Capítulo 29. Defensas debilitadas.

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Capítulo 29. Defensas debilitadas

-En serio todavía no puedo creer lo que Jace te dijo.

Zoy estaba sentada sobre un banquito frente a su enorme tocador color blanco con luces por todo el contorno como esos espejos que tienen los actores antes de salir a escena donde los maquillan y los hacen lucir radiantes, iluminaba todo su rostro mientras ella se colocaba una mascarilla en su rostro.

-Yo no estaría tan segura- dijo Emma- Creo que él está en todo su derecho de enojarse.

Emma en cambio estaba recostada sobre la cama, recargada sobre un montón de almohadas con una rodaja de pepino en cada ojo y una mascarilla en su rostro, ambas chicas estaban en bata con una toalla cubriendo su cabello.

-¡¿CÓMO DEMONIOS PUEDES DECIR ESO EMMA?! ¡¿DE QUE LADO ESTÁS?!

-En primer lugar, no me grites, ¿de acuerdo?- dijo la chica mientras movía un dedo en el aire debido a que no podía ver a su amiga-  Estoy en medio de un tratamiento relajante anti- estrés en estos momentos, estas cremas me costaron una fortuna y en segundo, piensa por un segundo Zoy, ¿tú no te enojarías si de repente un chico viene y se mete en tus asuntos más personales?

-¡Eso no tiene nada que ver! Jace no debió haber reaccionado así con Cara, es decir, mírala ahora, está irreconocible.

Emma se quito las rodajas de pepinillos por un momento para verla, se encontraba en el suelo en posición fetal, la mascarilla en su rostro se había esparcido por toda la alfombra de la habitación de Zoy, solo miraba al suelo mientras abrazaba un cojín, estaba hecha un desastre.

-Creo que tu idea de hacer una sesión relajante entre chicas no fue muy efectiva Em.

-¡Solo trato de animar a Cara!- Emma le dio un mordisco a uno de los pepinillos que tenía en su mano al mismo tiempo que miraba a su amiga Zoy- nunca la había visto así, en la escuela finge que todo está muy bien y disimula a la perfección que no le importa pero después de eso…

-Parece un zombie viviente que solo quiere dormir y comer y que no quiere saber nada de la vida, eso se llama mal de amores Emma y lo sabrían si tuvieran un poco más de experiencia con ellos.

La chica miró con picardía a Zoy.

-¿Así como tú?

Su amiga le lanzó un cojín causando que la mitad de la mascarilla que tenía la pelirroja sobre su rostro se embarrara en este, Emma hizo una mueca.

-Está deprimida.

-Eso ya lo sé Zoy, es obvio que está deprimida por lo que paso con Jace.

-Si Señorita sabelotodo pero esto no puede seguir así, lleva así dos semanas, a este paso se convertirá en una mujer obesa amante de los video juegos que solo vive para comer, ya hicimos de todo para animarla y ver a Jace todos los días no la ayuda en lo absoluto.

Zoy tomó con ella la costosa crema traída desde un país europeo, y se fue a sentar a un lado de su amiga Emma, tomó un poco y comenzó a aplicarle crema en la parte del rostro que había sido atacado por el cojín que previamente ella le lanzó.

Emma la miraba con los ojos entre cerrados.

-Lo peor de todo es que ni siquiera he podido hablar con Evan-dijo la chica con un poco de tristeza en sus ojos- desde lo que sucedió entre Jace y Cara, no me habla.

Zoy dio un suspiro.

-Me pasa lo mismo con Kyle.

La morena termino de aplicarle la crema en el rostro a su amiga, puso la crema a un lado y se levantó para ir a donde estaba Cara, le dió una especia de señal a Emma, esta, la capto de inmediato y se puso de pie también, corrió hacia donde estaban las demás y tomó los pies del zombie que ahora tenía por amiga, al mismo tiempo que Zoy tomaba las muñecas de esta. La cargaron entre las dos hasta acostarla en la cama, boca arriba. Emma comenzó a limarle las uñas y Zoy a aplicarle la mascarilla de nuevo.

¡Si quieres paz, prepárate para la guerra!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora