Capítulo 13

1.7K 189 48
                                    

Sadie:

Ya teníamos el agua tibia lista. Finn fue a la cocina para traer una coquita para hecharle el agua, yo estaba alistando todos los productos y también fui a entregarle el pastel a mi hermana, Millie... Ella... Ella estaba hablando con Boo sobre el baño.

-Tranquila pequeña, solo vas a sentir un poco de frío. Pero es por una buena causa, así no vas a oler a popis y si no hueles a popis, vas a atraer a muchos perros más.

-¿por qué le dices eso?.

-no lo sé, solo quería hacerla sentir bien-Finn rodó los ojos, debo admitir que Millie a veces se pasa.

La conozco hace muy poco tiempo y ya puedo decir que está loca.

-Listo Millie, el agua esta en su punto. Mete a Boo en la bañera-dije, mientras me secaba las manos con una toalla.

-no entiendo porque te secas las manos, si ahorita te las vas a volver a mojar.

-¿Puedes dejarme ser feliz?.

-cuidado, Millie. No la vayas a romper-dijo Finn, ignorandome por completo.

-¿a romper?-pregúntamos las dos al mismo tiempo.

-¿Cómo así?-volví a preguntar.

-o sea que no la vaya a matar. A eso me refiero.

-pero romper es una palabra muy diferente a matar-dijo Millie, mientras intentaba meter a Boo en la bañera. Boo pataleaba en el aire y chillaba muy fuerte.

-por supuesto que no.

-por supuesto que si-hablé-te voy a explicar con un ejemplo: Yo puedo romper una olla ¡pero no la mato! ¿Entiendes?.

-lo que dijiste fue algo bastante estúpido. ¿Te diste cuenta?.

-no fue más estúpido que lo que dijiste tu.

-si lo fue.

-no lo fue.

-si

-no

-si

-no

-¡que si!

-¡que no!

-¡BUENO YA BASTA. ACTÚEN COMO PADRES RESPONSABLES Y AYÚDENME A BAÑAR A ESTE DEMONIO!... Perdón, me exalté un poquito.

-no nos dimos cuenta. A ver, Finn pasame el jabón. Le voy a ayudar a Millie.

Finn me paso el jabón, pero no el jabón que yo quería. Y yo, ni cuenta.

-que rico huele ese jabón, creo que hasta huele mejor que el mío.

-si, huele muy rico este jab... ¡Finn! ¡Maldito estúpido!.

-¿y ahora que hice?.

-¡este es mi jabón. El Mío . M-í-o. No el de Boo!-Millie y Finn estallaron en risas.

Recogí un poco de agua en la coquita y se lo heche en los hermosos rizitos de Finn.

-te vas a arrepentir, pequeña.

-Mira como me tiemblan las piernas -moví mis piernas-me das tanto miedo...

De la nada, me sentí en el aire: Finn me había cargado como costal de papas. Empezó a dar vueltas como loco.

-¡bajame, Finn! ¡Me estoy mareando!.

Después de tanto rogarle, me bajó. Empecé a caminar de un lado a otro, todo me daba vueltas.

-ustedes harían una hermosa pareja-Millie ya estaba enjuagando a la perrita. No pensé que iba a ser tan fácil para ella bañarla.

-siii, claaro.

Finn y yo ¿pareja?

(...)

Desperté porque sentía frío en mi espalda, me removí un poco en la cama y me dí cuenta de que Millie tenia mucho más de la mitad de mis mantas sobre su cuerpo. No sé que hacer, ¿qué hago? ¿La despierto? No, eso no es de muy buen gusto. Vamos Sadie, ¡piensa!.

Empecé a tirar de las mantas una por una, de una manera muy suave. Ya estaba logrando obtener un poco más de manta para mi, pero... Mi adorada amiga Millie volvió a enrollarse en las mantas, haciendo que todos mis suaves movimientos hayan sido en vano. No me rendí, nunca lo hago. Así que, volví a tomar una esquina de una de las mantas y volví a tirar de ella, después de tanto esfuerzo, logré que por lo menos una manta me cubriese por completo.

Me estaba acomodando para volver a dormir, pero... Ahí va Millie, de nuevo. Apreté mis labios y volví a tirar de las mantas, esta vez de una manera muy bruzca, pero al igual que las veces anteriores, Millie volvió a dejarme sin nada.

-¡maldita sea, Millie!, ¡Son Mis Mantas!-tiré con mi mayor fuerza posible, Millie salio volando (no literalmente) se que tuvo un golpe suave, ya que sentí el quejido de Finn.

-¡claro Sadie, tirame toda la basura a mi!-no hice caso, me volví a acomodar en la cama y me tape bien con mis mantas.

-Sadie por favor, no quiero dormir con este idiota...

-te escuché.

-empaqué una manta en mi maleta, si la traigo, ¿me dejas dormir contigo?

-esta bien, Millie, si traes tu Manta, podrás dormir conmigo.

-¡Gracias Sadie, eres la mejor!-sentí que dejó un beso en mi mejilla, y se dirigió a la silla en donde había dejado su bolso.

Se acostó a mi lado, y se quedó profundamente dormida. Ahora, me toca a mi.

Amigos. (Fadie) #1 ✔ Where stories live. Discover now