Mi mascota; JJK (en edición)

Capítulo 17 - ¿Gustar?

Nunca mé había sentado a pensar sí me gustaba Jung Kook, sí, claramente sentía cosas por él pero, nunca había analizado estos sentimientos. Entonces, ¿Jung Kook me gustaba? ¿o sólo era qué me hacía sentir cosas y ya está? Tae Hyung también me ponía nerviosa y eso, pero... No sé si podemos comparar eso con lo que me hace sentir Jung Kook.

Joder, nuevamente me estaba volviendo loca. ¿Por qué tenía qué llegar éste chico a mí vida y colocar todo pies arriba?

—Buenos días ____. —era Jung Kook, el dueño de mí dolor de cabeza.

—Buenos días Jung Kook. —intenté actuar normal.

—¿Aún duermes con mí poleron? —preguntó de la nada y nuevamente entramos en ése estado de tension.

—No. —mentí, aún lo hacia.

—Tráemelo mañana. —ordenó, mirándome de reojo mientras dejaba las cosas en su pupitre.

¿Por qué? No quería dárselo, era tan cómodo, seguía oliendo bien, bueno, no tanto como antes. Su olor estaba desapareciendo poco a poco.

—Está bien.

Él sonrió y agitó mí cabello.

—Puedes quedártelo el tiempo que quieras, simplemente, quiero tenerlo un día para impregnarlo con mi olor otra vez. Debo de suponer que ya se ésta desvaneciendo.

No supe que contestar a eso, así que simplemente me dediqué a ordenar mi cabello con delicadeza.

—Mañana te lo daré. —fué lo único que pude decir.

En ese precisó momento entró el maestro dándole inicio a una jornada de clases.

***

—Chicos, tengo que ir al baño. —hablé repentinamente.

Estábamos andando por los pasillos todos juntos y pues, estábamos pasando por los baños. Ellos me miraron y todos asintieron.

—Te estaremos esperando aquí. —dijo Nam Joon.

Entonces, regalándole una sonrisa me adentre en el baño. Entré en uno de los baños y cerré la puerta, suspirando y fué allí cuando comencé a pensar miles de cosas referentes a mí vida escolar, en lo que sentía por Jung Kook y Tae Hyung, todo era muy confuso en mí cabeza.

Cuando me dispuse a salir, encontré un buen grupo de chicas, mirándome, con los brazos cruzados, entre ellas, estaban las chicas con las que había discutido la otra vez. Digamos, que eran unas díez. Las ignore y seguí con lo mío, cuando siento que una de ellas jala mi cabello, haciéndome retroceder.

La hice que me soltará y suspire, de seguro era otro sermón como siempre.

—¿Qué mierda quieres? —dije con tono de pocos amigos.

Todas ellas se miraron y rieron.

—¿No te cansas de andar de prostituta?

Reí, ya sabía a lo que iban.

—Vale, ¿y qué? ¿tú quieres mí puesto? —la miré de pies a cabeza, siguiéndole el juego—. Dudo que llegues a ser como yo.

Dicho esto, fuí al lava manos y lavé mis manos con mucha tranquilidad. Esto causo que se molestaran muchísimo y una se me acercó y intentó golpearme, entonces, me moví rápidamente, produciendo que su mano chocará contra el espejo y se rompiera.

—Aush. —me reí en su cara y mé fuí de allí como si nada.

Llegué rápidamente donde los chicos mientras el baño de mujeres era un espectáculo de gritos y personas llegando a él.

—¿Por qué demoraste tanto? Y, ¿qué sucedió allí adentro? —Ji Min habló, curioso.

—Digamos que unas zorras querían hacerme pasar un mal rato, y yo se los devolví.

—____, eres una bravucona. —murmuró Seok Jin.

Reí por lo bajo.

—Entonces es mejor que no se metan conmigo si no quieren que les rompa el trasero. —alce mis puño hacia ellos en modo de amenza.

Todos retrocedieron rápidamente y yo, me reí.