Ellos, ella & yo

Talento

La verdad es que no, yo no tenía ningún talento, literalmente. Quizá no lo había descubierto, pero es sorprendente ver a personas que sí lo tienen y es tan natural para ellos como respirar. Angie fue quien me mostró aquella realidad y ella era el vivo ejemplo de convertir un talento en algo a tu favor sin que se te suba todo a la cabeza.

A mitad del segundo parcial y con todos quemándonos las pestañas por conseguir las mejores notas, Angie nos llegó con la increíble noticia de que participaría en un concurso de canto.

—¡Eso es genial! —exclamamos todos.

—Lo sé. Participará mucha gente, porque cuando me registré me entregaron el número ciento trece, y eso que solo era el primer día de inscripción.

—Bueno, es normal —dijo Sami—. Casi nunca hay concursos de canto en la ciudad. Y tú tienes una voz fenomenal, así que solo esfuérzate y lo tendrás en las manos.

—Gracias —respondió a la vez que sacaba unas hojas—. Hay canciones que me gustan mucho, y quiero que las escuchen todas. Luego se les cantaré y me dirán cuál es perfecta. El concurso iniciará en dos semanas con las audiciones y debo elegir una que me asegure un puesto en la siguiente ronda.

—Está bien —aceptamos todos.

—Pero nosotros no sabemos casi nada de canto —repuso Daniel—. No creo que pueda darte los mejores consejos, pero sí las voy a escuchar.

Angie sonrió al escuchar eso, y en ese momento Johan me dio un codazo en las costillas. Sí supe a lo que se refería cuando lo hizo. Angie nos pasó un papel con una lista, y pensaba que eran buenas canciones, aun cuando ni conocía al artista.

—¿Hips don't lie de Shakira? —preguntó Sami con confusión—. Pero si ella apenas canta, tú tienes más voz.

—Ya lo sé, pero es para cuando toque bailar a la vez.

—Espera —dijo Johan—. ¿Tú quieres deslumbrar con tus enormes caderas al jurado?

—Cállate tú —replicó y todos nos empezamos a reír.

—¿Qué opinas de esa canción? —me preguntó Daniel.

—No la he escuchado.

—¡¿Qué?! —exclamaron todos.

—No soy muy fan de Shakira.

—No es necesario, esa canción hace años sonaba todo el tiempo.

—Bueno, yo no la escuché.

Tomé el papel para ver las otras y recuerdo muy bien estas canciones.

Just give me a reason

Fire meet gasoline

Edge of Glory

Jueves

Cry you a river

Halo

Disco Inferno

Girls just wanna have fun

Hallelujah

No one

Pretty hurts

No conocía ninguna, así que aquella tarde, al llegar a casa, busqué todas en Youtube. Tuve que leer su traducción ya que no era muy bueno en inglés. Todas sonaban genial y todas tenían letras muy buenas, pero quién sabía cuál era la que Angie quería cantar en su audición. Me decidí por Fire mee gasoline de Sia y le escribí para decirle que aquella era mi favorita.

Tres días antes de su primera audición, todos fuimos a su casa para escucharla. La favorita de Sami fue Pretty hurts, mientras que Johan aseguró que Jueves era su pase de entrada al concurso; por otra parte, para mí la mejor interpretada fue Fire meet gasoline. Pero la decisión al parecer la tuvo Daniel cuando dijo que Halo era perfecta, y Angie concordó.

—Entonces eso es todo —dijo—. Es mi favorita porque me recuerda a ustedes, chicos.

Todos sonreímos al escuchar eso, porque el significado de la canción era muy bonito. Decidido eso, todos quedamos en ir a verla el día de su audición y apoyarla en lo que necesite.

—Tú lo tienes —le dije antes de ir a casa—. Está en ti, lo sé desde el primer día en que te conocí.

—Muchas gracias —me dijo y me dio un beso en la mejilla—, por confiar en mí.

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