Manada

Capítulo 32

Capítulo 32

"-Papá?"

Micah miró al hombre frente a él. Sus ojos, su voz... su olor. Era su padre. La persona que caminó a su lado durante tantos años y acabó muriendo por su culpa.

Había tantas cosas que quería decirle que las palabras se amontonaban unas sobre otras negándose a salir.

"-He venido a buscarte Micah." -la voz de su padre seguía sonando tan autoritaria como recordaba. Después de tantos años había aprendido a reconocer el cariño tras ese duro tono. Su padre nunca fue una persona amable, no hacía falta. Siempre estuvo ahí para él. Todos esos largos días buscando un lugar al que nunca llegaban, las frías noches en las que se dormía arropado por el calor de su lobo, las duras lecciones que le enseñaba, las historias que le explicaba... todos sus recuerdos estaban llenos de él.

"-Estoy... muerto? -si alguien tenía que venir a recoger su alma para llevarla al otro lado, sin duda ese sería su padre.

"-Sí" -Micah cerró los ojos, así que eso es lo que había pasado. Su corazón se sentía pesado. Pensaba que estaba preparado para dar su vida a cambio de la de las personas que le importaban... pero la verdad es que no lo estaba. Sentía que de nuevo lo había perdido todo y una vez más la vida se reía de él. La mano cálida de su padre acarició su mejilla.

"-No estoy aquí para llevarte conmigo, hijo. Estoy aquí para escuchar tu decisión." -Micah abrió los ojos y se topó con la mirada sincera de su padre.

"-Qué... decisión?"

"-Puedes venir conmigo y descansar o puedes regresar junto a tu Alpha"-Micah sintió la esperanza crecer en su interior, si tenía la posibilidad de regresar, él quería hacerlo. Quiso decírselo a su padre, gritar su respuesta alta y clara... pero no consiguió sacar ni una sola palabra de su garganta. Frunció el ceño... estaba confundido, él quería regresar... junto a su manada, junto a Alek.

Pero Alek merecía a alguien mejor a su lado. Una bonita compañera con la que formar una familia y que pudiera darle un hijo algún día... nada bueno saldría de estar enlazado a un débil hombre omega. "Puedes descansar ahora". Era cierto... él estaba agotado, cansado de no ser el adecuado, de huir y tener que esconderse, de caer y levantarse mil veces... Miró a su padre.

"-Te echo de menos papá..." -la tristeza le golpeó y ya no pudo contener más sus palabras.

"-Por mi culpa lo perdiste todo... tu familia, tu hogar, tu lugar en la manada... incluso acabaste perdiendo tu vida..." -esa era la pesada verdad que lo agotaba a cada paso del camino.

"-Micah, yo no perdí nada que no estuviera dispuesto a dar por ti. Estaba enfermo al final, mi tiempo se acababa, no tengo más arrepentimiento que el de no haber pasado más tiempo junto a ti" -las lágrimas que Micah estaba esforzándose en contener se desbordaron sin remedio.

"-Como puedes decir eso... te mataron... y no fui capaz de hacer nada... lo siento... si yo no fuera un omega... si hubiera nacido como beta o incluso como gamma... entonces no tendrías que haber sacrificado tu vida por mi... siento haber sido una decepción..." -su cuerpo temblaba, incapaz de contener el dolor de esa vieja herida en su alma. Los fuertes brazos de su padre le envolvieron. Su olor le cubrió calmando la ansiedad que no le dejaba respirar.

"-Micah, tú nunca me decepcionaste. Tu madre, tus hermanos, todos los que te juzgaron y menospreciaron por ser omega son los que lo hicieron. El día que presentaste, me sentí orgulloso de ti... y por aquel entonces ni siquiera había comenzado a entender lo especial que eres"

"-Estabas... orgulloso de mi?" -oírle decir esas palabras aligeró la pesada carga que llevaba y sintió que por primera vez, la herida de su alma empezaba a sanar.