–Esta afuera no se a movido ni un segundo de aqui al igual que tus amigos y tu padre –dijo mi madre

–Y porque no han entrado a verme? –dije

–Si han entrado a verte solo que desde que te pusieron el calmante no habías querido despertar hasta ahora.

–Cuanto tiempo dormí ma?

–Un dia entero hija –dijo sonriendo.

–Vaya si fue mucho –dije ligeramente soreprendida

–Quieres que entren tu padre y tu hermano?

–si ma por favor –respondí

Mi madre salió y minutos después mi padre y mi hermano entraron muy nerviosos y al verme me sonrieron mas tranquilos

–Mi niña gracias a Dios estas bien hija –dijo abrazandome con cuidado –sentí que me iba a morir cuando me dijeron que alomejor no pasarías la noche.

–Tranquilo estoy bien ya todo pasó –dije con amargura recordando a Estela.

Mi padre se separó de mi y mi hermano me abrazó llorando con mucha angustia.

–Hermanita tenía tanto miedo de que me dejaras solo, ya perdí a mi madre y no quería perderte a ti

–No hermano nunca te voy a dejar solo –dije llorando junto con el.

Cuando nos tranquilizamos un poco platicamos de muchas cosas entre ellas que mis antiguos amigos estaban en el hospital esperando su turno para pasar a verme, un buen rato despues salieron del cuarto no sin antes decirles que hicieran pasar a Yaz.

Estaba perdida en mis pensmientos la presión en mi pecho seguía y las ganas de llorar no se iban, entró Yaz ,la miré me abrazó y yo lloré nuevamente

–La perdí Yaz la perdí para siempre –dije con dificultad

–Ya tranquila Faby lo siento mucho amiga de verdad que lo siento –me consoló pero sus lagrimas no la dejaban hacerlo.

–Debí ser yo, ella no tenía porque morir por mi culpa. debí morirme yo –dije con coraje

–No vuelvas a decir eso por favor Fabiola.

–Si yo fui la culpable de todo Yaz. –dije tapando mi cara con mis manos –nos ibamos a casar maldita sea la amaba con todo mi corazón porque mierdas me pasa esto a mi. todos se alegran de que yo este viva cuando lo unico que quiero ahora es morirme

–Fabiola por favor no sigas diciendo eso, ya basta ­–dijo con enojo

–Yaz me la quitaron mierda mi Estela está muerta porque no pueden entender que ella era mi vida –dije llorando y gritando descontroladamente

En ese momento entraron asustados la mayoría de los que estaban afuera esperando, entre ellos Brenda. todos me miraban llorando y yo ya no podía controlar mi llanto en ese moemento lo que quería era morir.

–Salgan todos no pueden estar aqui al mismo tiempo –dijo el doctor entrando y sacando a todos.

–Fabiola hija tranquila por favor. –decía mi madre tomando mis manos..

–Señora tiene que tranquilizarla ya no quiero ponerle mas calmantes se va a ir en un dia trate de controlarla.

Mi madre se miraba desesperada al no saber que hacer para poder controlarme, se acomodó a un lado de mi y me rodeó con su brazo poco a poco me fui calmando al sentir su contacto. cuando me calmé completamente me aferré a ella y me quedé dormida.

Cuando desperté era de noche y mi madre no estaba a mi lado, mi mente repasaba cada recuerdo con Estela y eso hacía que el la presión en mi pecho aumentara y que las lagrimas no dejaran de salir, cuando mi madre regresó le pedí que se fuera a la casa a descansar ya que se notaba el cansancio en su rostro y aceptó no muy convencida.

A la mañana siguiente mi madre llegó y traía una maleta con ropa para mi eso queria decir solo una cosa por fin me largaria de aquí.

–El doctor vendrá en unos minutos y después de eso nos podremos ir –dijo seria.

–Es una buena noticia madre, será mejor que me comience a cambiar –me levanté con cuidado y mi madre me ayudo a vesitrme pero su rotstro de seriedad no cambiaba para nada.

–Pasa algo madre acaso te molesta que yo salga de aqui? –pregunté con tono de reproche

–No hija lo siento no es eso me da mucho gusto por fin llevarte conmigo a casa –guardó silencio un minuto –solo que hoy es el entierro de Estela.

Sentí una punzada en el pecho y mis piernas me fallaron. no dije nada mas y seguí cambiandome mientras las lagrimas corrían por mis mejillas. Rato después el doctor entró dandonos las indicaciones para poder seguir la recuperación en casa, le agradecí y salimos de ahí. Mi madre manejó en silencio rumbo al lugar donde le daría el ultimo adios al amor de mi vida. mi madre sabía lo mal que me encontraba y que necesitaba mi propio espacio.

Al llegar al lugar pude ver a las personas que estaban en ahí esperándonos. caminé despacio siempre al lado de mi madre, todos me miraban yo solo quería llegar a donde estaba mi Estela. cuando por fin llegué, ya mis lagrimas caían sin control sentía que en cualquier momento me iba a explotar el pecho de tanto dolor que sentía. la ceremonia comenzó y en un momento no aguanté mas y caí de rodillas viendo el lugar donde el amor de mi vida descansaría, mi madre intentó levantarme pero se lo impedí.

–Por que Estela porque lo hiciste mi amor –dije llorando con rabia. –yo debería estar ahí no tu, mi amor perdóname, fuiste lo mejor que me pasó en mi maldita vida Estela mi amor no se que voy a hacer sin ti te amo tanto perdóname por favor.

Sentí que alguien puso su mano en mi hombro y era Elisa junto a los chicos que me miraban con lagrimas en los ojos, se arrodillaron junto a mi y me abrazaron y lloramos juntos, después de un rato me ayudaron a ponerme de pie a la fuerza ya que no me quería separar de Estela o mas bien del lugar en el que ya descansaba. me obligaron a sentarme ya que había comenzado a sentir dolor en la herida, mi padre se acercó y como pude me puse de pie necesitaba sus abrazos. Cuando se separó de mi y se hizo a un lado vi a Brenda que se acercó, la miré fijamente me acerqué a ella la abracé y llore de nuevo sentía que este dolor no iba a acabar nunca

–Lo siento mucho Fabiola de verdad me duele tanto verte así –dijo llorando.

Al separarnos del abrazo la miré y caminé hacia el auto dejándola a ella y a todos atrás ya no tenía nada mas que hacer ahí.

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