10|¡Eso no pasó!

146K 9.1K 2.2K
                                    

Empiezo a removerme en la cama cuando siento como un rayo de luz da justo en mi lado izquierdo, sin embargo, no ha sido eso lo que me ha despertado primero. No, más bien, son distintos ¿ronquidos? Sí, son los ronquidos de, los que apostaría, son mis hermanos. Paso el dorso de mis manos sobre mis ojos, quitando las lagañas de ellos con un poco de pereza.

‹‹¿Cómo rayos llegué, o llegamos aquí?››, mi cabeza intenta trabajar. ‹‹O más bien, ¿dónde estamos?››.

Me sostengo de mis codos para tener una mejor visión de los individuos repartidos en la cama. Jason está a mi izquierda, con su antebrazo sobre sus ojos; yo debí hacer eso, así no estaría despierta ahora. James se encuentra boca abajo al otro lado y por último Jace, él está boca abajo; se encuentra acostado a lo ancho de la cama, sus pies saliendo de la orilla. La habitación está llena de claridad, pero de todos, era a mí a quien el sol debía saludar, regresándome a la realidad del día.

Me dejo caer en la cama, pensando qué rayos pasó anoche.

—Debo dejar de beber de esta manera —siseo para mí misma en un reproche.

Mi cabeza ya está empezando a doler, masajeo mis sienes con la yema de mis dedos. Es raro en mí salir de fiesta y mucho más beber hasta perder la consciencia, está no soy yo. Esa no parecía yo.

—Deja de moverte —reclaman a mi lado de forma soñolienta.

—¿Dónde estamos? —hasta ahora no he logrado saber. Por más que busque en mi cabeza asemejar mi alrededor a algo, no lo logro, pues estoy casi segura que es mi primera vez aquí.

—En una habitación —musita de lo más obvio Jace con su voz un poco ronca, al igual que su pequeña risa.

—Eso ya lo sé, estúpido —le doy un pequeño empujón con el pie—. Me refiero en qué lugar.

—En casa de Alex —responde con voz dormilona Jason seguido de un largo bostezo.

—¿El capitán? —no entiendo por qué seguimos aquí—. Eso quiere decir, ¿qué en ningún momento regresamos a casa?

—Todos estábamos pasados de tragos —James se da la vuelta, dejando ver su cabello oscuro hecho todo un desastre.

Oh, no. Lo más seguro es que mamá se enfadará mucho con todos nosotros y probablemente no nos deje salir en unas semanas.

—En especial tú —dicen los tres al unísono y abro los ojos en sorpresa.

Bueno, tal vez se enfadarían más conmigo, se supone que soy la más responsable de todos. Incluso más que Jason y eso que es el mayor.

—¿Yo? —inquiero con la voz un poco atropellada, sin creérmelo. Frunzo el ceño intentando recordar, pero sin ningún resultado, haciendo que mi cabeza duela más.

Los tres chicos asienten, sus ojos aun cerrados. La verdad es que me recuerdan a cuando eran pequeños y se veían tiernos después de sus siestas. Siempre solían ser muy dormilones y...

—Y fue increíble todo lo que hiciste con Harris —ríe Jace, colocando su mentón en sus antebrazos y buscando mis ojos.

Mis pensamientos aleatorios se cortan cuando escucho esa oración. ¿Que yo hice qué?

—Perdón, ¿con quién? —me siento de golpe. Creo que el alcohol me jodió la audición o algo por el estilo.

—Escuchaste bien, no te hagas, enana —Jason tiene un tono cansado mientras veo su ceño fruncirse.

—Princesa, intentaste hablar con él y de la nada, bum, estabas encima de él casi tragándotelo —el tono de diversión de James menos me alivia.

Empiezo a sentir una rara presión en el pecho que junto con el dolor de cabeza creciente me hace sentir peor de lo que ya estaba. Joder. ‹‹Tráiganme una presión que se me bajó la Coca-Cola››. No, espera, así no era.

El deportista y ¿la nerd? [PI #1] ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora