Padrastro [2jae]

Ocho.

A la mañana siguiente tomé un baño, pero cada que hacia un movimiento brusco o hacia fuerza un dolor punzante se formaba en mi espalda baja, dolía mucho,  podía sentir mi piel caliente por dentro.

Salí del baño, tarde un poco mas en vestirme.

Mientras me ponía mis zapatos escuche el claxón de un auto. No le di importancia pensé que podía ser alguien mas o mi padrastro.

De nuevo el claxón volvió a sonar.

—Esta abierto. ·dije cuando golpearon la puerta de mi habitación.

Mi madre asomo su cabeza.
—Hay un chico abajo esperándote.

—¿Que?.–"pasare por ti mañana.."—Voy enseguida.–mi madre asintió y salió de mi habitación.

Había olvidado por completo lo que dijo jaebum ayer. Pero no pensé que se lo fuera a tomar en serio. Solo pensé que estaba bromeando.

Baje las escaleras despacio.
Sin hacer algo que vuelva a provocar la punzada de dolor.

Mi madre ya me esperaba en la puerta, trate de caminar lo mas normal, para evitarme preguntas por parte de ella.

Se despidió dándome un beso en la frente. Salí y justó en frente de mi Jaebum ya se encontraba recargado afuera de la puerta de su auto.

—Tardas demasiado, ahora sube o se hará tarde.–comento, para después adentrarse en su auto.

—No te pedí que vinieras.–dije en voz baja que solo yo pude oírme.

Rodee el auto y abrí la puerta del copiloto.
Meti un pie, después mi cuerpo, pero a la hora de caer en el asiento, el dolor volvió aparecer.

—ahh.–el quejido salio involuntario de mi boca, puse mi otro pie adentro. Recoste mi cabeza en el asiento. Sin cerrar la puerta. Estaba esperando a que el dolor pasara.

—¿Te sientes bien?.–preguntó Jaebum, mirándome con algo de preocupación.

—S-si estoy bien.

Lo vi salir de su auto, rodearlo y aproximarse a mi puerta para cerrarla.

Cuando lo hizo, regresó, se adentro y cerro su puerta. No dijo nada solo se quedó en silencio, mientras el auto seguía estacionado.

—¿Podemos irnos?.–pregunte, el dolor no había desaparecido del todo, pero ya era menos, y me era incómodo estar en silencio dentro del auto.

No dijo nada solo asintió y arrancó su auto.

Durante el camino ambos nos mantuvimos en silencio. Yo mirando a través de la ventanilla, mientras Jaebum mantenía su vista en el camino.

Cuando llegamos, apagó el auto, quitó sus llaves y salió de el.

¿Va a dejarme solo aquí? ¿Que no debería bajar yo primero? Pensé en cómo era posible que sólo bajara del auto y entrara a la escuela dejando a un extrañó dentro de su auto.

Tome mi mochila. Y alguien abrió la  puerta del lado donde yo me encontraba. Jaebum estaba parado justo enfrente de mi.

Pensé que se había ido.

Tomo mi mochila que estaba en mis piernas y la colgó en si hombro izquierdo.
Me tendió la mano, mientras me miraba fijamente a los ojos.

—Te ayudó.–pronunció casi en un susurro.

Tome su mano, y salí de su auto cerrando la puerta detrás de mí. Le di las gracias.

—Ya puedes devolverme mi mochila. –dije tratando de quitarla de su hombro.

—Olvidado, yo la llevaré.

—Pero...

—No hables, sólo camina. –dijo y tomó mi mano para entrar a la escuela.