- hizo una pausa para recapacitar el gesto del joven, un beso en la mano. Según su conocimiento era de devoción, ¿Qué mas podía ser?  -Encargue una pizza ¿Espero que te guste?-.

-Claro que si amo- respondió el ojimiel.

Entre un silencio, de naturaleza natural, y no incomodo como había sido hasta ese momento. La idea de conocer a Liam ya no era solo un pensamiento, Zayn tenia la necesidad de conocerlo mas afondo. Saber quien era ese joven, conocer a Liam.

Chains Of Love- ZiamWhere stories live. Discover now