XXV. Confrontation

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Nota de la autora: capítulos dos días seguidos? Ah, soy genial (?) okno. Tan solo tenía inspiración y decidí escribir y adelantar un poco :) espero que les guste!

***

Punto de vista de Niall

-¿Qué tal resultó todo? -me preguntaba Harry esa misma noche. No pude contenerme a llamarlo. Él era el único que sabía respecto a la situación de Alyssa, y necesitaba conversar con alguien al respecto. Sabía que podía confiar en él, que ni siquiera dudaría en contestar mi llamada.

Me lancé de espalda a la cama, dejando mi mirada vagar perdida en el blanquesino techo.

-Una mierda, lo único que pude conseguir fue que mantuviera un par de cabritas en su estómago -solté molesto conmigo mismo, con mi ineficiencia-. La llevé a Applebee's e intenté que comiera, y lo hizo. Por un minuto creí que todo sería más fácil de lo que imaginaba, pero en cuanto llegamos al cine, no pasaron ni cinco minutos y Aly ya corría al baño -solté un suspiro e hice una pequeña pausa antes de retomar el habla- ¿Qué se supone que le dijera?

-Entiendo... -murmuró Styles, tan decepcionado como yo-. Que porquería de situación en la que estás metido, Niall.

-Lo sé...

-Supongo que lo único que te queda por hacer es hablar con ella, ¿No? -mis ojos se abrieron de sobremanera. ¿Hablar con ella?, ¿Enfrentarla? No.

-¿Qué? -pregunté con la voz temblorosa.

-A lo que me refiero es que no tienes otra alternativa, Horan. Si no puedes ayudarla indirectamente, tienes que hacerlo directamente -tenía sentido, de todas formas, sonaba jodidamente aterrador. Realmente temía por cómo reaccionaría Aly.

-¿Cómo lo hago? -estaba perdido, totalmente perdido.

-Habla con ella, dile que... No sé, que sabes de sus hábitos alimenticios. Explícale que está mal, que tiene que detenerse. No creo que ella esté consciente del daño que se está haciendo, hermano -explicó.

-Lo haces sonar tan fácil...

-Y no lo es, pero no tienes otra alternativa. Ánimo...

Esa noche dormí inquieto, intranquilo, molesto, y con pesadillas donde números, imágenes de una balanza y huesos se mezclaban en mi mente.

A la mañana siguiente, despertar fue algo así como un alivio. Con intenciones de distraerme un poco, fui a visitar departamentos ubicados en Manhattan, esperando que estuviesen lo más cercanos al de Aly. Tras mirar unos cuantos, finalmente me decidí a firmar por uno de ellos. Sabía muy bien que por lo que se me venía encima, lo más importante en mi vida se reduciría a estar cerca de mi novia, y que comprar un departamento amueblado parecía ser lejos la mejor ayuda y solución del momento.

Punto de vista de Alyssa

Esa mañana recibí un llamado de Anna Petrova para que me presentara con ella en su oficina en cuanto antes. Con la idea de que probablemente trataríamos algunos detalles del desfile, o que quizás incluso me pediría realizar un par de fotografías para la promoción de este. De inmediato me duché y me vestí, para llegar así lo antes posible al lugar.

En cuanto entré, me percaté de que Anna no se encontraba sola, sino que una joven chica se encontraba a su lado, vestía una bata blanca y llevaba un bloc de notas entre sus manos. ¿Qué diablos era todo eso?

-Buenos días, Alyssa -me saludó, Anna-. Toma asiento.

-Buenos días -le correspondí, obedeciéndole.

Little Things » Niall HoranDonde viven las historias. Descúbrelo ahora