Tus ojos no me ven (malec)

Extra: deseo

Escribe para algunos, no para todos, porque nunca podrás complacer a todos.
(Stephen King)

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[EXTRA: deseo]

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Me he robado eso de un comentario por ahí. No me esperaba comentarios así de tantos de ustedes 🙈, sobre todo un par de mensajes privados me hicieron ver que tienen razón. Escribo porque me gusta, porque amo malec, y soy feliz con ambas cosas. Supongo que no a todos les gustara el ritmo, es normal, probablemente es la forma en la que lo dicen a veces la que incomoda. En fin, muchas gracias a todos, a todos de verdad, incluso a los que no les gusta, son trabas que pone la vida en todo...no sólo aquí. Y aclaro, porque ya también me salieron con eso, yo no pretendo que ataquen a nadie!
Para que me odien y se desesperen más (Lu se irá a Edom) me animé a escribir... ¡Pero un extra! que bien podría ser pasado y futuro/o alternativo *yo me entiendo*
bienvenidos si se animan a leer!

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Había sido antes de encontrar a Max. Precisamente esa mañana, cuando la conversación tomó ese rumbo...

Y Magnus lo recordaba justo ahora, un día antes de que terminara el plazo que podría alejarlo para siempre del amor de su vida, de su existencia.

Alec había llevado a la Academia a acompañarlo. Fue antes de que Simon subiera a avisarles del bebé brujo, abandonado en la entrada, que había sucedido.

Era difícil, por más que quisieran vivir el momento y no pensar en lo que podría suceder después, aceptar la idea de que algún día Alec le sería arrebatado por las garras de la muerte. Porque era lo inevitable cuando él era inmortal y el cazador no.

Habían llegado hasta la habitación y se habían tirado en la cama, abrazados, compartiendo el calor de sus cuerpos y el latido de sus corazones que hace mucho seguía un mismo ritmo.

De un momento a otro, Alec se había quedado inmóvil en los brazos de Magnus, en silencio, sólo aceptando las caricias y los besos que su novio dejaba justo ahora en su mentón, subiendo lentamente...

Hasta que notó como el nephilim se había desconectado y ya no respondía a sus acciones sobre él.

-¿Alexander?

Alec parecía no escuchar, sus hermosos ojos celestes estaban ocultos tras sus párpados, rebozantes de lágrimas que Magnus no veía.

-¿Alec?

Sus manos subieron hasta sus pálidas mejillas, acariciando lentamente en suaves círculos, provocando que Alec saliera de su estupor y abriera los ojos, cayendo así las primeras lágrimas...

-¡¿Alexander, estás bien?! -Magnus se sentó rápidamente, llevándose a Alec en brazos en el proceso.

-¿Qué? -a Alec le costó enfocarlo y darse cuenta de lo que sucedía, se sentía como saliendo de un sueño-. Sí, estoy bien, ¿por qué te detuviste?

El ceño de Magnus se fruncio y llevo un pulgar hasta sus ojos, arrastrando las lágrimas y viéndolas mal. -Estás llorando, por supuesto no estás bien. Dime qué pasa, habla conmigo...

-No es nada -intento salir del abrazo de Magnus y ponerse de pie.

Pero esos brazos fuertes del brujo sólo se aferraron más a él. Magnus se acercó a él, su nariz y sus labios recorriendo,  con toda la ternura posible, uno de sus hombros desnudos. -No hagas esto. No después de todo lo que hemos pasado, habla conmigo. Dime qué te pasa, ¿quieres un tiempo a solas?

-¡¿Qué?! ¡No! -la cabeza de Alec se alzó de golpe, sus manos buscando cualquier parte de Magnus para aferrarse.

<<Es precisamente el poco tiempo el problema>>, pensó.

-No, no me dejes nunca, Magnus.

Las lágrimas cayeron más fuertemente y ahí fue que Magnus lo entendió. Pero no dijo nada, se limitó a intentar borrar con besos y caricias los miedos de su ángel.

-Nunca te voy a dejar -le dijo, entre besos, cuando sus cuerpos ya estaban unidos, sus respiraciones aceleradas-, ni tú a mí.

Con eso último Alec buscó sus ojos, azul contra verde dorado, los ojos de alguien con sangre de ángel y alguien con sangre de demonio, pero ellos veían sólo amor en ellos.

Sonrió con tristeza y antes de que dijera nada, Magnus le preguntó: -¿Cuál es tu mayor deseo?

Alec no tuvo que pensarlo mucho.

-Tú -respondió, seguro, sin dejar de mirarlo, desde el corazón-, estar contigo, amarte y que me ames.

Eso ya lo hacían. Pero Magnus entendía lo que Alec decía entre líneas.

-¿Quisieras ser inmortal?

Alec no respondió y Magnus no presionó. La inmortalidad era algo difícil.

-¿Entonces que te parece encontrarnos después de esta vida?

El ceño de Alec se fruncio. -¿Hablas de muerte?

-No. Hablo de otras vidas. Sólo desealo y me tendrás siempre -se acercó a sus labios y habló sobre ellos-, ¿lo harías?

-Siempre te deseo -y rompió el espacio que quedaba entre ellos, para terminar, o comenzar, el beso.

Después de eso, Simon los había interrumpido y Max entró en su vida...

¿Cómo es que Magnus había olvidado eso? ¿Sería realmente posible que, por un deseo, hubiera pasado todo esto?

CONTINUARÁ...

gracias por tanto apoyo, honestamente no me lo esperaba 🙈
tranquilos que no voy a dejar la historia. Ninguna en realidad, odio las historias inconclusas (me ha pasado), así que, siempre y cuando no muera, las seguiré todas hasta concluir!

*y miren que sacan lo peor y lo mejor de mí, ¿vieron esa imagen de mi estado cursi en facebook? en la distancia ahí están ustedes en mi vida 😘*
Les cuento (a los que decidan leer, tendrán la primicia), veo que algunos no son felices con la historia (pero igual siguen leyendo, nunca entenderé eso), pero muchos de ustedes sí...mientras les guste (al grado de decirme "por eso me levanto", "me desvelo esperando actualización", "me alegras el día") aquí seguiré... así que, si al terminar, quieren continuación más allá de los 30 días... ¡lo haré! ❤