Diana (Z. M.) | εѕραи̃σl

Capítulo Treinta y Siete: Mejor

Capítulo Treinta y Siete

Diana 2012:

Las cosas estaban muy bien. Sabía que ella regresaría. Sabía que no era lo suficientemente fuerte para alejarla por mucho tiempo. Me quedé acurrucada en la cama del hospital, con los brazos alrededor de mis rodillas. Me rehusé a comer la merienda así que me inyectaron algún reemplazo nutricional en el suero. Grité en rechazo e incluso traté de ahuyentar a algunas de las enfermeras, pero no me escuchaban. Una vez que me inyectaron la comida, me callé. Nadie podía hacerme hablar e iba a quedarme así. Ellas no lo merecían.

Me encogí en mi agarre y exhalo. Estúpida, estúpida, estúpida. ¿Por qué debería desear mejorar? Finalmente soy delgada. Recuerdo a la enfermera que me pesó. Cuando ella vio el número, 98 frunció el ceño; pero yo no podría haber estado más feliz. Finalmente bajé de 100. Pero, estaba segura de que recuperaría eso. Estuve comiendo tanto desde que llegué aquí. Casi mil calorías por día. Podía prácticamente sentir la grasa en mis huesos.

La puerta se abrió y no observé. Tampoco merecían mi atención. ¿Cómo se atreven a destruir tu belleza? — Diana, ¿qué está pasando? Creí que estábamos llegando a un progreso. —Miro a Zayn y me encojo de hombros.

—Simplemente no puedo hacerlo. No voy a retroceder y llegar a donde estaba antes.

Zayn se sienta en la cama y juega con sus pulgares, nervioso—. No tienes que hacerlo. Comer miles de calorías por día no te hará gorda. Tienes que darte cuenta. Lo dijiste, ayer. ¿Qué pasó con eso?

Regresé.

Me encojo de hombros—. No sé, todo lo que sé es que no puedo.

Zayn gime frustrado y se para, lanzando una de las almohadas al otro lado de la habitación—. Maldición Diana ¿quieres mejorar? —Sé que es una pregunta retórica, pero no me detengo.

—No sé; tal vez.

Zayn exhala y se calma; retomando su lugar junto a mí. Coloca su mano en mi espalda y la acaricia levemente—. ¿Por qué?

—No tengo a nadie. Todos dicen estar ahí para mí, pero en realidad no lo están. Mis padres me visitan poco.

—Me tienes a mí. ¿Por qué eso no es suficiente?

Lo observo y hago contacto visual con él. Nuestro color de ojos es tan similar, es casi como mirarse a un espejo; excepto que sus ojos aún tienen trazos de vida en ellos. Es obvio que está tratando de contener las lágrimas. Me estiro y seco el rastro de una lágrima de su mejilla.

—No llores por mí. Eres suficiente; el problema es que yo no lo soy.

Zayn coloca su mano sobre la mía y sonríe débilmente—. Si tan solo supieras que lo eres. Eres más que suficiente y solo porque un par de estúpidos no pueden ver lo que vales, no significa que no tengas nada.

Zayn lleva mi mano a su regazo y acaricia el dorso. Mi mano luce tan pequeña y frágil en la suya que es fuerte—. Quiero ayudarte, pero honestamente no sé como. —Miro nuestras manos por un rato, sin meditar, pero aún pensando. ¿Cómo puede ayudarme si ni siquiera yo sé por donde comenzar? Como mejorar cuando quiero, pero ella no. ¿Cómo puedo sujetar la mano de alguien como ayuda cuando tengo que sostenerme de mi barco que se hunde? Siento lágrimas llenar mis ojos y el calor del dolor en mi pecho.

—Quiero mejorar. —Hipo antes de comenzar a sollozar.

Coloca su brazos alrededor de mí y me abraza contra su pecho y lloro; humedeciendo su camiseta. Me mece de un lado a otro y soy capaz de decir lo siguiente—. Sólo que no sé como puedo hacerlo. —Zayn coloca su barbilla sobre mi cabeza y exhala, estremeciéndose.

—Bueno, es por eso que estoy aquí. Cuando te dije que quería ayudarte, esas no son solo palabras. Quiero que seas íntegra de nuevo.

Él sigue abrazándome fuerte contra su pecho y nos quedamos en silencio. Suspiro, finalmente calmada y me alejo de él; secando mis lágrimas—. Gracias. Disculpa por estar así. Antes era una persona mucho más divertida. —Río sombría; tratando de recordar como era antes de esto. Era solo la Diana que adoraba jugar fútbol y sentía una atracción por mi vecino. Ahora, no sabía quien era en realidad.

—Bueno cuando mejores tenemos que salir para ver como es la Diana verdadera. —Asiento, pero los nervios me carcomen. ¿Le gustará mi verdadero yo? Zayn se acomoda en la cama y se recuesta para relajarse, estirándose para tomar el mando de la televisión. Mientras busca entre los canales, la puerta se abre y alguien entra. Miro y me encuentro con un chico bronceado con una sonrisa brillante. Me levanto, sorprendida y Zayn nota mi movimiento. Observa al chico.

—Oh, hola. Um, ¿quién eres tú?

Estoy tan impresionada que apenas puedo hablar.

—¿Luis?

©liveoutsidethelines

OMG!!!!!!!! ¡LUIS HA VUELTO! ¡VOLVIÓ POR DIANA! O.O esto me asombra, en serio pero quiero saber como reacciona DIana AAAAAAAAAAAAAHHHHHHHH y Zayn e.e ¿cómo reaccionará?

¡MUCHAS GRACIAS POR LEER!

PD: Disculpen mi tardanza en actualizar, falta poco para que la historia termine :c