Capitulo 3

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Eran finales de septiembre. Me había acoplado al grupo de Emma gracias a esa tarde donde comimos pizza, jugamos vídeo juegos y comenzamos a bromear entre todos. La mayoría de días de la semana me pasaba el receso con ellos y algunas veces con Sophia, ya no la tomaba como mejor amiga desde lo que hizo, pero seguía hablándole. Ella simulaba que no le importaba que yo me fuera con ellos, pero sabia que cuando se enteró que Blake ahora me hablaba, se enojaba y mucho.

—Chicos, este sábado tenemos una fiesta. —dijo, Aubrey.

Aubrey era una chica pelirroja y muy similar a mi, le gustaban los libros y tenia una leve afición al k-pop. Me llegué a sentir muy cómoda con ella cuando tuvimos una platica solamente entre las dos.

Ya me había aprendido los nombres de todos ellos, a veces los mezclaba y me molestaban por eso, pero terminé controlarlos cada uno.

—¿Quién cumple años? —preguntó, Isabella.

—¿Se recuerdan de la chica que es bien loca? La que decía que estaba embarazada y todas esas estupideces. —habló, Lily.

Lily era una chica de piel morena la cual le gustaba salir con sus amigos y pasar molestando todo el tiempo. A veces sentía que le molestaba mi presencia, pero luego me daba cuenta que eran cuestiones mías, simplemente ella es muy seria.

Todos asintieron, menos yo. No sabia quien diablos era ella.

—Cumple años este sábado, nos invitó a su fiesta. ¿Vamos?

—Yo no iré a esa cosa. —habló, Max. —Ella está loca.

—Sólo iremos a divertirnos entre nosotros. —le pegó, Emma. —Vamos. Podemos ir a bailar, beber un poco y pasarla bien.

—Tiene razón. —dijo, Isabella. —Tenemos excusa para regresar tarde a casa. —elevó los dos pulgares.

—Vamos. —apoyó, Blake. —¿Todos pueden este sábado? —preguntó.

Todos contestaron "sí", menos yo.

—¿Y tú, Skyler? —preguntó, Blake.

Quedé en silencio.

—No lo sé. Debo pedir permiso. —sonreí avergonzada.

—Igual nosotros. —se encogió de hombros, Emma. —Si no te dejan iremos todos a pedir permiso, así que no te asustes. —rió.

—Pediré permiso, estoy segura que me dejaran. —sonreí.

—Nos avisas, Skyler. —Aubrey sonrió.

Asentí.

***

Estaba guardando las cosas de las clases anteriores en mi casillero cuando escuché que alguien estaba parado detrás mía.

—Hola, hermosa. —saludo en broma, Blake.

—Eso me desagrada y lo sabes. —solté mientras cerraba mi casillero.

—¿Porque crees que te molesto así entonces? —rió.

Me giré y lo empujé un poco para que no estuviera muy cerca de mi. A pesar de que me moría por tenerlo cerca.

—Puedo ir a hablar con tu mamá, ¿olvidas que nuestras mamás se conocen?

—Ya lo sé, Blake. ¿Todavía se hablan? —pregunté extrañada.

—Sí. Tu mamá todavía va al gimnasio de mi madre. Todos los sábados en la mañana.

—Deja de controlar a mi madre. —reí.

—No puedo evitarlo. Yo también voy al mismo horario que ella. —se excusó. —Ella me sigue llamando "lindo muchacho de ojos grises".

—No puedo creerlo. - murmure avergonzada. —Debe ser costumbre. —reí. —Me darán permiso, jamás he hecho algo malo y siempre saco buenas notas. Tampoco les pido muchos permisos, así que estoy segura que me dejaran ir.

ImposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora