Capítulo XVIII

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Alex

Salí de la casa de Samanta sin decirle nada, me dirigí hacia mi casa y Sara mi hermanastra no estaba algo que me pareció muy extraño ya que ella no era de esas chicas que no llegaba en todo el día a casa hasta en la noche, por el contrario, ella llegaba antes que yo, me preocupo un poco ya que ella procuraba llegar lo más temprano posible para hacer sus deberes. Ella era la única persona en esta casa con la que me llevaba bien.

Supuse que se había ido a casa de alguna amiga y no le di más importancia subí a mi cuarto y me acosté en mi cama me puse a pensar en lo que me había dicho Diego esa tarde, en realidad su actitud era un poco ilógica pero también fue incorrecto que yo me molestara, aunque si él hubiese estado dispuesto a hablar conmigo yo no habría tomado esa actitud, bueno no sé. Me desvestí y me metí al baño. Cuando salí, mi celular estaba encendido lo revisé y tenía un mensaje de Carlos.

-Podemos vernos en el parque central?

Claro- le conteste enseguida

Por alguna razón al ver que el mensaje era de él me emociono como una niña, y pensar que él me quería ver me emocionó todavía más, me vestí rápidamente tomé mis llaves y mi celular y me fui al parque.

Cuando estaba llegando lo vi recostado en una banca con un brazo sobre la cara, me acerqué y le apreté el estómago él se levantó rápidamente con una cara graciosa.

-Hola- le dije sentándome a la par de él.

El simplemente no me contesto y se acercó hasta juntar nuestros labios en un lento beso. Al separarnos sentí que mi cara ardía y se tornaba de color rojo entonces agaché la cabeza y él se rio.

-Hola.

-Y dime para que me dijiste que viniera?

-Es que en el colegio no terminamos de hablar y pue tenía tiempo y quería saber qué era lo que me querías decir.

-Aaaa eso....

-Si eso.

Me dio dos besos pensé es imposible que me rechace (Ja! Pobre iluso)

-Bueno lo que te quería decir es que... me gustas- dije murmurando, pero lo suficientemente alto como para que me escuchara.

-Lo sé- dijo sin expresión alguna en su cara.

-Y qué opinas?

-Opino que no tenemos culpa de enamorarnos de alguien que no nos corresponderá ese amor

No puede ser.

-A que te refieres con eso- dije algo nervioso

-Tu no me gustas a mí, y considero que deberías buscar ayuda porque eso no es normal.

-Pero me besaste!!!-

-Porque pensé que era un juego además me hacía gracia tu reacción.

-Pero qué clase de persona juega de esa manera con los sentimientos de otra.

-Oye lo siento sí, no es mi culpa que no me gusten los hombres

-JODETE!!- le dije y me fui de allí.

Me sentía completamente desecho, sentía como, después de haber jugado conmigo me tiraban a la basura, eso me sentí una basura. Camine hasta mi casa y me fui directo a mi habitación, entonces empecé a llorar de manera desconsolada, me levante y entre al baño, abrí el grifo del agua, tome la cuchilla y la deslice por mi muñeca mientras el agua caía directamente sobre la herida, entonces toda la sangre empezó a caer, pero a diferencia de otras veces ese ardor no me era suficiente, e inconforme con el ardor seguí haciendo cortes en ambos brazos, en mi abdomen, en mis piernas, en mis tobillos y así hasta que no quedara espacio en mi cuerpo, y entonces me metí a la ducha y deje que el agua cayera sobre todos los cortes, hasta entonces empecé a calmar un poco el dolor mental, la sangre recorría mi cuerpo hasta llegar al piso. Salí del baño y me preparé para dormir.

Cuando estaba acostado revise mi celular y tenía 10 llamadas perdidas de Sara, entonces me di cuenta que no había llegado en todo el día y me preocupe en serio. La llamé inmediatamente.

-Hola?- dijo Sara del otro lado de la línea en un tono que hizo que me estremeciera.

-Hola, que paso? Por qué no has llegado a casa? te paso algo? dónde estás?

-Murió- dijo soltándose en llanto.

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