Capítulo 22.

8.3K 340 13
                                    

Nos sentamos uno frente al otro, yo esperando a que él hablara y él buscando las palabras exactas que decir. Me mordí el labio por dentro nerviosa, ya queriendo escuchar un “quiero que vuelva a ser como antes, lo siento” de parte de Niall.

-______, yo…-comenzó- Perdón por tratarte como te trate. No te lo merecías, también trate mal a los chicos y tampoco se lo merecían. Estaba molesto por todo y, por alguna estúpida razón, sentía que era tu culpa. Pero no lo era. No era culpa de nadie. –dijo e hizo una pausa para luego continuar. – o tal vez haya sido  nuestra por no haber dado más.

-Dieron todo lo que tenían.- le dije. El se encogió de hombros y luego continuó hablando.

-de verdad lo siento. Cuando llegue a casa y me puse a ver videos de los shows en vivo me di cuenta de cuánto nos ayudaste y que en realidad llegamos allí por ti.

- no fue por mí, fue por ustedes. –le conteste y el sonrió.

-el punto es que estuve mal al hablarte de esa forma. No te lo merecías y no me da cuenta de eso hasta que fue muy tarde para pedirte perdón. –

-¿Por qué no me llamaste?

-quería hacerlo en persona. Es más… honesto. –dijo.

         Sonreí. Tenia ganas de abrazarlo, y con eso demostrarle que estaba todo olvidado, en el pasado. Suspire feliz y él se paró, abrió sus brazos y sonrió.

-Es hora de un buen abrazo, ¿no?-pregunto. Yo asentí y lo abrace fuertemente.

         Me sentía tan bien rodeada de sus brazos, pegada a él, oliendo su perfume, sintiendo su corazón latir, su respiración. Me sentía feliz  y completa…completamente enamorada de Niall Horan.

         Pero la relación sería complicada gracias a su fama, sus fans y sus horarios. Sabía que si mi padre nos dejaba estar juntos había cosas que debíamos respetar. Pero… ¿Por qué estaba pensando eso si ni siquiera soy novia de Niall? Era totalmente tonto e inútil pensar en eso porque no era real. No tenía la necesitad de pensar que haría.

         Pero yo podía cambiar las cosas. Si le decía lo que sentía por el tal vez las cosas cambiaran para bien, tal vez el sentía lo mismo que yo, tal vez no se animaba a decírmelo, tal vez sea otra razón por la que él me trato así pensando que sería más fácil sobrellevar el extrañarme si estábamos peleados. Me separe de él y le sonreí. Tenía que hacerlo en ese momento o nunca más lo haría.

 -Niall, yo…tengo algo que decirte. –dije algo nerviosa pero decidida.

-¿Qu…- dijo pero nos interrumpieron.

-Niall, nos vamos. –dijo Liam quien tenía medio cuerpo hacia dentro del lugar. Niall asintió y luego me miro.

-luego me dices.- dijo y camino hacia la puerta para encontrarse con Liam y los demás.

         No podía creer que había perdido la oportunidad de decirle lo que sentía. Tenía la confianza necesaria en ese momento, ahora tendría que volver a juntar confianza, fuerza, voluntad  y coraje para tratar de decírselo.

         Desdoble el papelito que me acababa de pasar Jazmín disimuladamente mientras estábamos en clase de Historia. La profe hace las clases súper aburridas y nosotras siempre terminábamos estudiando de libros e internet para aquella materia, por lo que unos minutos que no prestara atención no me harían daño.

 “¿Estaba Niall en la camioneta?”

“ Si. Después fuimos a casa, cenamos y hable con él sobre nuestras discusiones. Me pidió perdón y ahora estamos bien”

“¡¿Lo perdonaste?! No puedo creerlo. Tendrías que haberte hecho la difícil.”

“¿Por qué?”

“Porque si. El tiene que saber que estuvo mal, y a pesar de que lo sabe, porque supongo que te lo dijo, tiene que sentirlo. Si te hubieras hecho la difícil el estaría rogándote ahora”

“No necesito que lo haga, además quería estar bien con él”

“ambas sabemos que te encantaría que Niall Horan te rogara”

“Voy a tener que quemar esto, antes de que alguien lo vea.”

“que graciosa, amiga”

        

-¿En serio lo perdonaste así tan rápido?- exclamo Jenny mientras almorzábamos.

-Le dije lo mismo – agrego Jazmín, mientras negaba con la cabeza como si estuviera indignada. Max y Frankie simplemente no nos escuchaban, estaban en su mundo, hablando de otras cosas con Christian, el novio de Jazmín, nuestro nuevo amigo e integrante de la mesa. El no sabía de mi secreto porque yo no confiaba demasiado en él como para contarle eso, por eso teníamos que cuidar todo lo que dijéramos frente a él.

-______, deberías haberte hecho la difícil.- comento Jenny.

-no entiendo porque. Es decir… quiero estar bien con él, ¿Por qué histeriquiarle? No tiene sentido alguno.- dije algo molesta.

- es ley que la mujer le histeriqué al hombre, amiga- dijo mi amiga morocha.- y más aun cuando el cometió un error tan grande como ese.

         Negué con la cabeza y comencé a hablarles de otro tema. Ellas siempre hacían eso con los chicos pero a mí no me gustaba, además capas que si me hacia la difícil Niall se cansaba de pedirme perdón y no arreglábamos nunca las cosas.

         Salí del colegio junto con mis amigos, como siempre. Jazmín y Christian se fueron caminando tomados de la mano, ya que cumplían un mes más de novios y se iban a tomar algo juntos. Jenny tenía clases de canto mientras que Max y Frankie no harían nada en la tarde, al igual que yo. Ninguno tenía algo planeado, pero a veces las cosas  cambian, salen planes en el momento que uno no tenía previstos y que, generalmente, terminan siendo las mejores salidas de todas.

         Max señalo una camioneta negra estacionada en la puerta del colegio. No era necesario preguntarse quienes estaban allí dentro, por lo menos nosotros no lo necesitábamos hacer porque sabíamos perfectamente quienes estaban allí: One Direction.

         Mis amigos me miraron con dudas, ya que no entendían que hacían allí y la verdad era que yo tampoco lo sabía, así que solo me encogí de hombros y le mande un mensaje de texto a Louis preguntándole que hacían allí.

         “Vamos a comer algo y  queremos que vayas con nosotros. ¿Vienes?”

-me invitaron a comer algo- dije.

-bueno querida ______, vete con los chicos famosos- dijo Max dramatizando y actuando como si yo los estuviera cambiando y eso a él le doliera. Es decir, obvio que le dolería si los cambiara pero eso no iba a pasar nunca. Negué moviendo mi cabeza y sonreí.

-nos vemos mañana, idiotas- les dije. Siempre nos tratábamos así, con insultos. Creo que es un poco la base de nuestra amistad, siempre molestándonos el uno al otro.

         Me dirigí hacia la camioneta y me metí en ella rápidamente para que nadie los viera más que yo. Se volvería todo el mundo loco si supieran que One Direction está ahí, o bueno, tal vez solo las chicas.

-esto es un secuestro. Es mejor que no grites ni te muevas mucho –dijo uno de ellos fingiendo la voz y tapándome la boca cuando entre. Segundos después se escucharon carcajadas y la mano que tenía sobre mis labios se alejo de mí, dejándome reír junto con ellos.   

The Secret [Niall Horan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora