— Tengo miedo Jun.— estaban por dar un concierto, pero JungKook no se había aprendido bien la coreografía y tenía miedo de que halgo saliera mal.
— Bebé, todo va estar bien. Si te equivocas sabes que las ARMYs lo van a entender, no todo sale perfecto.— JungKook hizo un puchero, a lo que con tus brazos lo abrazaste haciendo que apoyara su cabeza en tu pecho. — Te amo demasiado JungKook, si fallas en algo yo siempre voy a estar para arreglarlo.
Él flexiono sus rodillas para estar a tu altura, y con sus brazos te abrazó desde la cintura. Diste un besito en su coronilla para luego atraer su rostro al tuyo y darle un beso en sus labios.
— Yo también te amo, jagi.— se miraron a los ojos, apreciando el cariño que se tenían, hasta que uno de los chicos llamó a JungKook para ir al escenario.
— Suerte.— levantaste tus pulgares a lo que respondió con un guiño.
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(...)
El concierto había terminado y todo había salido perfecto, había recordado todos los paso y por ello estaba feliz. Todavía estaba allá arriba, saludando a las fans pero quería irse de allí para ir a abrazarte.
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Y por fin lo hizo. Apenas te vió en el camerino corrió a envolverte en sus brazos y a alzarte en su cintura.
— Te lo dije, confío en tí.— la sonrisa de sus labios se agrandó aún más.
— Lo sé y gracias por hacerlo. Te amo.
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