Tus ojos no me ven (malec)

Día 29 (final)

Muchas veces había tenido que aprender que la esperanza era una tontería, pero no podía evitarlo, tan imprudente como un niño junto al fuego que de niega obstinadamente a aprender de la experiencia. Quizá fuera diferente en esa ocasión; quizá ese amor fuera diferente. Lo sentía tan diferente... Sin duda eso tenía que significar algo. Quizá el año venidero sería un buen año para ambos. Quizá esta vez las cosas resultarían como Magnus quería que resultaran. Tal vez Alexander Lightwood no le rompiera el corazón.
(Las crónicas de Magnus Bane)

* * *

[Día 29 final]

POV ALEC

No era una invitación indecorosa.

No era una invitación en absoluto.

Y no estaba olvidando lo que acababa de suceder.

Sólo... Dios. Sólo quiero por un momento cerrar los ojos y olvidarme de todo, toda esta locura que Magnus ha traído a mi vida, toda la felicidad, y la luz que amenaza con vencer mis oscuridad y mis miedos.

Sólo...quiero reír y no darme cuenta que entre las gotas de lluvia se ha colado alguna lágrima.

<<Alexander...>>

<<Eres hermoso...>>

Las palabras de Magnus taladran en mi mente mientras yo dejo que la lluvia caiga en mi rostro, que escurra sobre mí y se lleve mis miedos, mis dudas, mis inseguridades, que se lleve el dolor y la culpa que me impiden seguir y dar el paso que me falta para ser feliz...

...y que no puedo dar. No aún.

De repente siento una mano que, incluso con esta lluvia helada sobre nosotros, se siente cálida, calienta y electrifica ahí donde toca.

Recuerdo sus palabras:

<<Eso no es un beso, Alexander. Cuando te bese, vas a sentir el universo explotando dentro de ti, desgarrándote por dentro, cada célula tuya revolucionando...>>

Y eso hace. Magnus revoluciona mi interior completamente, vuelve loca cada partícula de mi ser. Pero no sólo con besos, con cada toque, cada caricia, cada roce aunque sea involuntario, su respiración, su olor, su sola presencia lo cambia todo...para mejor.

Y ese es el problema ahora. Él está trayendo sólo cosas buenas -aunque confusas- a mi vida, y yo no puedo regresárselas.

No puedo más que darme entre mis sombras.

Su mano me atrae hacia él, su cadera choca contra la mía, su cuerpo mojado se pega al mío, y no hay connotación sexual alguna, sólo se siente...correcto, cuando él empieza a mecernos de un lado a otro. Es suave. No estamos bailando. Sólo nos movemos juntos, lento, nuestros cuerpos juntos calientes, latidos tranquilos y, a la vez, acelerados, mientras la lluvia fría nos envuelve.

Te quiero.

Las palabras incorrectas quisieran salir.

POV MAGNUS

Él me deja abrazarlo a mí, atraerlo con mis manos, moverlo a mi ritmo. Sus labios entreabiertos, sus ojos siguen cerrados, su rostro lentamente se vuelve hacia mí, gotas escurriendo por esa piel pálida, sus pestañas pegadas a ella.

Es hermoso.

Es hermoso y mío, y no puedo dejarlo ir.

Me acerco a él, sin dejar de movernos. Las calles desiertas. Sólo un par de locos se mantendrían bajo la lluvia. O un brujo con el amor de su vida...recuperado un siglo después.

Mis labios van a su mejilla. No beso, sólo acaricio, mis labios sobre esa piel deliciosamente resbaladiza. Sus latidos se aceleran, retumbando contra los míos. Sus manos van tras mi cuello, seguimos en una danza lenta.

Lentamente él gira su rostro, no se separa, mis labios resbalan sobre su piel, mientras él pregunta: -¿Dijiste Alexander?

Me tenso. Pienso en alejarme. Pero él me retiene. -¿Q-qué? -apenas puedo preguntar.

-Hace un momento. Hablabas de tu hijo, de Rafa, ¿dijiste "que me hizo cantar y hablar de nuevo el español, que hizo a...Alexander aprenderlo"?

No digo nada. No me di cuenta. ¿Lo hice? ¿Lo dije?

En algún momento tenía que suceder.

Mis ojos se cierran. Hemos dejado de movernos. Seguimos juntos. Sus manos siguen en mí, las mías en él. Seguimos encajando perfectamente.

Él susurra, demasiado bajo: -Quiero...besarte. Por favor, sólo no me mientas...

-Sí -suspiro la palabra. Y es un sí a todo, bésame, no te miento, dije tu nombre.

Sus labios van a los míos, es suave, es dulce, es desconcertante, es triste, duele.

Es perfecto y duele.

Sabe a amor, a locura, a él, a mí, al pasado, al presente, a...lágrimas.

Y sé que después de este beso todo puede cambiar.

¿Afectará esto su decisión de mañana?

¿Qué está pensando Alexander justo ahora mientras me mata con un beso que me tiene entre el cielo y el infierno?

CONTINUARÁ...

uf, que dramático el final de este día!
como dije, al terminar el 29, subiría la segunda parte para que ya la guarde quien quiera ❤ así que ya está Tu corazón me siente!
quieren extra de los pensamientos de Alec o pasamos al 30 sin saber qué pasa por su cabeza? 🙈

cumplí mis actualizaciones! más el inicio de Mi princesa. Hoy toca El favorito, y quieren alguna otra?