OPERATION: Decode | JinNam {Binary Code #2}

Información Clasificada #1

—Pues lo entiendo, pero Namjoon solicitó que protegiéramos a Taehyung y bueno, quiero conocerlo.

Eso cambiaba las cosas, y aunque quizás Taehyung no tenía el mejor juicio de todos en el grupo, solo escuchando la voz del agente supo que no estaba mintiendo. Si de verdad quería protegerlo o no era debatible, pero cuando mencionó a su hermano supo que estaba siendo sincero. En contra de lo que sus hyungs hubieran querido, Taehyung se puso de pie y salió de su escondite, cargando su oxígeno como si fuera un escudo.

El hombre se fijó en él al instante y los otros dos le lanzaron miradas reprobatorias, evidentemente no contentos con lo que estaba haciendo. Bajaron las pistolas, pero parecían preparados para usarlas en cualquier momento.

—Yo soy Taehyung —dijo más como confirmación que presentación—. ¿Quería hablar conmigo?

—No exactamente, solo quería ver por qué Namjoon estaba tan determinado en que te protegiéramos —respondió extendiéndole una mano como buscando estrechársela. Tae lo hizo—. Tu hermano mayor se esforzó bastante en esconder cualquier información sobre ti, así que quería ver con mis propios ojos al famoso Taehyung.

—Pues aquí me tiene, no soy la gran cosa.

—Tae-

Yoongi evidentemente no estaba de acuerdo con eso, pero no quiso decir nada más frente al agente. Las cosas privadas para después.

—Creo que en eso te equivocas, chico. Mira cómo te protegen todos para no ser la gran cosa —señaló sonriendo quizás enternecido—. ¿Y tu enfermero? A él también nos pidió que protejamos.

—Debería estar volviendo del trabajo pronto —respondió Tae sin poder evitar lanzar una mirada sobre su hombro, hacia la entrada—. Está un poco retrasado.

—Ya veo. Como sea, solo quería comunicarles que tendremos agentes vigilando el perímetro, todo para la protección de Taehyung —como si no estuviera bajo amenaza de pistolas, Daeil se puso de pie—. Les daré mi número, por si necesitan alguna cosa. Sé que es difícil, pero pueden confiar en mí.

—Ajá —escupió Hoseok aceptando la tarjeta que les extendía.

Al final lo dejaron marchar como si nada y en la puerta, el hombre se cruzó con Jimin, a quien saludó con un asentimiento de cabeza y una sonrisa, para luego perderse por el elevador. Cuando la puerta se cerró, Jimin corrió a su encuentro y comenzó a revisarlo por todos lados en busca de cualquier herida o señal de dolor o malestar, cuando Taehyung estaba perfectamente bien.

Solo estaba un poco sorprendido.

—No puedo creer que hayan metido al tipo a la casa y hayan sacado las pistolas estando Taehyung en la sala, son unos irresponsables —declaró Jimin con tono potente. Cuando estaba enojado daba miedo, sin embargo sostenía el rostro de su novio con delicadeza y le plantaba besos entre cada pausa—. No seré un puto agente del gobierno pero puedo patearles el trasero, tarados.

—Jimin, no pasó nada —le tranquilizó Hoseok yendo a guardar el arma que llevaba. Yoongi no se movió, solo se cruzó de brazos.

—No pasó nada ahora, pero si se metían en un fuego cruzado y algo le pasaba a Tae, les juro por dios-

—Estoy bien, Jimin-ah.

Eso hizo que el más bajo se detuviera en su rabia. Pareció solo entonces darse cuenta del escándalo que estaba haciendo, pues tomó mucho aire para intentar calmarse y luego, ya más relajado, apretujó a Taehyung contra su cuerpo, obligándolo a posar la cabeza en su hombro.

—¿Me prometes que estás bien?

—Lo prometo. No te preocupes tanto. Ese hombre va a protegernos.

—¿Ah, sí? Deja me preparo un té y me cuentan qué pasó.

Media hora después todo finalmente se calmó, hasta el ambiente, aunque Yoongi permaneció junto a la computadora para asegurarse de que nadie más aparecía en las cámaras; solo vio a los vecinos, gente con la que se venía cruzando a menudo por meses ya, así que parecía que realmente la paz había regresado.

Tras poner a Jimin al tanto, fue muy difícil separarlo de Taehyung por el resto del día; literalmente estuvo abrazado a él como un koala y aunque a otros podría haber abrumado, Taehyung estaba en su salsa, contento por toda la atención y los besos que su enfermero le daba, mientras que los otros dos tuvieron que refugiarse en la cocina para no empalagarse de tanto amor.

El almuerzo se retrasó por lo ocurrido, pero pudieron finalmente comer los cuatro juntos en silencio.

Una vez Jimin y Taehyung desaparecieron a la habitación del último a hacer quién sabe qué cosa, Hoseok se recostó contra su hombro y tomó su mano, entrelazando sus dedos largos con los suyos. Estaban parados en la cocina, reclinados contra la mesada y estando así, juntos, realmente se podía sentir que todo estaba bien finalmente.

—¿Tú le crees, Yoongi? ¿Crees que de verdad quiere proteger a Taehyung?

Yoongi se lo pensó por un instante.

—Pues te hubiera dicho que no, pero la forma en la que habló con Taehyung me hizo cambiar de idea —admitió el mayor apoyando la mejilla en la coronilla de Hoseok—. Había algo en su tono que terminó por convencerme.

—Si tú le crees, yo igual —sentenció sonando divertido. Para Hoseok todo parecía ser emocionante, de alguna forma. Yoongi no pudo evitar sonreír, nadie confiaba en el detector de mentiras de Yoongi más que Hoseok—. Pero supongo que aún así no quieres que bajemos la guardia, ¿No?

—Me conoces muy bien, Seokie.

—Llevo soportando tu trasero amargado desde los quince años, creo que es natural.

—Llevamos diez años juntos, ¿No es eso una especie de récord? —inquirió Yoongi sintiéndose repentinamente avergonzado. No se había dado cuenta de todo el tiempo que había pasado ya.

—Supongo que sí, aunque tienes que restarle al menos un año entre todos los problemas que tuvimos —recordó Hoseok ahora pareciendo nostálgico. Luego golpeó al mayor en las costillas con el codo—. ¿Dónde está mi puto anillo, Miau?

Resopló y rodó los ojos. Odiaba que lo llamara Miau, pero al mismo tiempo le parecía la cosa más tierna del mundo y no encontraba en sí mismo la fuerza para pedirle que parara, porque a fin de cuentas en cierto modo le gustaba. Quizás se estaba volviendo masoquista sin siquiera notarlo.

—Te compraré uno cuando quieras, pero no pienso ir solo a la joyería.

—Es una cita, ahora solo tienes que pedirle permiso a mi hermana.

Yoongi se removió para que Hoseok levantara la cabeza de su hombro y lo mirara a la cara. La sonrisa traviesa del mayor hizo que Jung palideciera un poco, como si estuviera en presencia de un fantasma.

—Yoongi, no me digas qué-

—Sí, de hecho ya lo hice —asintió entre risas—. ¿Te casas conmigo o no, Jung Hoseok?

Btw no soy precisamente partidario de que las parejas necesiten casarse para ser felices o algo así, pero creo que para Yoongi y Hoseok era casi lógico? Por cómo llevan su relación y todo eso. En fin, nos vemos en el siguiente~