Capítulo 22

1.2K 88 6
                                    







Kilos de comida con un aspecto buenísimo apareció ante mis ojos en una gran mesa de mármol. Supongo que todo aquí es a lo grande.

-Y bien Irina, por tu nombre y tu aspecto físico, deduzco que no eres 100% española, ¿O me equivoco? - Me preguntó Sheikh Mohammed mientras llevaba a su boca un trozo de pescado.

-Nací en Rusia, pero he vivido toda mi vida en España, ¿Por qué lo pregunta?

He de añadir que todo esto bajo la atenta mirada de Hamdan, que estaba pendiente a todas las preguntas que su padre me hacía.

-Porque tienes rasgos de esos países, rubia de ojos claros, piel blanca, no sé, tienes el aspecto de esos sitios. Es curioso.

-Interesante...- Dijo Hamdan de manera inaudible, pero que yo logré oír ya que lo tenía justo enfrente.

-¿Qué más haces aparte de ser actriz?- Me preguntó Sheikh Mohammed.

-Pues ser actriz es nuevo para mí, he grabado videoclips pero nunca hecho una película, entonces es emocionante. También soy modelo, cantante y bailarina

-Woah, eres muchas cosas, ¿Y cómo repartes el tiempo para hacer todas esas cosas?- Preguntó un hombre pequeño que estaba al lado de Hamdan.

-Por si no te lo hemos presentado- Habló Sheikh Mohammed- Él es Saeed.

-Uncle Saeed- Rectificó Hamdan abrazando al pequeño hombre de aspecto amable- Es mi tío.

-Un placer- Respondí.- Y en cuanto a tu pregunta, tengo gente que me ayuda a organizarme y a llevar mi apretada agenda.

La comida fue interesante. Hasta que salió la famosa pregunta: "¿Qué hace una chica tan famosa como tú en su tiempo libre?" Pregunta que me hizo Hamdan, pude detectar, ¿Con cierta picardía?

-Suelo quedar con mis amigos cercanos, pasar tiempo con mi familia y animales, y sobre todo una de las cosas que más me relaja es montar a caballo. -Respondí mientras mantenía la atención de todos los que en la mesa estaban.

Creo que Hamdan me escuchaba mientras comía, y casi se atraganta. Analicé cierto brillo en sus ojos al escuchar "Montar a caballo".

-Aquí en Emiratos la equitación es un arte. Toda mi familia somos apasionados de los caballos, lo llevamos en la sangre- Respondió Sheikh Mohammed.

La comida continuó muy bien, con conversaciones más fluidas. Poco a poco iba cogiendo confianza.

La diferencia cultural es enorme. Pero esta gente es realmente amable y hace que me sienta cómoda.

Ya habíamos terminado y poco a poco iba saludando a la gente, como la mesa era tan grande no había visto la cara ni a la mitad de hombres que allí estaban.

Necesitaba ir al baño, un baño más grande que mi habitación. Con Jacuzzi, sala de masajes y una pequeña terraza.

Al salir choqué de bruces con...

-¡Aquí estás! Te he estado buscando para hablar

-Perdone su... su majestad.

-Por favor, llámame Hamdan, a secas.- Me respondió con una sonrisa sincera.

Por unos segundos nos quedamos viendo a los ojos, sus ojos avellana y grandes me llamaron la atención desde el primer momento.

-Esto... decía que como ahora no empezáis a grabar, te invito un día a mis establos. No muy lejos de aquí. Me gustaría conocer un poco más de cerca tu afición a la equitación, si no te molesta.

-Por supuesto que no, estaré encantada de visitarlo.

-Genial, ten esta tarjeta, pone la fecha y la hora, aunque puedes venir incluso antes si quieres, también tiene mi firma y el sello oficial para que te dejen entrar. Hay muchos curiosos que se intentan colar, y tuve que tomar medidas.

-¡Muchas gracias! Será un placer. Hay gente demasiado curiosa por ahí la verdad.

-Bueno, encantado de hablar contigo Irina. Espero verte en los establos pronto.- Dijo mientras me tendía la mano.

El apretón se alargó más de lo normal, por alguna extraña razón ninguno de los dos parecía querer separar este pequeño momento.

Piezas de puzzle (Fazza)Where stories live. Discover now