23: 𝑉𝑒𝑟𝑑𝑎𝑑𝑒𝑠 𝑜𝑐𝑢𝑙𝑡𝑎𝑠

Depuis le début
                                    

Spencer maneja la mayor parte de la política de los seres mágicos, él literalmente se encarga de las leyes y de todo el Mundo Invisible. Incluso de la seguridad del bosque. Quiere decir que tengo una prueba sumamente convincente a mi favor cuando presente cargos contra él.

"El jefe ya se ha retirado" dijeron ellos hace apenas unos minutos atrás. ¿Qué quiere decir eso? ¿Spencer ha renunciado a su cargo en el Consejo? ¿Ha escapado? Estoy segura de que sabe que yo sé de él. Sabe que lo he descubierto y tiene miedo de mí. Tiene miedo de lo que le pueda pasar y no está listo para enfrentar las consecuencias. Por eso mató a mis padres, por eso siempre huye. Mis padres sabían algo que a él le causaba problemas, sabía que Clarissa y Alex no podían convivir en el mismo lugar que él sabiendo lo que había hecho o dicho. Pero...¿qué fue tan grave para cometer asesinato?

—No podrás escapar—susurran en mi oído. Me volteo y una mano me toma del cuello levantándome del suelo. Los ojos amarillos de Amber me miran con malicia. Tomo su muñeca y trato de apartarla, pero mi cuerpo choca con la salvaguarda y una gran energía me advierte que, si Amber me suelta ahora mismo, terminaré impulsada hacia delante dando contra algún árbol a lo lejos—Me vengaré de ti. Todo estaba bien entre Demian y yo, todos éramos felices. Pero en cuanto te cruzaste en su camino en Nueva York, supe que serías un problema—toma la mano en donde poseo la Marca de Emparejamiento— ¿Sabías que la Marca se puede sacar?

Aprieta más mi garganta y abro los ojos tan grandes que incluso puede llegar a ver los puntos de colores que se van formando ante mí. Estoy perdiendo la conciencia.

—Amber, suéltala—ahora habla el chico.

—¿Sabes que la mayor condena para un Hombre Lobo es desterrarlo de su Marca? —ella prosigue y me sonríe. Intento patearla, pero mis piernas no se mueven. La energía en mi espalda vibra en todo mi cuerpo y ya no siento las fuerzas. En cualquier momento perderé. En cualquier momento se acabará todo y no podré salvar a Sam. No podré salvar a Demian, tampoco a Max y a Robert. No podré hacer nada—El hechicero quema la mano, allí donde la inicial de tu pareja se queda grabada en tu piel. Hace un corte profundo luego y te maldice. Te maldice para que pases tu vida sufriendo por la pérdida de la conexión. Y pasas la vida queriendo morir—sonríe una vez más—Dicen que, en los últimos momentos de vida, puedes escuchar a tu pareja sufriendo por tu dolor....

—Esto no ha sido parte del plan—continúa el chico. Viene hacia nosotras y en cuanto las ondas doradas lo iluminan, él me mira y yo no lo puedo creer.

Jasper me observa detenidamente. Su aspecto cambió: ojos amarillos tales de un hombre lobo y sus labios se abren para dejar a la vista unos colmillos filosos. Permanece parado allí, frente a nosotras, sin poder mirarme a la cara. Jamás creí que él pudiera estar implicado en todo esto. Pero sí, es un hombre lobo. Todo este tiempo ha sido igual a los demás y nunca dijo nada. Se mantuvo en secreto, en el anonimato hasta que llegara el momento indicado. ¿Cómo no me di cuenta antes? Demian me explicó que los hombres lobos sienten a otros y que pueden reconocerse entre ellos por el olor, pero eso nunca pasó con Jasper. ¿Acaso eso ha sido obra de Spencer y sus trucos sucios?

Todo comienza a tener sentido. Rebobino en el tiempo y siento las lágrimas caer por mis mejillas. El mensaje en mi pieza con el gato muerto. El accidente en la feria, al veneno que nos tiraron. Demian pensó que fueron los mismos Cazadores que se presentaron esa noche, pero no era así. Él sabe dónde vivía yo. Dejó ese mensaje para irradiar temor. Lo dejó allí porque trabaja con Spencer. Porque Spencer lo mandó en su lugar.

—Vaya, vaya—dice Amber—parece que el lobo te comió la lengua...

—¡Suéltame! —grito con las lágrimas a flote—¡Déjame ir, por favor!

✔ 𝐿𝑎 𝐻𝑖𝑗𝑎 𝑑𝑒 𝐶𝑎𝑝𝑒𝑟𝑢𝑐𝑖𝑡𝑎 𝑅𝑜𝑗𝑎 1» Eʟ DᴇsᴘᴇʀᴛᴀʀOù les histoires vivent. Découvrez maintenant