Capitulo 23: Crush.

1.8K 103 5
                                    

El auto se detuvo antes de golpearme, yo tenia mis ojos cerrados y mis piernas comenzaron a temblar. Al no notar el impacto caí al suelo del susto y teniendo un remolino de sentimientos desagradables termine vomitando la cena. Maldición, me sentía acabada.

- ¡Diablos, mujer! Deberías fijarte más por donde sales corriendo. - la voz del conductor inundó mis oídos y trate de calmarme para poder comunicarme.

Limpie mi boca con el dorso de mi mano y me puse de pie.

- Lo siento. - dije con mi rostro hacia abajo. Me sentía avergonzada.

Note que daba vueltas mientras pasaba sus manos en su cabello y me fije que debía ser un chico de algunos 19 años tal vez. No podía ver su rostro, pero con solo ver su vestimenta podía deducir su edad.

- ¿No te lastimaste? - se giró repentinamente y volví a bajar el rostro. Negué con la cabeza y limpie mis lagrimas. - ¿Estas bien? - hablo mirando mi vomito. Que vergüenza. No respondí. - ¿Cuál es tu nombre? ¿Vives por aquí? Podría llevarte a tu casa. 

Entonces me atreví a levantar mi rostro. Se trataba de mi crush. Mierda, era mi crush, mi crush estuvo a punto de matarme y esta viendo mi vomito. Diablos, no me imagine este encuentro de esta manera. 

- ¿Te conozco? - pregunte aun sorprendida

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- ¿Te conozco? - pregunte aun sorprendida.

- ¿A mi? No estoy seguro. Acabo de mudarme hace una semana. - contestó. - Es un alivio que puedas hablar, creí que tendría que usar mi técnica de letras mudas. 

Fruncí al ceño y no pude evitar reír un poco a su actitud.

- Estoy bien, no me hice daño. Me llamo Skyler. Vivo a unas cuadras. No quiero molestarte, iré caminando. - respondí a todas sus preguntas anteriores.

- Es un alivio. Me llamo Jeff. También vivo a unas cuadras y te llevare a casa. Sube al auto. - señaló el auto y caminó hacia la puerta del piloto.

Bueno, no puedo negarme a él. Me subí a su auto. Miraba de reojo su perfil, se miraba el doble de guapo en persona. 

- ¿Podrías dejar de verme? Me pones nervioso. - volteó a verme fastidiado y yo abrí los ojos en par. Mierda.

- Perdón. - hable nerviosa y mire al frente. - Mi casa esta en la siguiente calle. - avise.

- ¿Enserio? Yo vivo justo a la vuelta. Vivimos cerca y ni siquiera te había visto.

Golpe bajo. ¿Así o mas ignorada?

- Yo tampoco. - mentí para sentirme un poco mejor. - Es aquí donde están esos columpios. - señale la casa.

Jeff detuvo el auto.

- Bueno, chica. Entra a tu casa, descansa, debiste pasar un mal momento y deja de intentar suicidarte.

- No intente suicidarme. - me defendí.

- Pueda que no, pero si vomitaste toda tu cena. No vayas a dejar ese estomago vació. - rodó los ojos. 

ImposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora