Capítulo 36.

1K 78 5
                                    




(Narra Hamdan)

Hoy era un día medianamente tranquilo. Estaba sentado en el sofá revisando mi agenda junto con el tío Saeed, cuando mi teléfono vibró.

-Tenemos que terminar esto Hamdan, luego podrás revisar tu móvil- Dijo Saeed algo cansado.

-¿Y si es importante?- Dije intentando buscar excusas para desconectar.

Y tan importante fue, cuando ví que Irina me había respondido con un mensaje un tanto peculiar. No pude evitar escapar una pequeña risa.

-Ui ui, yo también me quiero reir- Dijo Seed intentando ver qué me había causado tanta gracia, a lo que yo instintivamente retrocedí.- No puede ser que ahora no quieras compartir las cosas conmigo, sabes que yo no le digo nada a nadie.

-Es algo... delicado-Respondí guardando el móvil e intentando volver al asunto de mi agenda.

-A mí no me mientas Hamdan. ¿Es esa chica?- Dijo Saeed con picardía en la mirada.

A veces me asustaba la manera en la que me podía conocer este hombrecito. Puedo confiar de verdad en él, y siempre que he tenido algún problema ha estado a mi lado. Pero, ¿Cómo reaccionaría al saber que mi padre ha accedido al matrimonio entre ella y yo?

-Pues... es maja. -No quería decirlo mucho más, a ver como reaccionaba.

-¿Tu padre sabe sobre el tema? Me refiero, ¿Sabe que te has visto con ella no?-

Si supiera lo otro seguro que le daba un ataque.

-No quiero hacerte el lío ni ocultarte nada tío, así que voy a ser directo.- Dije resoplando.-Mi padre me ha dado permiso para casarme con ella.

La piel de Saeed se puso blanca, sus ojos se agrandaron y la sorpresa hizo que diera un gritito. Me esperaba eso en él, porque dado que el sabe sobre mi relación o mejor dicho, mi cero relación con las mujeres, eso le iba a chocar bastante.

Lo miré a los ojos esperando respuesta.

-Vaya... no me esperaba eso la verdad. Aunque si que te he visto actuar diferente, nunca hubiera pensado que era por una mujer.- Dijo Saeed colocándose la khandura.

-Es algo loco, ya sabes... es una chica occidental... pero mi padre es sabio, y seguro que lo dijo por algo.

-Solamente espero que sepas lo que haces. Es más que obvio que tienes edad para casarte, e incluso deberías haberlo hecho antes.- Dijo Saeed resoplando.

-Sabes bien que eso no ha dependido de mí. Yo he estado enamorado, e incluso aunque te escandalice a veces... he llegado a dudar de mi propia sexualidad- Dije riendo para intentar quitarle tensión al asunto.

-Si de verdad te gusta esa chica, adelante, tienes mi apoyo. Y si tu padre ha dado el visto bueno, es porque Alá así lo quiere.

Sabía que podía contar con Saeed, siempre lo he hecho. Ahora mi concentración estaba en torno a Irina, ¿Cómo conquistarla?

----------------------

(Narra Irina)

-¿Qué quieres de cenar?- Dijo Mohammed mientras tiraba la mochila en el sofá.

Al fin habíamos terminado de grabar, y la verdad es que estaba muy agotada.

-No te preocupes, si quieres hago yo la cena, vete a duchar, que estás muy cansado- Dije viendo a Mohammed sudoroso. Se veía increíble. No sé cuantas veces lo he dicho, pero no me cansaré. Es muy atractivo.

-Creo que estaban Bin Garshub, Hamdan y Hashoom por Dubai Mall, puedo decirles que se acerquen y que de paso traigan la cena-

-Me parece una genial idea.

Fui a mi habitación y me duché. Yo también estaba asquerosa después de un largo día trabajando. Al salir vi mi móvil vibrar.

Llamada perdida de Hamdan. Mierda.

¿Qué debía hacer? ¿Le devuelvo la llamada? ¿Volvería a llamar él? ¿Sería por lo del mensaje?

Empezó otra vez a vibrar. No había elección, lo cogería.

-¿Si?- Dije con miedo. Si. Miedo.

-Hola Irina, espero no molestarte, ¿Cómo te fue el día?- Su voz era adorable y ronca, pero adorable.

-Hola Hamdan, tranquilo, ya estoy en casa. La verdad es que muy bien, pero cansado, ¿Tú que tal estás?

-También cansado, acabo de terminar de cenar y me he acordado de ti por el mensaje que me enviaste.

Oh mierda, ese mensaje no por favor.

-Ya... yo cenaré ahora, vienen unos amigos de Mohammed a cenar.

-Ah bueno, si quieres hablamos en otro momento.

No, por favor, no te vayas. En el fondo quería seguir hablando con él. Me gustaba.

-No tranquilo, estoy en mi habitación, tardarán en llegar.- Dije restándole importancia para no dejar de hablar con él.

-Vale, vale... Me preguntaba si quieres salir un día a dar una vuelta o algo, o si quieres venir a los establos, las puertas están abiertas para ti siempre que quieras.

-Sería fantástico la verdad, me lo pasé genial. ¿Cómo está el pequeño Mohammed?

-Muy bien, haciendo de las suyas como siempre.

Toc toc.

-Irina, me llama Mohammed para que bajes, ya está la cena- Dijo Bin Garshub apareciendo por la puerta en chándal y sin peinar, parecía que se acababa de pelear con un gato.

-Esto... si quieres te llamo en otro momento Irina- Dijo Hamdan.

-Vale... adiós Hamdan. Buenas noches- En realidad hubiera seguido hablando con él toda la noche.

-¿Con que Jeque Hamdan eh pillina?- Me dijo Bin sentado en mi cama y levantando las cejas.

Me encantaba la confianza que cogían desde tan rápido.

-Si bueno... es una larga historia-

-Tranquila que tendrás tiempo para contárnosla- Dijo Bin mientras se levantaba y me cogía del brazo, saliendo de la habitación.

Piezas de puzzle (Fazza)Where stories live. Discover now