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JINTAEGI SOFÁ
[ 4:03 am ]

Era temprano, jodidamente temprano como para que Jimin no se molestara con quien sacudía un poco su hombro. Gruñó y se volteó boca a bajo, empujando su rostro contra una almohada junto a un gemido, ignorando a quien quiera que continuaba sacudiéndolo, con más insistencia ahora.

"Jimin," Se escuchó un susurro familiar y ronco; Jimin pareció llorar porque lo único que quería era dormir tranquilo. Y una polla, pero ese no era el punto.

"Tae," Él medio gimoteó en la almohada, "son— como— las cuatro de la mañana... Déjame solo..."

"Bebé, escucha," Taehyung continuó, casi rebotando en el sofá para despertar a Jimin. "¡Es importante!"

Jimin suspiró, fue una larga respiración llena de sufrimiento, y se volteó para mirar a su novio demasiado emocionado, con sus ojos brillantes y bien abiertos. "¿Qué quieres?"

Taehyung sonrió terriblemente brillante. "Te conseguí una entrevista de trabajo"

Jimin se incorporó un poco y lo miró sorprendido. Él notó por el fondo de la habitación que el sol ni siquiera se asomaba a través de las ventanas, sólo una noche oscura teñida con las luces naranjas de la ciudad. Las nubes amortiguaban la débil luz de la luna. "¿De verdad?"

"Yup."

"Tae-Taehyung—" Jimin se quedó boquiabierto y luego lo abrazó por la cintura, enterrando su rostro sonrojado en su abdomen cálido. "Gracias. Te quiero demasiado, gracias," se las arregló para decir alrededor de la tela que cubría su boca.

Una mano cálida y reconfortante se coló a través de su desastre de cabello y pensó que podía oír la sonrisa en la voz de Taehyung cuando dijo, "Por supuesto."

—

Una semana más tarde, Jimin estaba vestido con un limpio suéter blanco metido en unos pantalones entubados, ambos de la tienda de segunda mano. La gabardina de Yoongi estaba cómodamente sobre su cuerpo, le iba un poco grande pero era lo suficientemente formal como para que no le quedase mal. Miró por encima su apariencia en el espejo del pasillo, sintiendo el golpeteo nervioso en su pecho aquí y allá. Llevaba una carpeta plana de manila con documentos importantes en sus manos y cuando metió los pies en las botas de Yoongi, dejó escapar un suspiro tembloroso.

Conseguir ese trabajo sería un gran paso para él y pensó que estaba a punto de cagarse los pantalones. La última vez que se sintió así fue cuando cortó por primera vez una gran cantidad de su cabello en el baño, hace tantos años.

Jimin apretó los ojos, mordiéndose el labio inferior para evitar que temblara. Él jadeó ligeramente por la sorpresa cuando un familiar y cálido cuerpo se presionó detrás de él, junto a unos largos brazos envolviendose alrededor de sus hombros. Unos labios suaves le hicieron cosquillas en su cuello hasta que Taehyung dijo, "¿Listo para irnos?"

El ceño de Jimin se arrugó y sus hombros se encorvaron mientras su corazón resonaba en sus oídos. "U-um," fue todo lo que pudo decir antes de que se ahogara y se interrumpiera.

Taehyung lo atrajo más fuerte hacia su cuerpo, besando su cabello y balanceándose junto a él hacia adelante y hacia atrás, arrullándolo. Las manos de Jimin se acercaron a sus brazos y se apretaron alrededor de sus muñecas, sólo para evitar que estas temblaran.

"Estarás bien," Taehyung dijo en voz baja y Jimin se permitió perderse en su voz, "Todo va a salir bien." Su voz se hizo más fuerte, sacudiendo a Jimin un poco con cada palabra para enfatizarlas. "Eres un hombre fuerte, seguro e independiente—"