Encuentra tu destino en el corazón de un hombre lobo...
Lana Paterson vuelve a su pueblo natal, Fallstreet, con un solo objetivo en mente: descubrir la verdad detrás de la desaparición de sus padres...Sin embargo, los recuerdos de una vida pasada la...
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Capítulo 20 -𝑙𝑎𝑠 𝑚𝑒𝑛𝑡𝑖𝑟𝑎𝑠 𝑡𝑖𝑒𝑛𝑒𝑛 𝑝𝑎𝑡𝑎𝑠 𝑐𝑜𝑟𝑡𝑎𝑠-
La carpeta que posee Demian entre las manos no es llamativa ni mucho menos especial. Es solo un folio de color negro que contiene miles de hojas en su interior. El corazón me va a mil, de pronto mis manos comienzan a temblar y ya no sé si lo que estoy viendo es un espejismo o no. ¿Será posible? ¿Acaso estará allí toda la información que necesito para saber qué les ha pasado a mis padres en verdad?
—¿Es...mío? —dudo en preguntar. Demian me asiente con un leve movimiento de cabeza—¿Estás seguro?
Me la tiende.
—Estoy seguro—pero en cuanto intento tomar la carpeta, la retira—¿No crees que es mejor leer esto en casa? —pregunta luego—Ya sabes...alguien podría estar escuchando algo.
—Estamos aquí ahora. Eso es lo que importa. Seguramente este sea el lugar más seguro que existe en el planeta—yo avanzo hacia él. Demian se mantiene en el lugar cuando tomo la carpeta en mi mano—¿A qué le tienes miedo?
Lo duda un segundo. Entonces la suelta y yo por fin estoy aliviada. A nuestro alrededor no hay más que libros y carpetas y folios repletos de papeles con la vida de seres mágicos. Entre todo esto, he encontrado a mis padres. Bueno, no exactamente a ellos en carne y hueso, pero aquí por fin tengo la prueba de que algo malo les ocurrió. Le doy la espalda a Demian y caminamos hacia una de las mesas dispuestas a lo largo de la biblioteca. Me siento en una silla. Demian en frente de mí.
Las manos me tiemblan. La carpeta está allí en mitad de la mesa. Estoy sudando a mares. De pronto siento que todo lo que hice para llegar hasta aquí sí ha tenido sus resultados. De pronto compruebo que internarme en el mundo de mi madre era todo lo que necesitaba para encontrar las respuestas.
Estiro un brazo para abrir el expediente. Pero Demian me detiene.
—Espera—dice él—¿estás segura de esto?
—Sí. Aquí está la prueba que necesitaba. Si mis padres fueron asesinados, si encuentro al culpable en estas hojas, entonces...
—¿No crees que deberíamos ir con Spencer? —pregunta y algo extraño sucede. ¿Por qué Demian preguntaría por Spencer? —Es decir, él fue quien te dio la oportunidad. Si hay algo aquí en estas páginas que podamos usar, debería ser él el primero en saberlo, ¿no?
Suelto una risita.
—No—respondo—claro que no.
—Spencer debería saberlo.
—¿Qué estás diciendo? —pregunto yo y trato de tomar el expediente, pero Demian se levanta de la silla, ésta cae al suelo, y toma la carpeta por su cuenta—Demian, si Spencer sabe que estamos aquí...
