Capitulo 64

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-Buenas noches señora Malfoy ¿de qué desea hablar, acaso ya recuperó la cordura y hablará del condicionamiento de su hijo? –pregunto Remus al entrar en la celda de Narcisa.

-No es por eso que pedí hablar con usted –respondio ella levantándose del camastro en cuanto lo vio entrar- aunque si es por mi hijo.

-¿Qué pasa?

-Señor Lupin... No sé cómo está Draco, pero debe estar necesitando sus medicamentos, por favor... si hace falta suplicar, lo haré, pero dele lo que necesita.

Remus miró su rostro pálido y demacrado, resultado de sus horas de falta de sueño y angustia por su hijo, por lo que la invitó a sentarse de nuevo, haciéndolo él también a su lado.

-Pues verá señora Malfoy, no he hablado con él desde hace mas de veinticuatro horas, pero no he recibido ningún reporte de que este mal.

-Pero usted sabe que las necesita, tal vez los aurores que lo custodian oculten su síndrome de abstinencia para torturarlo... por favor, señor Lupin, tenga piedad de mi hijo.

Remus observo como la rubia mujer perdía ese orgullo cuando de su hijo se trataba y deseó que esa actitud la tuviera para convencer a Draco de desistir de su plan suicida, pero sabía que no pasaría, por lo que decidió compartir con ella, una parte de las declaraciones de los demás.

-No debería decirle esto pues es información confidencial, pero entiendo su aflicción.

-¿Qué pasa? –preguntó ansiosa, inclinándose hacia adelante.

-Usted no sabe que sucedió a ciencia cierta la noche en que destruyeron a Voldemort ¿o me equivoco?

-No, nosotras permanecimos escondidas en la habitación de mi hijo hasta que tuve que suplantar a Greyback.

-Entonces no sabe cómo o quien destruyó a Nagini.

-No.

-Bueno, pues fue Draco quien la mató.

Narcisa lo miró fijo para intentar descubrir alguna treta o engaño, pero al comprender que el auror era sincero, abrió la boca atónita.

-¿Qué ha dicho?

-Sí, tengo los testimonios de Arthur y Ron Weasley.

-Vaya... -respondio mirando a otro lado, como si poco a poco fuera asimilando la noticia que acababa de recibir- entonces ese monstruo murió por la mano más indicada.

-Y no solo eso, Nagini también lo mordió.

-¿Lo mordió? –Repitió extrañada y confundida- pero mi hijo está vivo ¿Cómo es que sobrevivió?

-Esa es la cuestión de la que voy a hablarle... resulta que él recibió de Fawkes, la espada de Gódric Griffindor, la cual tiene el poder de destruir un horrocrux, pero antes de lograrlo ella lo mordió y el recibió en su herida las lagrimas de Fawkes.

Narcisa no necesito más explicación, comprendió de inmediato lo que el auror quería decirle.

-Mi hijo sanó... sanó de esa herida y de sus demás males –musito como si hablara consigo misma.

-Tal parece que así es, así que Draco está libre de fármacos, por eso no ha sufrido síndrome de abstinencia.

Narcisa se levantó sin decir nada, impactada por lo que acababa de oír.

-Señora Malfoy... -dijo Remus entonces poniéndose de pie- él está sano ahora, ya no sufrirá tampoco de esas fiebres que merman su vida cada vez... ¿no le gustaría provechar esa oportunidad y luchar por su libertad?

EL CASTILLO DE LA SOLEDADDonde viven las historias. Descúbrelo ahora