Capítulo 8: Surprises

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La gran maleta que Lilly trajo cuando llegó a Rusia estaba abierta y toda la ropa esparcida por la habitación; había sido todo un reto elegir la ropa para aquella salida con el chiquillo, quería verse bonita ya que sería la primera vez que saldrían sin que la música o el patinaje fuese un tema de por medio. Al final había decidido por colocarse un vestido bordo ajustado a la cintura que le quedaba sobre las rodillas, medias negras debajo para protegerse del frío, botines cafés y una chaqueta negra de aquellas que eran como peluches de felpa. No lograba entender todavía los nervios que le producía salir con el punk ruso, pero parte de sus posibilidades radicaba en el hecho de que el joven no pasaba para nada desapercibido.

Cuando el timbre sonó saltó desde el sofá donde estaba sentada esperando que su compañero llegara, y fue a abrir antes de que sus abuelos lo hicieran por ella. Al abrir la puerta se encontró con el rubio jovencito parado frente a ella utilizando una camiseta de tigre gris oscuro, una sudadera negra y una chaqueta de un gris claro. Cargaba su bolso de entrenamiento al hombro, ya que como habían acordado el día anterior, él pasaría por ella y dejarían su cambio de ropa allí para llevárselo cuando volvieran. Lilly lo invitó a entrar, ante lo que él asintió en silencio, nunca antes había pasado a su casa.

La jovencita lo guió hasta la acogedora cocina donde su abuelita estaba preparando unos dulces tradicionales, mientras que Grigory tenía el periódico abierto sobre la mesa revisando los resultados del fútbol. Hubo una presentación formal donde el chiquillo sacó a relucir lo mejor de sí, saludando a ambos ancianos con una sonrisa estampada en el rostro; mientras que sus abuelos elogiaron al patinador por ser un destacado deportista que representaba al país. Lilly no pudo ocultar su sorpresa, no sabía que ellos lo conocían, ni mucho menos que mirasen las competencias del patinaje artístico.

Cuando consideró que era momento de marcharse, sonrió tomando la mano de su compañero, dejando el bolso sobre una silla y lo arrastró hasta la salida de la casa despidiéndose de sus abuelos y prometiendo que no llegaría tan tarde. Le soltó la mano apenas estuvieron fuera al percatarse la mirada que él le había dado, a lo que disimuló el rubor de sus mejillas mirando hacia otro lado. Hubo un silencio entre ambos mientras caminaban a tomar un taxi que los llevaría al centro comercial, por lo que Lilly, sabiendo que el chiquillo no rompería el hielo, decidió instaurar un tema.

"¿Qué tal la práctica?" consultó al recordar que cuando cogió su mano ésta llevaba una venda. Él frunció el ceño soplando el mechón de cabello que siempre cubría parte de su rostro, aquella ropa que utilizaba hacía resaltar lo níveo de su piel y el intenso verde esmeralda de sus ojos.

"Bien, pero caí mal y me quedó doliendo la muñeca." Comentó tocándose la venda con resentimiento, Lilly hizo una mueca con la boca en preocupación por el estado del chiquillo, eran horas las que pasaba practicando y dando saltos en el hielo, era de esperarse que cosas como esas sucedieran.

Cuando subieron al taxi y Yuri le comunicó en ruso al hombre que se dirigían al centro comercial, Lilly se puso a hurgar en su bolso buscando un pequeño tarrito que siempre llevaba consigo. Yuri miraba algo nostálgico por la ventana, no sabía exactamente a qué se debía, pero lo asoció a la venda que cubría su mano, debía sentirse frustrado. Cuando encontró lo que buscaba dándole un golpecito con el codo llamó su atención y le tendió el pequeño el frasco al rubio.

"3 veces al día para el dolor, cuando practico y estoy tensa suele dolerme ahí también así que..." estaba explicando cuando cayó en cuenta de que estaba hablando demás y que nada de lo que le estaba contando en realidad le importaba a su compañero, o al menos eso le parecía que fuese.  Yuri se limitó a asentir desviando su mirada hacia el exterior, se notaba tenso y creyó que debió haber sido por el hecho de que no quería seguir tratando el tema.

Don't you dare  (Yuri Plisetsky)Where stories live. Discover now