14. Provocaciones

7.1K 809 215
                                    

Arrastré mis pies, dirigiéndome al aula de física con pesadez. No me gustaba la idea de tener que soportar un año entero de clases con Harris nuevamente. Bastante había soportado tomando química con él como para que me tocara tomar física con él también. ¿Acaso no tenían otra forma de torturarme? Podría soportar unos cuantos golpes, a decir verdad.

Hice una mueca de fastidio al ver la misma expresión monótona de Harris desde su escritorio. Nos miraba a todos como si fuésemos incompetentes que jamás llegarían a ser algo más que cajeros en McDonald's o en Target. Quizá yo no tuviese muchas aspiraciones para mi propia vida, pero tenía mucho en mi plato como para preocuparme por ello. Ya tendría tiempo para decidir qué hacer con mi vida.

Busqué un asiento cualquiera, Scott se sentó a mi lado y detrás de Isaac. Payton tenía francés a esta hora, por lo que no estaría en el mismo aula que yo. Eso me preocupaba un poco, aunque era Isaac era el que estaba más agresivo respecto a los gemelos, cuyos nombres descubrí que eran Ethan y Aiden.

De repente sentí una fuerte punzada de dolor en mi estómago, como si me hubiesen atravesado con algo. Me encorvé de dolor y agarré con fuerzas la mesa, mordiendo mi labio inferior para evitar hacer algún ruido, pero fue inevitable. El dolor era agonizante e insoportable en cierto punto.

— Scarlett, ¿estás bien? —preguntó Scott, preocupado.

Inhalé por mi nariz de forma profunda y entrecortada, para después dejar salir el aire por mi boca con lentitud. No sabía lo que estaba ocurriendo, pero de algo estaba segura, algo no estaba bien. La última vez que me había sucedido algo así fue cuando la madre de Allison intentó matar a Scott, aunque había sido completamente distinto. Aquella vez no había podido respirar.

Quizá porque la madre de Allison había intentado asfixiarlo al hacerlo inhalar acónito evaporado. ¿Eso significaba que alguien cercano a mí estaba siendo atravesado con algo en estos momentos?

Me estremecí por el dolor, pero me obligué a concentrarme en la clase. Mirando los labios de Harris moverse sin capar ni una sola palabra que salía de ellos.

— Están aquí por una razón —le dijo Scott a Isaac—. Dame una oportunidad de descubrirlo antes de que hagas algo, ¿sí? Isaac.

Isaac lo ignoró por completo, sus ojos clavados en el pizarrón sin prestar atención a lo que Harris estaba enseñando. Lo sabía por la forma en la que su vista estaba perdida y apretaba los puños hasta que sus nudillos se volvieron blancos.

Volví a sentir la punzada en mi estómago y casi me caí de mi asiento, revolcándome del dolor. Tenía que descubrir lo que estaba sucediendo.

— Scarlett, ¿qué sabemos sobre el impulso? —escuché que Harris me preguntó.

Intenté de enderezarme en mi asiento, mirándolo sin comprender su pregunta. ¿De todas las personas en el mundo me tenía que elegir a mí? ¿Acaso me veía como si supiese mucho sobre el tema? Porque de lo único que sentía impulsos era de quemarlo vivo en medio del salón de clases.

— ¿Perdón? —pronuncié en un hilo de voz.

Scott volvió a dirigirme una mirada preocupada, intentando comprender qué me ocurría. Por debajo de la mesa le extendí mi mano y él la miró confundida antes de comprender lo que le estaba pidiendo. Agarró mi mano y de inmediato pude sentir que el dolor aminoraba un poco. Él me estaba quitando un poco del dolor porque sino estaba segura que podría desmayarme. Era demasiado fuerte.

— Diría que me sorprende su peculiar desinterés en la clase, pero veo que son conductas aprendidas por su círculo de amistad —comentó Harris, dirigiéndole una corta mirada a Scott antes de volver su vista hacia mí.

ENEMY FLAMES ▲ TEEN WOLF   ➂Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz